Sobre las argucias del discurso “pitita”.
Domingo 4 de julio de 2021
En las últimas semanas, distintos líderes de oposición e iglesia católica –integrantes del bloque golpista en 2019–, han salido en los medios de comunicación a defender la “sucesión constitucional”, que llevó a Jeanine Áñez a autoproclamarse presidenta del Estado Plurinacional de Bolivia. Términos como “vacancia” o “vacío de poder” son empleados constantemente en su discurso para tratar de justificar la Ruptura del Orden Constitucional [1] y encubrir su participación en el Golpe de Estado [2].
Considerando que, cuando se articula un discurso el uso de las palabras no es inocente, pues en cada palabra enunciada y en la forma en la que estas estructuran relaciones con otras, otorgarán siempre un determinado sentido a las representaciones que se hacen sobre un tema específico y al mismo tiempo demarcarán una posición al respecto (no son neutras).
Del Golpe al Vacío de Poder
En sentido amplio, cualquier poder público que no ha sido elegido por sufragio ni nombrado por otro procedimiento constitucional, es un Gobierno de facto o de hecho; los cuales, se contraponen a los gobiernos constitucionales o de derecho, adoptando como mote el nombre de “Gobierno provisional” o de “transición” para indicar que su gestión es interina y ha de ser sustituido por otro Gobierno, surgido de elecciones [3].
En sentido restringido, un golpe de Estado se refiere al cambio súbito de un Gobierno o su máximo representante, por la fuerza o presión de un sector o grupo que posee mecanismos de presión política, social y/o militar [4].
Las movilizaciones iniciadas el 21 de octubre contra los resultados electorales de las elecciones de 2019, incitadas principalmente por figuras como las de Carlos Mesa y Fernando Camacho [5], desembocaron en la quema de ciertas cortes electorales departamentales, toma de instituciones públicas, motines policiales y la toma de posición de las Fuerzas Armadas contra el Gobierno (dando una “sugerencia” pública de renuncia al presidente); a su vez, esta presión desencadenó también la renuncia en masa de ministros, asambleístas y autoridades departamentales.
Históricamente, ningún golpe de Estado es idéntico, es decir, no se han desarrollado en las mismas circunstancias y varían tanto en los actores principales que las dirigen como en las formas en las que se ejecutan; y sin embargo, mantienen ciertos rasgos en común. En ese entendido, cuando no son las propias FF.AA quienes dan el golpe de Estado, estas actúan en complicidad con los golpistas. El componente militar define el golpe de Estado; por tanto, cuando hay golpe a un Gobierno democráticamente constituido, no hay “sucesión constitucional”, sino ruptura del orden constitucional [6].
Algunos apologistas del golpe, o del “reencauzamiento de Estado” como Franz Xavier Barrios Suvelza, pretenden ocultar esta relación de las FF.AA con el bloque golpista, señalando que:
“Quien hubiera observado la evolución de la conducta de las FF.AA bolivianas durante los 35 años después de la recuperación de la democracia, no se sorprendería del papel cauto y hasta indiferente que los militares jugaron durante esos días. No deja de ser una ironía que cuando los militares bolivianos, al contrario de una historia proclive al alzamiento armado contra el Gobierno civil, actúan de una forma relativamente institucional, sean tomados como los perpetradores de un supuesto golpe.” [7].
El 11 de noviembre, un día antes de asumir el poder, la entonces senadora Jeanine Áñez llegó al aeropuerto de El Alto en un vuelo comercial y desde ahí fue trasladada junto al senador Óscar Ortiz en un helicóptero de la Fuerza Aérea hasta el Colegio Militar.
En la declaración de Jeanine Áñez ante la fiscalía por el caso “Golpe de Estado”, revelada por Gigavisión, señaló:
“En el aeropuerto nos estaba esperando un helicóptero de la Fuerza Aérea, allí estaba personal militar, me subí al helicóptero, junto con el senador Ortiz, el que nos recibió era un militar, nos dijo que tenía instrucciones de llevarnos al Colegio Militar.” [8]
En la Memoria de los Hechos del Proceso de Pacificación en Bolivia Octubre 2019 – Enero 2020, publicado el 15 de junio de 2021, “[…] desde la mirada de la iglesia Católica como facilitadora del proceso de diálogo”, es obviado en el documento el papel que jugó el expresidente Jorge “Tuto” Quiroga en las reuniones que se efectuaron en instalaciones de la Universidad Católica, especialmente en relación al hecho de que Quiroga hizo “gestiones” con la Fuerza Aérea Boliviana para que Evo Morales salga del país en una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana.
