En esta columna vamos a hablar un poco de Federic Engels, ya que este año se cumplen 200 años de su nacimiento y en estos días se cumplió un aniversario de su muerte. ¿Quién fue? En una oración: uno de los fundadores, junto con Carlos Marx del socialismo científico, del materialismo histórico, y uno de los principales organizadores del movimiento obrero en su época. Pero veamos de cerca.
Lunes 10 de agosto de 2020 | Edición del día
Engels nació el 28 de noviembre de 1820 en Barmen. Al igual que Marx, desde que entra en la vida consiente ya está en contacto con hechos revolucionarios, particularmente la revolución Francesa de 1830. Esta a su vez, era heredera de la revolución de 1789 y de la Revolución Industrial. Es decir, la vida de Engels nace atravesada por una época de grandes transformaciones donde la burguesía asciende al poder económico y político de Europa, pero también en la que el proletariado moderno da sus primeros pasos. En este contexto la familia de Engels está ubicada entre las familias prominentes de la burguesía renana. El padre de Engels era dueño de una empresa de tejidos que tenía sede tanto en Alemania como en Manchester, Inglaterra.
En Bremen, desde los 19 años, Engels combina la actividad en el comercio, a la que se ve obligado a dedicarse durante algún tiempo, con sus primeros escritos políticos y filosóficos, donde ya se evidencia una ruptura con la religión (la familia de Engels era sumamente religiosa), y va ganando un nombre y un lugar en las escena periodística y filosófica. A los 20 años se alista en la artillería de la Guardia de Berlín. Es en Berlín donde empieza a relacionarse con los jóvenes hegelianos y tiene un primer acercamiento a Marx.
Engels se traslada a Manchester en 1842 para trabajar en una firma comercial de la que su padre era accionista. Allí, no se limitó a trabajar en la empresa sino a conocer de cerca la vida de la clase obrera inglesa, una de las más desarrolladas en el periodo. De ahí surge una de sus obras más importantes que es La situación de la clase obrera en Inglaterra que escribe cuando tenía veinticuatro años. Para ello contó con la ayuda de Mary Burns, una obrera que lo introdujo en la vida de la comunidad inmigrante irlandesa de Manchester.
En el texto muestra los horrores descarnados del capitalismo en la cuna de la revolución industrial. “Voy a presentar a los ingleses un buen escrito de acusación”, anunció Engels. Cuando ya tenía escrita la mitad de la obra: “Acusó a la burguesía inglesa ante todo el mundo, de asesinato, robo y otros crímenes a escala masiva. De ahí desprende que: “la revolución debe llegar; ya es demasiado tarde para que la solución sea pacífica. En ese texto acuño un termino que me resulta muy intersante y es el de crimen social.
Ahí decía: "la sociedad en Inglaterra comete cada día y a cada hora lo que los periódicos obreros ingleses tienen toda razón en llamar crimen social; que ella ha colocado a los trabajadores en una situación tal que no pueden conservar la salud ni vivir mucho tiempo; que ella mina poco a poco la existencia de esos obreros, y que los conduce así a la tumba antes de tiempo; demostraré, además, que la sociedad sabe hasta qué punto semejante situación daña la salud y la existencia de los trabajadores". Sin embargo no hace nada para mejorarla: en cuanto al hecho de que ella conoce las consecuencias de sus instituciones y que ella sabe que sus actuaciones no constituyen por tanto un simple homicidio, sino un asesinato, puedo demostrarlo citando documentos oficiales, informes parlamentarios o administrativos que establecen la materialidad del crimen.
Con Marx ya se habían conocido hacía un tiempo, pero su verdadera amistad surgió tiempo después en 1844, en la ciudad de París, confluyeron intelectualmente y los unió un lazo emocional que sería para toda la vida. Les recomiendo la película “El Joven Marx” que cuenta un poco el origen de esta amistad.
Sería imposible resumir en poco tiempo el trabajo común entre ambos, desde “La sagrada Familia”, “La ideología Alemana”, y obviamente el “Manifiesto del Partido Comunista”, el texto con el que contribuyeron programáticamente a la formación de la Primera Internacional. Al igual que Marx, Engels, no solo fue uno de los principales intelectuales de su época, sino un revolucionario y organizador de la clase obrera, participando activamente de los procesos revolucionarios en Francia, en Alemania, y en la organización de los trabajadores en toda Europa. Eso le valió varios exilios y una vida en la que definitivamente rompió con su legado familiar.
Una vez muerto Marx, Engels nunca frenó su obra. Emprendió la ardua tarea de redactar y publicar los tomos II y III del Capital que le exigieron muchísimo trabajo, ademas de prologar y recuperar decenas de manuscritos que su amigo había dejado. Al mismo tiempo Engels siguió siendo el consejero y dirigente de los socialistas europeos, enfrentando en sus últimos días la evolución reformista de la socialdemocracia alemana, reeditando la Crítica al programa de Gotha o Las guerras civiles en Francia y finalmente publicando la Crítica al programa socialdemócrata (alemán) de 1891.
También en sus últimos años dedicó parte de su trabajo teórico a polemizar con los adversarios de la concepción materialista de la historia. Ahí aparecen textos claves en su obra como el Anti-Dühring (1878) o los borradores de Dialéctica de la Naturaleza.
Además de su enorme legado junto a Marx, me gustaría mencionar que su pensamiento sigue siendo actualmente debatido en tres terrenos fundamentales y de total actualidad:
1-Por un lado los estudios marxistas sobre la relación de las sociedades con la naturaleza. En varios de sus escritos Engels ha dejado importantes puntas de investigación sobre este tema que toma total relevancia con el desarrollo de los movimientos ecologistas y la emergencia de crisis ambientales.
2- Otro terreno en el que sus textos se siguen debatiendo, mas allá de que posteriormente hubo decenas de elaboraciones sobre el tema, es el de los estudios de género, ya que en su obra “Los orígenes de la familia, la propiedad privada y el estado”, sostenía que la instauración de la familia monogamia, que aún hoy prevalece, fue “la gran derrota histórica del sexo femenino en todo el mundo”.
Además estos escritos son considerados fundamentales en los estudios sobre las teorías del estado y sus orígenes.
3- Finalmente en los últimos años se han rescatado sus estudios sobre la Dialéctica de la naturaleza, como método de pensamiento para las ciencias biológicas.
Para cerrar, Lenin en una breve biografía posterior sobre Engels dijo la contribución de él y Marx al desarrollo de la clase obrera, se podía resumir en una frase: "le enseñaron a conocerse y a tomar conciencia de sí misma, y sustituyeron las quimeras por la ciencia".
