La movilización partió desde Plaza Moreno, frente a la Catedral platense. En la Gobernación bonaerense la marcha confluyó con las familias de Guernica y organizaciones solidarias.

María Díaz Reck Docente y congresal de Suteba La Plata
Lunes 28 de septiembre de 2020 16:04
Fotos: Joaquín Díaz Reck
En el marco del 28 de septiembre, día de lucha por la legalización del aborto en América Latina y el Caribe, nuevamente los pañuelos verdes y naranjas ganaron las calles.
“Las cifras de abortos inseguros son de 400.000 a 700.000 por año en Argentina, la mayoría se realizan en clandestinidad y no se respeta el protocolo ILE. Esto lleva a que muchas queden con graves secuelas de salud y otras lleguen a la muerte. Se calcula que hay más de 120 mujeres y personas con capacidad de gestar que mueren cada año por abortos sépticos. En el marco de la pandemia los gobiernos nacional, provincial y municipal, miran para otro lado, no escapan al argumento de que no hay presupuesto para garantizar la ILE, mínimas partidas de misoprostol y mifepristona, quedando las trabajadoras a la deriva y haciendo malabares para garantizar este derecho” se expresó en un comunicado de la Multisectorial de mujeres trans, travestis, lesbianas y bisexuales de La Plata que fue leído al finalizar la movilización, frente a la Gobernación bonaerense.
Alberto Fernández anunció en marzo que se iba a tratar el proyecto de la interrupción legal del embarazo y cumplido el plazo de los 10 días anunciados, nunca llegó. Y hoy, después de diez meses de gestión, el proyecto alternativo de Alberto Fernández no se conoce, mientras que el proyecto de la Campaña Nacional por el derecho al aborto no se debate, corre riesgo de perder este año su estado parlamentario, y el aborto no es ley.
“La falta de vivienda ha impulsado a miles de familias trabajadoras a la toma de terrenos, otro derecho que se niega a garantizar este gobierno, mientras al mismo tiempo criminaliza a las familias y amenaza bajo orden judicial con desalojarlos, como pasa hoy en Guernica. También, en nuestra región, en la toma de Los Hornos y tantos otros territorios. La justicia, los grandes medios de comunicación, el gobierno, la ministra de seguridad y todas las autoridades del gobierno han dicho que tomar tierras es un delito, resguardando la propiedad privada como un derecho incuestionable de los ricos. Mientras tanto hay más de un millón de despidos, precarización laboral, y presupuesto mínimo para las mujeres víctimas de violencia ¿Cuántas mujeres con niñes al frente de sus hogares están sin trabajo o con trabajo precario?” planteaba el documento con respecto a la pelea por la tierra.
¡Guernica escucha, tu lucha es nuestra lucha!
Con ese canto se entró a la plaza San Martín, donde las familias de Guernica junto a organizaciones de izquierda estaban concentradas, exigiendo una respuesta por parte del gobernador Kicillof.
Al finalizar la lectura del documento, dos compañeras delegadas que están al frente de la toma concluyeron el acto con unas palabras: “Estamos desde el 20 de julio luchando. La respuesta del Estado, tanto provincial como municipal y nacional no ha sido mas que hostigamiento constante. Las mujeres estamos a la cabeza de organizar la pelea por la tierra. Hay muchas víctimas de violencia de género que están en el predio, que han huido de sus hogares para resguardarse (…) Solidaridad es lo que sobra ahí adentro”.