Por la noche hubo un acto central en la sede del Partido Justicialista.
Maximiliano Olivera @maxiolivera77
Martes 18 de octubre de 2016 10:30
“La postura es desear que al Gobierno nacional le vaya bien y que a la Argentina también, sin mezquindades ni egoísmo”, sostuvo el gobernador Juan Manzur para reafirmar sus buenas relaciones con el gobierno de Mauricio Macri.
Las declaraciones del ex ministro de Salud del kirchnerismo fueron realizadas durante conmemoración del Día de Lealtad, una fecha simbólica para el peronismo.
No es la primera vez que Manzur realiza declaraciones de ese tenor. Fue uno de los primeros gobernadores del Frente para la Victoria en buscar un acercamiento con Macri y sus funcionarios nacionales. La crisis abierta con la detención de José López aceleró los tiempos y fue cuestión de horas para que definiera al kirchnerismo como una etapa superada del peronismo.
El hecho de que Manzur haya utilizado el 17 de octubre para reafirmar su ubicación ante el macrismo reavivó el chiste que dice que el peronismo necesita un día de la lealtad por la traición que circula en el resto de los días del año. Pero la “lealtad” de Manzur no es atar su destino al del macrismo sino que obedece a un cálculo político que tiene como base en común la “lealtad al ajuste”, atributo compartido con otros gobernadores del Frente para la Victoria.
Las declaraciones del Manzur antecedieron al acto central en la sede del Partido Justicialista. La foto del acto avizora –entre bombos, banderas y cantos– las tensiones por el liderazgo en el peronismo local. Como si marcara la distancia, Beatriz Rojkés de Alperovich se colocó en el rol de presidenta partidaria para “darle la bienvenida” a Manzur y al vicegobernador Osvaldo Jaldo.
Jaldo arengó a los presentes en vistas del 2017. Afirmó que irán por las cuatro bancas que se disputan y que “el Frente para la Victoria y el peronismo están más unidos que nunca”. Aunque se deshizo en halagos al gobernador, le remarcó que el peronismo “lo va a acompañar y ponerse la campaña al hombro”. ¿Acaso decía entrelineas que él tiene más peso territorial propio que el gobernador? Para alimentar el murmullo hubo un faltazo mayoritario de los legisladores.
Manzur, respondiendo de manera directamente al murmullo, dijo en su discurso que los trapitos se lavan en la casa. “Se pelea de adentro y no sacamos los pies del plato”, enfatizó. Para matizar, predeciblemente, llamó a la unidad.
Pero si se trata de la lealtad también hay que mencionar otro gesto de Manzur. Por la mañana también tuvo que cerrar un capítulo de la crisis en Canal 10, el canal donde el Estado tiene un 30% de las acciones y la UNT el resto. Le pidió la pidió la renuncia al directivo Alejandro Laurnagaray, quién ascendió a la emisora tras ser secretario de prensa de Beatriz Rojkés. Por decreto nombró a Ignacio Golobisky como nuevo representante del Estado. El flamante directivo de Canal 10 es un fiel soldado de José Alperovich. El ex gobernador estuvo ausente en el acto del PJ aunque hubo oídos que escucharon por él.
