Es en rechazo a medidas anunciadas por ministra de educación Soledad Acuña en el plan Secundaria del Futuro de hacerlos trabajar gratis en empresas privadas. También demandan viandas, gas y comedores.
Lunes 4 de septiembre de 2017 15:33
La Izquierda Diario visitó la Escuela de Educación Técnica N° 33 “Fundación Maestranza del Plumerillo” de Pompeya, un colegio emblemático del sur obrero de la ciudad que fue fundado en 1951 por Perón y que actualmente tiene casi 700 estudiantes.
Entrevistamos al presidente del centro de estudiantes, Mauricio Calderón, debido a que el pasado jueves 31 de agosto la escuela fue ocupada por sus estudiantes (se resolvió por asamblea y por la mayoría de los estudiantes) en protesta contra las reformas anunciadas por la ministra de educación Soledad Acuña.
El plan dual: trabajar gratis para las empresas privadas
Calderón nos señala que la medida es a razón de “las problemáticas que estamos teniendo en el colegio, a nivel nacional y a nivel capital sobre las currículas. Hablamos sobre las currículas de la reforma estudiantil que vamos a sufrir a partir de 2018, 2019, 2020 y 2021”.
¿En qué consiste esta reforma?
“En que el 50 % de las clases de los chicos van a ser mediante empresas privadas. Van a trabajar para empresas privadas como si fuesen pasantías pero gratis. No les van a pagar. Esa es la protesta que estamos llevando a cabo y queremos que esa reforma sea tratada por los docentes”, nos señala el presidente del centro de estudiantes.
Pero los estudiantes no piensan solo en su propia situación al ingresar al mundo laboral. Otro de los motivos es su solidaridad con los docentes: “Otro motivo por el cual estamos protestando sobre esta reforma es que perjudica a los docentes, porque el 70 % de las clases van a ser dictadas mediante tecnologías o computadoras y el otro 30 % mediante un docente”. Esto también los afecta ya que se estaría “degradando la currícula y el título de nuestros futuros técnicos químicos y técnicos metalúrgicos”, agrega Calderón.
Sin viandas, sin gas y sin comedor
A las demandas referidas a la currícula se suman otras relacionadas a su vida cotidiana en la escuela: “Desde principio de año venimos reclamando el tema de las viandas, porque cada vez nos traen menos viandas y tenemos situación de hambre en el colegio. Tenemos 200 viandas menos que están llegando al colegio y son 575 pibes que están pidiendo su derecho a comida. Otro problema es el tema del gas. Los hornos de fundición no están funcionando desde el año pasado porque tenemos un corte de gas y los técnicos químicos no están pudiendo usar los mecheros del Bunsen, que son importantes para las prácticas y conocer el ámbito laboral afuera y poder trabajar”.
Otro de los problemas es el referido a la ausencia de comedores. Nos indica Calderón: “Nosotros pedimos el año pasado los comedores y la rectora nos aseguró que se iban a poder gestionar dos comedores en el colegio. Nos dijeron que iban a venir autoridades del Gobierno a hacer la inspección. Nos dieron el lugar físico, nos dieron el OK. Y hasta el momento no hubo ninguna respuesta, no vino ninguna autoridad de Gobierno a hacer la inspección y el reclamo sigue en pie”.
¿Se van a reunir estos días para resolver los puntos?
Calderón: “Con las autoridades de la escuela se procedió al protocolo, se elevó un acta que el establecimiento quedaba a cargo de los estudiantes por tiempo indeterminado”. “Nos dieron fecha para una audiencia con la ministra Soledad Acuña para el martes 5 de septiembre. Eso lo vamos a tratar con los colegios que no sean llevados a la reforma como piloto. Hoy sabemos que hay dos colegios, que son la Técnica 35 y la 12, que se van a ver afectadas y sabemos que la Técnica 33 hasta ahora no. Pero va a ser afectada porque en el 2019 se planea hacer 44 colegios piloto más, 44 más en el 2020 y que para el 2021 todos los colegios de la Capital Federal sean pilotos”.
“Vamos a juntar a todos los colegios que no estén afectados como piloto, que no se han dado a conocer como colegios afectados, y lo que vamos a proponer es que las pasantías sean en el colegio y no en empresas privadas, y que esta reforma la traten los docentes. Nosotros consideramos que tienen que ser los docentes los que tienen que mejorar la educación porque son los que conocen la realidad de los chicos en las aulas en el día a día”.
Solidaridad docente en el conflicto con el Gobierno
Fue la semana pasada cuando la ministra Soledad Acuña a través de TN, y mediante conferencia de prensa, dio a conocer el nuevo plan Secundaria del Futuro. El Gobierno de la Ciudad junto al Ministerio de Educación nacional y el Consejo Federal (el organismo que reúne a las carteras educativas de todas las provincias) quiere impulsar una reforma de raíz de la escuela secundaria a partir de 2018 para ajustar las escuelas a los requerimientos del mercado laboral. Los cambios son sustantivos y algo que ya es cuestionado por el sector docente es lo referido a trabajar en el último año de clases.
Según el oficialismo, se trata de un esquema que permite articular la educación con el mundo del trabajo. Andrea Bruzos, subsecretaria de Coordinación Pedagógica del ministerio de Educación porteño, aseguró que la reforma tiene que ver con un cambio en el “paradigma cultural” de enseñar, pero desde los gremios rechazan la idea ya que apuntaría a incluir en las compañías mano de obra flexible y barata. Incluso, una de las consignas del paro docente que realizaron algunos sindicatos el viernes pasado fue el rechazo a esta reforma en carpeta, a la que califican de “neoliberal” y al “servicio de las empresas”.
“Han venido partidos políticos y docentes a apoyarnos, que rechazan esta reforma y nos acompañan en la lucha”, agrega Calderón. “Todavía no sabemos muy bien cómo van a implementar esta reforma. Sabemos que en qué nos afecta pues lo dio a conocer la ministra que van a mandar a trabajar a los pibes de sexto año a las empresas privadas en un 50 % de tiempo. Eso lo sabemos. No sabemos a qué empresas van a ser derivados nuestros compañeros. No sabemos cómo van a implementar lo del 70 % de tecnologías”.
“En todo caso esta reforma la van a mandar al parlamento. Lo que nosotros queremos es que esta reforma sea armada con los docentes. Ya el sindicato Ademys se reunió hace poco y hubo un profundo rechazo a la reforma que quiere mandar el Gobierno al parlamento después de octubre. Tengamos en cuenta que esta reforma que están mandando viene acompañada con una reforma laboral, para generar mano de obra barata para la flexibilización laboral que está preparando el Gobierno”, le dijo Calderón a LID.
“Sabemos que el macrismo, el Gobierno, lo va a implementar en Capital Federal porque es el corazón en donde gobernó siempre. Sabemos que lo quiere implementar en Provincia de Buenos Aires y también lo quiere implementar a nivel nacional en un futuro. Por eso decimos que la idea de esta reforma es en 2021 transformar todos los colegios en colegios piloto. Ya dio a conocer los 17 colegios que van a estar afectados por esta reforma”.
El régimen escolar proyectado empezará a correr para los alumnos que arranquen en primer año en 2018. Para el resto, continuará el esquema vigente. Se aplicará primero en 17 escuelas públicas, para completar las 143 del distrito en 2021.