En Alerta Spoiler entrevistamos al periodista que desde su newsletter deportivo en Cenital está haciendo una vasta radiografía de las relaciones de propiedad en los clubes europeos. Mirá el video.
Augusto Dorado @AugustoDorado
Lunes 3 de mayo de 2021 01:07
⚽¿POR QUÉ FRACASÓ LA SUPERLIGA EUROPEA? | Charla con Ezequiel Scher, periodista deportivo de Cenital - YouTube
En Alerta Spoiler conversamos con Ezequiel Scher, periodista especializado en Deportes de vasta experiencia en competencias de mucha importancia como la Copa América y la Copa Libertadores, y en Mundiales como el de Brasil 2014 que cubrió para el diario Tiempo Argentino. Ezequiel también se desempeñó como jefe de comunicación del cuerpo técnico de la Selección Argentina entre 2017 y 2018. Actualmente lo podemos leer los sábados en su newsletter Prepárense para perder que escribe para Cenital.
LID - El último artículo para tu newsletter estuvo enfocado en Florentino Pérez (el presidente del Real Madrid) y el intento de constituir la famosa Superliga Europea ¿por qué crees que fue un intento fallido que caducó en tan poco tiempo esto de la Superliga Europea?
Creo que hay distintas hipótesis y como periodistas siempre estamos enviciados en buscarla desde la línea de la comunicación. Me pareció interesante la respuesta del JP Morgan, el banco estadounidense que figuraba como financista de la Superliga europea y que también es el banco al que el Real Madrid le debe millones por la reconstrucción de su estadio, que dijeron que no habían logrado comprender del todo -cuando lanzaron esta idea- cómo funcionaba el público del fútbol. Hicieron un análisis mucho mayor de las audiencias antes que de lo cultural que ocurre vinculado con el fútbol. La justificación es “Las nuevas generaciones no miran tantos partidos, las nuevas generaciones solamente siguen a los equipos grandes, disfrutan más de jugar al Fortnite y con la camiseta del Manchester City” y creo que solamente tuvieron una visión comercial, pero no desde simplemente cómo generar capital sino también desde dónde pensarlo, porque pensar que el fútbol es un deporte que se reduce a quienes tienen la posibilidad de pagar un derecho televisivo me parece casi una anormalidad. Creo que el fútbol justamente se diferencia de todos los otros deportes porque es mundial: para hacer un arco, para hacer una pelota, no hace falta absolutamente nada… Después hay que ver que realmente tenían en la cabeza estos clubes que sabían que de alguna manera u otra iban a chocar con la UEFA. Lo más lo que más me llama la atención es que de quienes encabezan el proyecto está Florentino Pérez que es español y está Agnelli (dueño de la FIAT y de la Juventus en Italia) y son los únicos europeos. Y relativamente porque Florentino es español y el Real Madrid es un club de los socios pero el mayor patrocinador es Fly Emirates (lo tienen en el centro de la camiseta)… Que el financista sea un banco norteamericano y que quienes estén impulsando la búsqueda de mayor capital sean empresarios de Medio Oriente, me parece que responde un poco a los problemas culturales de cómo midieron la manera en que tenían que hacer esta liga.
¿Qué importancia le asignás a la movida de los hinchas, particularmente en Inglaterra, en el rechazo a este proyecto?
