Las estudiantes en solidaridad con el pueblo palestino han denunciado, al igual que las acampadas en otras universidades, el comunicado de la CRUE.
Jaime Castán @JaimeCastanCRT
Lunes 13 de mayo de 2024
Imagen de Europa Press
Estudiantes de la Universitat Jaume I (UJI) acampan en el Ágora del campus en solidaridad con el pueblo palestino. Tras realizar una asamblea este lunes 13 de mayo, con un centenar de estudiantes, han decidido sumarse al movimiento #StudentsForGaza que se levanta en muchos países en solidaridad con Palestina, siguiendo el ejemplo de las universitarias estadounidenses, pero que en el Estado español ya suma más de una docena de universidades.
Con la UJI, las tres universidades del País Valencià cuentan con acampadas de estudiantes en sus campus. La primera acampada, la de las estudiantes de la Universidad de Valencia, también fue la primera en el Estado español y de las primeras en Europa, arrancando este lunes su tercera semana. La semana anterior se sumaron estudiantes de la Universitat d’Alacant, y este lunes se incorpora Castelló.
Las estudiantes con Palestina en la UJI se han sumado también a la denuncia de otras acampadas al comunicado de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Para las estudiantes la posición de la CRUE es insuficiente, utilizando "un lenguaje gris que equipara las dos partes del estado colonial y colonizado" y demandan que las universidades "no solo tienen que cortar vínculos con el estado sionista", sino que también tienen que "suspender las relaciones directas e indirectas con la industria armamentística que fabrica y vende las armas con que se sostiene el régimen de apartheid y se perpetra el genocidio palestino".
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La protesta estudiantil exige la libertad "todas las personas encarceladas por motivos étnicos y políticos" en Israel y el "reconocimiento oficial de que el genocidio es una etapa de escalada de un proceso colonial de ocupación y de limpieza étnica de larga duración, la facilitación de los programas de becas y acogida para el estudiantado palestino y la creación de espacios de debate y aprendizaje en la universidad sobre el genocidio".
Se suman además a la solidaridad contra la represión que el movimiento estudiantil pro-palestino está sufriendo en todo el mundo, solicitando a su vez la derogación de la ley de Extranjería y la ley Mordaza que en el Estado español son utilizadas para la "criminalización de los movimientos pacíficos en solidaridad".
