Ante el aumento de casos, el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, dispuso la suspensión por una semana a partir de este lunes, pero sin tomar medidas de fondo ante la segunda ola.
Martes 4 de mayo de 2021 08:07
Foto: Elonce.com
La medida que rige desde el lunes, dispone que por una semana no habrán clases presenciales en las ciudades de la provincia con mayor riesgo epidemiológico y densidad poblacional, como Paraná, Concordia, Concepción del Uruguay, Gualeguaychú, Colón y San José.
La medida abarca al área metropolitana de Paraná, que incluye la capital entrerriana, San Benito, Colonia Avellaneda y Oro Verde; Concordia; Concepción del Uruguay; Gualeguaychú; Colón y San José.
Según informaron fuentes oficiales, la disposición busca "reducir la circulación de personas que genera el ingreso y egreso de las escuelas, y no dentro de los establecimientos, ya que los protocolos se cumplen con rigurosidad y buenos resultados".
El presidente del Consejo General local de Educación (CGE), Martín Müller, remarcó la "importancia de la presencialidad para garantizar el derecho a la educación", pero destacó que, "ante la complejidad de la situación actual, preocupante, todos los sectores debemos aportar". En ese sentido, dijo este lunes que "no es una decisión para nada caprichosa", y confió que "de la mano de la responsabilidad de las mismas familias podamos estar el lunes que viene en las aulas".
El discurso del gobierno entrerriano va de la mano con lo que desde el Poder Ejecutivo nacional y gobernadores de otras provincias vienen insistiendo: responsabilizar a la población por el aumento de casos. Sin embargo, la vacunación avanza a cuentagotas y el presupuesto en salud fue disminuido.
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