Algo está pasando en Inglaterra. Desde el momento en que Marcus Rashford, el delantero del Manchester United, que el año pasado atacó directamente a Boris Johnson (Primer ministro del Reino Unido) cuando había anunciado que por la pandemia iban a reducir un plan social para la educación de chicos y chicas en barrios carenciados, y Rashford le apuntó directamente a Boris Johnson y le pidió que por favor no sacara esos planes porque gracias a eso él comía, y Boris Johnson se tiró para atrás… Creo que ahí hubo un cambio muy grande en la liga inglesa, que es la liga más millonaria de todas. Y también en la liga más globalizada de todas, basta con ver al Manchester City que va a jugar la semifinal de la Champions League, quiénes son sus jugadores y que apenas tiene 3 jugadores ingleses en el once inicial… Los dueños de los clubes también, pocos son ingleses a diferencia de lo que sucede en la liga española, la liga italiana o la francesa. Yo creo que viene bastante por ese por ese lado. Algo ha pasado en Inglaterra que ha hecho que los protagonistas comenzaran a pronunciarse. En relación al Black Lives Matters, hubo mucho protagonismo de los jugadores, fueron los primeros que se arrodillaron en el centro de la cancha para para manifestarse contra el racismo. Están sacudiéndose muchas cosas políticamente en esa liga, algo que no ocurre en otras. Si miramos por ejemplo la liga española, no hay ese nivel de “sacudida”. En definitiva, siguen siendo pocos los equipos que se pronuncian, como hizo esta semana la hinchada del Rayo Vallecano, que es un club obrero, que después de que fuera a la cancha Santiago Abascal (el referente del partido Vox de España, un fascista) fueron e hicieron toda una performance muy divertida: desinfectaron toda la cancha. Pero algo está ocurriendo en Inglaterra que sorprende bastante.
La FIFA también le puso límites al intento de la Superliga ¿Qué contradicciones te parece que tienen estos clubes poderosos, en algunos casos Sociedades Anónimas, con instituciones como la FIFA y la UEFA?
Tienen perspectiva de negocios que son muy diferentes. Creo que la Conmebol en Latinoamérica, en Sudamérica, también lo está replicando. Hay una mirada si de cómo se organiza el negocio en las entidades deportivas y en la FIFA que es la es incluir mayor cantidad de países, la búsqueda de “consumidores” está en incorporar más naciones que las clásicas… no es azaroso que Ceferin, el presidente de la UEFA, sea esloveno. Si miramos lo que hizo la Conmebol este año con las copas sudamericanas es muy parecido: hay muchos más equipos, incorporan mucho más “mercados”, aunque sea un equipo muy chiquito. Era bastante gracioso cuando Rosario Central perdió contra 12 de octubre de Paraguay, había muchos chistes diciendo “perdimos contra un feriado”. Tiene que ver con meter más actores dentro de la bolsa. La Champions propuso exactamente lo contrario que lo que propuso la Superliga europea: propuso una liga con mayor cantidad de equipos y con mayor cantidad de eliminatorias, buscan incorporar a Bulgaria a la Champions League. Todos están de acuerdo en que tiene que haber más gente dentro del fútbol, el problema es qué colores y qué camisetas se tiene que poner esa gente: la mirada de la UEFA, de la Conmebol y de la FIFA es “incorporemos más países”. La FIFA tradicionalmente tiene una mirada muy amplia en cuanto a la incorporación de países, de hecho, hay más países afiliados a la FIFA que a la ONU. Siempre tuvo amplitud en ese sentido, sobre todo en el caso de Palestina e Israel, que la ONU obviamente no tiene. Y creo que ocurre lo mismo: hay como dos miradas distintas del mercado; una es “incorporamos más hinchas que se han hinchas del Real Madrid y otra es “incorporemos más hinchas con más clubes”. No creo y que una u otra sean una mirada más democrática del deporte, simplemente tienen otra idea de organización de sus consumidores.
En tu newsletter estás haciendo un muy buen trabajo de investigación, una radiografía sobre los dueños de los clubes ¿por qué te parece que grupos empresarios yanquis, jeques árabes y conglomerados chinos, son los que más están desembarcando en el fútbol europeo? ¿Qué buscan con el fútbol?