Paradójicamente, en un comunicado patético de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) publicado el 19 de marzo de 2021, bajo el título de “La falsedad genera injusticia” y que fue leído públicamente por monseñor Ricardo Centellas, se señaló que:
“A petición de la Senadora Adriana Salvatierra, el día 11 no se pudo tratar ningún tema, salvo la salida segura del país del ex-presidente Evo Morales hacia México, para lo que solicitó que se comunicase esta petición a las autoridades militares, servicio que realizó el expresidente Tuto Quiroga, no como una autoridad que da una orden, sino como servidor que comunicaba la petición del MAS a las autoridades, para facilitar así la salida, en paz, del expresidente Evo Morales.” [9]
William Herrera Añez, autor del libro “La revolución de los pititas en Bolivia”, señala que:
“Después de la huida de Evo Morales y Álvaro García Linera se mantuvo la estructura institucional del Estado y el Movimiento al Socialismo continuó con sus dos tercios y el control de ambas cámaras legislativas. Lo propio ocurrió con el Poder Judicial, la Fiscal General del Estado, la Defensoría del Pueblo, la Contraloría General, etc. Los partidos políticos siguieron en reuniones permanentes, movilizaciones y, hasta cierto punto, los mismos partidarios de Evo Morales, primero bloquearon, pero luego cooperaron con la pacificación del país.” [10]
Curzio Malaparte, en su libro Técnica del Golpe de Estado (1931), señalaba que atacar las sedes del parlamento, otros órganos de poder o los ministerios, no es más que una ingenuidad; el objetivo primero es el de controlar los aparatos de seguridad, la circulación, los medios de comunicación manejados por el anterior gobierno, lo cual permite, en última instancia, apoderase del poder político [11].
"Vacancia" y "Vacío de Poder" inducido e impuesto
La vacancia en el poder ejecutivo es desencadenada, en última instancia, por los motines policiales y la posición que asumen las FF.AA frente al Gobierno constitucional, lo cual devino en lo que se llamarían después como “vacío de poder” [12].
Por otro lado, en la primera fase del discurso del “vacío de poder”, es necesario recordar que Carlos Mesa, candidato a la presidencia por Comunidad Ciudadana, fue uno de los primeros en oponerse a la posibilidad de que algún partidario del MAS (Presidenta de la Cámara de Senadores o Presidente de la Cámara de Diputados) pueda suceder a Morales como está establecido en la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia Montaño Eguez, J. (10/11/2019). [13]
Ante el denominado “vacío de poder”, candidatos, ex candidatos, el jefe de un partido que no participó en las elecciones cuestionadas (Samuel Doria Medina), ex “defensores del Pueblo” (Albarracín y Villena), embajadores de Brasil y de la Unión Europea, el presidente de una fundación católica (Jubileo) y clérigos auspiciadores (CEB) procedieron a constituir un nuevo gobierno, al que bautizaron como “transitorio constitucional” ipso facto.
Según Carlos Valverde:
“[…] la presidenta constitucional, Jeanine Añez representaba la “institucionalidad del Estado y el poder constitucional capaz de garantizar las elecciones, y así fue, su gobierno hizo elecciones, fueron legales, y su resultado también.” [14]
Cuando en realidad estos mismos golpistas, con la excusa de transitoriedad en su mandato, detentaron el poder estatal hasta la primera semana de noviembre de 2020; siendo otro rasgo común presente en golpes de Estado aquel en el que, pese a diferencias en tiempo y espacio de los gobiernos de facto, los golpistas se prorroguen en el poder todo el tiempo que les sea posible [15].
Considerando todo lo expuesto con anterioridad, podemos concluir que el denominado “vacío de poder” no fue una situación que surgió por las renuncias de presidente, vicepresidente, presidenta de la cámara de senadores y presidente de la cámara de diputados, al contrario, fue parte de un plan premeditado cuya finalidad política fue evitar que el MAS pueda ejercer su mayoría en la Cámara de Senadores y Diputados para reconstituir las directivas camarales, evitar una sucesión constitucional como está establecido en la CPE y garantizar un Gobierno que actué bajo los intereses cupulares del bloque golpista.
