Mientras Macri y sus amigos disfrutan los beneficios de sus negociados, los trabajadores farmacéuticos viven una realidad muy diferente: horas extra al 50 %, paritarias en suspenso y atraso salarial.
Jueves 4 de agosto de 2016
Si bien el sector ha sido uno de los beneficiados por el gobierno de Cambiemos, no sólo porque éste les dejo sin bonificación de hasta el 100 % a una larga lista de medicamentos primordiales a través de PAMI a jubilados y pensionados, también posee antecedentes que datan de cuando el presidente Mauricio Macri estaba a cargo de la Ciudad. Basta recordar que ya en el año 2014 la empresa Farmacity se vio beneficiada por un llamativo decreto que le dio vía libre para vender productos que no sean medicamentos en sus góndolas, pese a que existía (y existe) una resolución del Ministerio de Salud que prohíbe esta práctica.
Dicha sociedad logro grandes ganancias con la megadevaluación del mes de diciembre, ya que la empresa en la cual el actual el Secretario de Coordinación Interministerial Mario Eduardo Quintana era director, estaba involucrada en operaciones con contratos de dólares a futuro que vencían en abril y junio de este año, por un monto de 10 millones de dólares, que habían sido operadas vía la sociedad de bolsa Cohen S.A.
Los trabajadores, en cambio, viven una realidad muy diferente. Los empleados de la red Farmacity, perteneciente al grupo Pegasus (relacionado directamente con el principal accionista de EDESUR, Nicolás Caputo), aún siguen sin respuestas concretas respecto a las últimas paritarias que debían haberse negociado en el pasado mes de marzo. Esto se suma al histórico atraso salarial del casi 130 % que viene afectando a los trabajadores del rubro desde el año 1988.
Además, ante la falta de personal para cubrir las 24 horas en las que permanecen abiertas muchas de las sucursales, los trabajadores han denunciado que son obligados a cumplir horas extras, las cuales por lo general son remuneradas al 50 % y abonadas hasta con alrededor de 6 meses de demora.
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Si bien la Asociación de Empleados de Farmacia por fin ha llamado a un plan de lucha, los meses corren y siguen licuándole el salario y el poder adquisitivo a los empleados de Farmacity. La paradoja es que el mismo retraso en el acuerdo está en manos de empresarios como Caputo, íntimo de Macri, que es el mismo personaje que bajo su mando ha llevado adelante el fuerte tarifazo sobre los usuarios de EDESUR.
