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Red Internacional
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Educación. Escándalo en Antofagasta: Vuelta a clases con nuevo intento de suicidio y casos graves de salud mental

Tras semanas de paralización educativa, comienza el retorno a clases, con un aumento del autoritarismo de los equipos directivos y de las autoridades, con hacinamiento y una degradación mayor de las malas condiciones que propician problemas de salud mental y de convivencia escolar. Un nuevo intento de suicidio por parte de una profesora marca la jornada ¿Qué alternativa seguir?.

Jueves 18 de abril de 2024

Ante la tremenda crisis educativa que mantuvo paralizada a las escuelas y liceos en Antofagasta, la respuesta por parte del Gobierno y autoridades locales, como el alcalde, el directorio de Corporación o el gobernador regional, es una verdadera burla. Quieren impulsar un departamento de cuatro profesionales para más de 50 establecimientos que concentran 40 mil estudiantes, una medida totalmente insuficiente al igual que la propuesta del seremi de Educación de ampliar los cupos en recintos educativos ya colapsados para responder a la falta de matrículas, es decir, más hacinamiento y precarización. Incluso quieren aplicar la doble jornada escolar sin tener claro cuántos docentes se necesitarán contratar para responder al aumento de estudiantes y qué arreglos en infraestructura se realizarán.

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Como vemos el gobierno y las autoridades solo arrojan migajas, y las dirigencias del Colegio de Profesores y Sindicato de Profesores y profesionales de la educación se sientan con ellos a dialogar en mesas cerradas, su alternativa es la resignación y desmoralización.

Lo anterior y de conjunto fortalece el aumento de casos graves de salud mental, que afecta tanto a las y los trabajadores de la educación como a las y los estudiantes, que hoy se ven expuestos a volver a clases en condiciones paupérrimas. La salud mental de las y los trabajadores de la educación está colapsada e inestable, con un fuerte autoritarismo de los directivos para buscar dejar silentes y amedrentar a quienes se venían movilizando hace semanas, buscan a toda costa denigrar la unidad conquistada entre trabajadores de la educación, estudiantes y apoderados, negándose incluso a instancias de reencuentro tras semanas de paro. Con un nuevo lamentable caso de intento de suicidio por parte de una profesora denunciado ayer por las redes de la dirigenta sindical Ivette Gareca.
Y también la salud mental de niños, niñas y adolescentes, quienes presentan en su mayoría ansiedad, depresión y autolesiones, siendo el suicidio un problema cada vez más fuerte. Incluso en el año 2019, una investigación liderada por profesionales del departamento de psiquiatría y salud mental de la Universidad de Chile señaló que las y los niños en Chile tienen la peor salud mental del mundo.

Y es que hoy la educación en ruinas y las malas condiciones de vida te enferman, e incluso cuando se busca ayuda en un servicio de salud público, nos encontramos con el hecho de que también está colapsado, con largas espera para recibir una atención debido a la insuficiencia de camas.

Karla Peralta, médica del Hospital regional de Antofagasta y parte de la agrupación Pan y Rosas, señala que “Los pacientes de salud mental están llegando más graves que nunca, sin poder dar a basto para su atención, aumentando los tiempos en la sala de espera por la insuficiente cantidad de camas. Las malas condiciones laborales y de vida irresueltas son parte importante de los factores que gatillan las enfermedades mentales, este problema lo observamos también en el mismo hospital, dónde el autoritarismo, los malos tratos y las precarias condiciones mantienen a trabajadores y trabajadoras de la salud con agobio, algunos con licencia e imposibilitados de trabajar".

Como podemos apreciar la educación y la salud están por el suelo, en un abandono total, lo que sin dudas genera crisis en las condiciones mentales y físicas de las y los trabajadores y sus familias. Por ello de lo que se trata es de no conformarse con medidas parche, sino que organizarse para luchar por una medida de fondo, que busque una transformación profunda de las malas condiciones de las escuelas y liceos, y también de los establecimientos de salud pública.

Siendo un ejemplo para llevar adelante ese propósito la alternativa impulsada en la paralización educativa, que con Encuentros educativos, asambleas triestamentales y otras instancias buscó desarrollar la unidad entre docentes, trabajadores de la educación, apoderados/as y estudiantes, como única vía real para provocar cambios profundos para la comunidad educativa. Una fuerza que debe mantenerse activa, y que en unidad y coordinación con otros sectores de trabajadores y trabajadoras, como las y los de la salud, puede comenzar a organizarse y proponerse transformar de raíz dos de los pilares fundamentales de la herencia de la dictadura, que son la educación y la salud de mercado.