Este artículo fue publicado originalmente en el sitio web: Práctica Teórica y Lucha Ideológica y puede leerse aquí
Este artículo fue publicado originalmente en el sitio web: Práctica Teórica y Lucha Ideológica y puede leerse aquí
[1] Este tema lo abordamos en la pasada entrega de ¡Bolivia de Pie! N° 4, Algunas Consideraciones sobre la Ruptura del Orden Constitucional en Bolivia, pág. 77-94. Link de descarga: https://drive.google.com/file/d/1R6zvXHTDCRHgCVnAUH21m582dhiyhezW/view?fbclid=IwAR2fwXJwSGwmfiE6XGlMH2h0XKDRGXY3gG202QTpASRgE5rfCZhmUUuU-QA
[2] Cuando abordamos el Golpe de Estado de 2019, hacemos referencia a aquel proceso que se desarrolló en ciertas circunstancias históricas y bajo determinada correlación de fuerzas entre los grupos en disputa, pero también, al interior de cada grupo, en las que se desplegaron distintas tácticas y estrategias; por otro lado, cuando abordamos la Ruptura del Orden Constitucional, nos referimos a aquel acontecimiento que consumó el golpe de Estado en 2019. Ambos aspectos, proceso y acontecimiento, Golpe de Estado y Ruptura del Orden Constitucional, permiten develar las causas que determinaron aquel proceso y que decantaron en efectos posteriores: el establecimiento de un Gobierno de facto. Es importante hacer esta diferencia, pues hay quienes reducen el proceso al acontecimiento, es decir, limitándose solo en el aspecto jurídico; pero también, quienes diluyen el acontecimiento en el proceso y consideran que el aspecto jurídico es un mero detalle secundario.
[3] Cfr. Ossorio, M. (2003). Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. Buenos Aires: Heliasta, pág. 458.
[4] Cfr. Chanamé, R. (1993). Diccionario de Derecho Constitucional. Perú: San Marcos, pág. 126.
[5] A pesar que según Ximena Acosta “…varios quisieron apropiarse del movimiento ciudadano [pitita], pero en los hechos la gente en las calles no se movilizó a convocatoria de ningún político.” Fuente: El Deber. ¿Golpe a quien? (21/07/2021). En: https://erbol.com.bo/opinion/%C2%BFgolpe-qui%C3%A9n
[6] El ex-comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Gral. Williams Kaliman, cuestionó, preguntó y aclaró en los medios de comunicación, el 4 de diciembre de 2019: “¿Cómo puede ser un golpe de Estado si solo hicimos una declaración? No saqué soldados, ni tanques, no me fui al Palacio. Yo no me he quedado de presidente, nadie que sea militar se ha quedado de presidente”. Fuente: Los Tiempos. Kaliman: ¿Cómo puede ser golpe de Estado? Yo no me quedé de Presidente (12/04/2019). En:https://www.lostiempos.com/actualidad/pais/20191204/kaliman-como-puede-ser-golpe-estado-yo-no-me-quede-presidente
[7] Barrios Suvelza, F. X. (2021). El golpe que no fue. La última crisis estatal boliviana y los límites del concepto de golpe de Estado. CEPC – Revista de Estudios Políticos N.-191, pág. 208.
[8] Fuente: La Razón. Antes de asumir el poder, Añez revela que la trasladaron en helicóptero y que se reunió en La Paz con Camacho (10/06/2021). En: https://www.la-razon.com/nacional/2021/06/10/antes-de-asumir-el-poder-anez-revela-que-la-trasladan-en-helicoptero-y-que-se-reune-con-camacho/
[9] Fuente: Sistema de Información de la Iglesia Católica. Comunicado: La Falsedad Genera Injusticia (19/03/2021). En https://www.iglesiaviva.net/2021/03/19/comunicado-la-falsedad-genera-injusticia/
[10] Herrera Áñez, W. (29/06/2021). ¿Golpe constitucional?. Los Tiempos. En: https://www.lostiempos.com/actualidad/opinion/20210629/columna/golpe-constitucional?page=1
[11] Cfr. Bobbio, N.; Matteucci, N.; Pasquino, G. (1997). Diccionario de Política. México D.F.: Siglo Veintiuno Editores, pág. 724-725.
[12] El “vacío de poder” es un concepto de orden político más que jurídico, es decir, hace referencia a determinada correlación de fuerzas que da lugar a una situación en la que los órganos de poder se encuentra ausentes o impedidos de cumplir sus funciones. Por otro lado, dicha palabra o su definición, no existe ni forma parte de nuestro ordenamiento jurídico.
[13] Para Mesa nadie del MAS debe seguir en el proceso post Evo Morales. El Deber. En: https://eldeber.com.bo/el-deber/para-mesa-nadie-del-mas-debe-seguir-en-el-proceso-post-evo-morales_156217.
[14] Valverde Bravo, C. (27/06/2021). Entre la sucesión de ipso facto y cuidar a Jeanine. Página 7. En: https://eldeber.com.bo/opinion/entre-la-sucesion-de-ipso-facto-y-cuidar-a-jeanine_236838
[15] Cfr. Ossorio, M. (2003). Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. Buenos Aires: Heliasta, pág. 459.