Es una pregunta realmente difícil. Yo empecé a investigar esto porque siento que los patrones, los dueños, los empresarios, como que gozan de una impunidad invisible que muchas veces los dirigentes políticos no tienen. No por elogiar a los dirigentes políticos, pero parece que unos u otros fueron más o menos responsables de lo que ocurre. Creo que hay distintas razones: por un lado, creo que Medio Oriente tiene un sobrante de plata - que obviamente no se reparte en sus sociedades - que lo ha decidido poner en el mercado futbolístico; por otro lado, hay orígenes de capitales, por ejemplo de Rusia, que tenían que una manera u otra lavar. Creo que los yankys sí fueron a buscar más mercado. Va en relación a una mirada que tienen sobre el fútbol desde 1993 y 1994, o sea, entre el Mundial y la creación de la MLS (la liga de EE. UU.). Estados Unidos descubrió que tiene un público a nivel nacional que desea el fútbol, muy basado en la fusión mexicana-estadounidense. Hicieron crecer mucho el fútbol y ganaron la licitación para el Mundial de 2026. Dese ese lugar, en principio el primer paso adicional de los yankys fue ir hacia Inglaterra: son dueños de 6 equipos, pero ahora viraron hacia parte de su cultura que es en Italia, porque hay muchos italoestadounidenses que empezaron a comprar clubes como la Fiorentina, el SPAL, la Roma. Me resulta interesante la pregunta de por qué fueron, porque yo la tiendo a pensar más en función de cada país, pero creo que habría que pensarlo y encontrar una respuesta sobre el capitalismo a nivel global. Porque además la cantidad de plata que ponen es impresionante. El Manchester City que va a jugar la semifinal, que tiene a Guardiola… que además es curioso porque Guardiola era el entrenador que la década anterior era modelo justamente porque su equipo el Barcelona había llegado ahí con muchos jugadores de sus inferiores, como que en 10 años cambió el modelo. Hoy miramos el Manchester City y miramos el PSG que van a jugar la semifinal y no tienen jugadores surgidos de sus canteras del once inicial. El Manchester City tiene a Foden, pero han apostado muy poco a sus canteras y han apostado a “afanarse” jugadores de otros lugares. También hay mucha búsqueda de visibilidad: ahora juegan el Manchester City contra el PSG y es muy interesante que juegan Qatar contra Emiratos Árabes. Creo que es interesante porque no es que son de empresarios de eses origen, son sheiks, son príncipes. Están vinculados directamente con los gobiernos y con empresas estatales. Si analizamos en los últimos años cómo fue la relación de estos países vinculados con el Consejo del Golfo, es interesante porque desde hace algunos años el bloque de Medio Oriente está partido entre el poder de Arabia Saudita y Emiratos Árabes y por otro lado está el poder de Qatar. más asociado con Turquía y Erdogán. Entonces creo que hay cosas que a nivel internacional se dirimen claramente, incluso miradas sobre el islamismo. Un montón de cosas que desde Argentina no las vemos porque no tiene nada que ver con nuestra vida, pero detrás de todo esto hay una mirada política de qué se está viendo a nivel publicitario a nivel mundial.
¿Por qué te parece que en Argentina todavía no logró desembarcar ese modelo de clubes y se mantiene la forma de Asociaciones Civiles?
Creo que hay dos caminos importantes. Por un lado, el peso social y cultural que tiene los clubes en Argentina. Hay una tradición muy grande de que la sociedad se organizó en base a los clubes, y lo digo específicamente a cómo se oragnizaron las comunidades inmigrantes en Argentina en función de los clubes. Creo que hay un grado de pertenencia muy grande. Por otro lado, creo que hay una cuestión muy política: hoy la conducción de la AFA, que de alguna manera es heredera de la conducción de Grondona, encuentra en su capacidad para sostenerse en el poder y para tener hegemonía, la banca de los clubes como asociaciones civiles. No hay que olvidarse que Claudio Tapia se mantiene en el poder sobre todo por los votos de los clubes del ascenso. Entonces la lógica de los clubes les sigue funcionando. Después creo que hay algo muy importante que es que hoy el fútbol argentino va a contramarcha del mercado a nivel mundial. O sea, el país para el nivel de fútbol que tiene, para el nivel de jugadores que tiene, tiene un dólar muy bajo. Entonces ¿Quién va a venir a invertir acá? Es complicado, hoy es un momento en que se está invirtiendo muy poco en el fútbol argentino. Creo que esos son tres lineamientos posibles: lo tradicional, lo político y lo económico. Pero hay que aclararlo, acá la AFA en su estatuto tiene como reglamentación el “no se puede”: un club manejado por una sociedad anónima no puede participar, es como un artículo fundacional.