Impugnaciones en Jujuy. El régimen político busca preservar sus privilegios y negociados

Días antes fue impugnado el candidato a gobernador Guillermo Snopek, del llamado “peronismo disidente”, en su caso, el pedido tuvo origen en el PJ oficial. A diferencia de Demarco, Snopek podrá mantener su candidatura a Constituyente.

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Si bien en ambas impugnaciones hay motivos formales para hacerlas, de fondo se trata de un ajuste de cuentas por parte de una Justicia electoral encabezada por un juez de lazos directos con la UCR de Gerardo Morales.

Recordemos que en los pedidos de impugnación se hicieron apelando al Art. 127 de la Constitución provincial que prohíbe la presentación de candidatos a gobernador que mantengan un grado de filiación hasta cuarto grado de afinidad con el primer mandatario en ejercicio (Snopek es cuñado de Morales). Y en el caso de Demarco, este fue destituido de su cargo de Intendente e inhabilitado por 10 años a ejercer cargos públicos por el Concejo Deliberante de Perico, a partir de una denuncia por apropiación de un terreno público –anexado a su domicilio- y la entrega de otro terreno a un empleado municipal.

El caso de Snopek es escandaloso ya que siendo “su cuñado” se presenta por un partido que se reclama opositor y Morales tiene su propio candidato. No habría con la candidatura de Snopek una continuidad del gobierno de Morales como intenta evitar la Constitución. En el caso de Demarco, es acusado de corrupción y fue destituido por el Consejo de Perico, pero no tiene en la Justicia una condena firme, que es lo que se precisa legalmente, como mínimo, para solicitar su impugnación como candidato a nivel provincial.

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No obstante, el fallo del tribunal electoral muestra la decisión política de un régimen que no admite ningún tipo de disidencia. En estos casos, incluso, de sectores que son parte de las fuerzas políticas tradicionales y más aún partidos que como los libertarios, lo critican por derecha.

Por fuera de los ajustes de cuentas entre las fuerzas tradicionales y sus alas díscolas, la cuestión de fondo es que se intenta fortalecer de esa manera un régimen cuyas cabezas son el propio Morales y la UCR, y el PJ de Rivarola. Ellos ordenan el escenario político a su gusto. Hoy pasa contra Snopek y Demarco. No hace falta mucha imaginación para pensar con la saña que podrán hacerlo contra quienes realmente nos oponemos a este régimen policial y, como la justicia se puede habilitar para ser usada contra quienes luchan contra los planes de ajuste de radicales y peronistas. Esto no es cuestión de futuro. Ya en el 2017, en Libertador General San Martin, los radicales intentaron un fraude contra el Frente de Izquierda que se había impuesto en las elecciones a Concejo, cuestión que solo fue evitado por una movilización popular. Gastón Remy, electo diputado provincial, fue impedido a asumir su cargo por votación unánime de peronistas de Rivarola y radicales de Morales.

De allí que la pelea contra los partidos de oposición incluso los que lo hacen por derecha como los libertarios, es una tarea de los y las trabajadoras, las mujeres y la juventud. Permitírsela al Estado, no es más que cavar nuestra propia fosa, fortaleciendo la herramienta más dura que tienen los empresarios para usarla más temprano que tarde, contra quienes los enfrentan de verdad.

En este sentido, la reforma de la Constitución llamada por Morales, busca darle un rango constitucional a todo este régimen anti democrático que se enorgullece de “mantener el orden” en base a perseguir a quienes protestan. Ahora intentarán que figure la prohibición de cortes de ruta en la Constitución, limitar el derecho de defensa en caso de multas por contravenciones (que se libran a granel en cada marcha y no podrán ser apeladas). Morales no pudo imponer su maniobra reeleccionista, pero quiere dejar su herencia con una Constituyente reaccionaria. De ahí nuestra oposición y el llamado unitario a las organizaciones sindicales y sociales que se oponen a esta Constituyente a pelear en común para derrotarla.

Desde el PTS-FIT somos conscientes que la izquierda se ha constituido como un canal de expresión de bronca contra este régimen de los poderosos. Hacia las elecciones del 7 de mayo tenemos un gran desafío para fortalecer a la izquierda como una fuerza política capaz de organizar en forma consciente a cientos de trabajadores, mujeres y jóvenes para darle más fuerza a sus peleas contra el ajuste y una salida de fondo a favor de las mayorías. En ese camino, advertimos que este régimen va a intentar todo tipo de maniobra fraudulenta como hace siempre y, para ello ya cuenta con el piso electoral del 5%. Quieren que no haya oposición en la Legislatura y los concejos. El apoyo que se ve en la calle y en cada lugar de trabajo y estudio a la izquierda, intentará ser burlado por este régimen antidemocrático. Es vital contra ello que logremos la mayor red de fiscales en cada escuela de la provincia, de trabajadores, de estudiantes y de organizaciones que se opongan a este régimen fraudulento. Defender el voto al FIT es una medida de autodefensa. A este desafío es que te convocamos porque nuestras ideas son las únicas que pueden lograr la organización más amplia y democrática que haga volar por los aires un régimen podrido de políticos al servicio de los dueños de Jujuy.