Se describía a sí mismo como “hojalatero social” y dedicó buena parte de su trabajo a divulgar las tradiciones, identidad y estampa del Barrio Bravo.
Martes 2 de marzo de 2021
Quien fuera cronista, investigador y presidente de la Asociación de Cronistas Oficiales de la Ciudad de México falleció el domingo a los 75 años debido a complicaciones por el COVID-19.
La noticia fue confirmada por la galería José María Velasco, que emitió un comunicado, pues en ese espacio el cronista impartía una maestría sobre el albur.
https://twitter.com/GJMVmx/status/1366285351162159104?s=20
Alfonso Hernández nació el 29 de marzo de 1945 en la vecindad número 54 de la calle de Florida, en Tepito, en un hogar cuyos abuelos provenían de Guanajuato y Michoacán. No solo los tepiteños se lamentan su pérdida; gran parte del medio artístico, callejero, barrial y urbano se visten de luto.
Tepito Arte Acá y otros cachivaches y mugres
El colectivo Tepito Arte Acá fue fundado por el zapatero y promotor cultural Luis Arévalo, el pintor Daniel Manrique, el artista plástico Francisco Zenteno , Daniel Bern y el escritor Armando Ramírez.
A finales de los años sesenta, las autoridades del Departamento del Distrito Federal intentaron la implementación de programas urbanísticos, que según decían, su intención era reorganizar las viviendas capitalinas y mejorar las condiciones de vida.
El Plan Tepito fue uno de ellos, mismo que rechazaron los habitantes del barrio por carecer de condiciones adecuadas y no satisfacer sus necesidades.
Ahí nació Tepito Arte Acá, conviviendo de cerca con las organizaciones y líderes barriales que se enfrentaban a los planes gubernamentales.
En 1973 Daniel Manrique organizó la exposición «Conozca México, visite Tepito» en la Galería José María Velasco y ese fue el inicio para que otros grupos, como Los Olvidados, el taller Tepito Crónico, El Zaguán, Martes de Arte en Tepito y otros, se consolidaran.
“Para un barrio como Tepito, la cultura no es un espectáculo y el arte no es un producto. Luego entonces, la cultura es cómo somos en relación a nuestro medio ambiente y el arte son todas las expresiones resultado de la creatividad y productividad local”
Decía Alfonso Hernández quien se volvió una pieza importante en el colectivo, por su relación con las direcciones barriales y su difusión en la prensa sobre los problemas que enfrentaba la comunidad.
Incluso formó parte de la comitiva que viajó a la provincia de La Saulaie, de la región de Lyon, hermanando al barrio parisino con el capitalino y trabajador Tepito.
´Rifandosela´ todos los días, Alfonso Hernández se dedicó a la investigación y fundó el Centro de Estudios Tepiteños donde atesoró un gran acervo de información para el barrio.
El ´Tepitour´es otra de las actividades que ofrecía para dejar en claro el valor cultural y el peso del Barrio Bravo, impulsando el turismo para mexicanos y extranjeros por los lugares más representativos de esa zona.
Hernández también se apasionaba por “la dialéctica del albur y su fenomenología del relajo”, y fundó el Taller de Albures Finos junto con Lourdes Ruiz, otro gran ícono del barrio, que ofrece la Galería del Instituto Nacional de Bellas Artes desde 2014, como parte de sus actividades cotidianas.
“Tepito es uno de los epicentros de esta ciudad caótica, en la que un barrio sin sombra no infunde respeto. Para nosotros, ser barrio constituye una forma de vida, un estado de ánimo, una forma de ser y un estado mental para estar siempre al tiro de todo lo que atente contra el barrio”.
Nos sumamos a la ola de recuerdos y despedidas de este guardián del barrio.
