Rosa Elvira Flores era activista por los derechos de la mujer en El Salvador y fue encontrada muerta luego de estar 8 días desaparecida.
Viernes 29 de marzo 12:41
La activista feminista salvadoreña Rosa Elvira Flores de 47 años, integrante del Movimiento Salvadoreño de Mujeres (MSM), fue reportada como desaparecida ante la fiscalía el 20 de marzo, sus familiares y compañeros la buscaban y exigían a las autoridades de El Salvador su localización con vida.
Fue vista por última vez en el municipio San Julián del departamento Sonsonate y tuvo comunicación con sus familiares cuando se dirigía a su domicilio el 19 de marzo, pero nunca llegó.
El 27 de marzo, fue encontrado su cuerpo sin vida en un cañaveral del cantón Los Lagartos, del municipio San Julián, ahora su compañera y directora del MSM, Ana Isabel López, denuncia su asesinato y alerta que esto constituye una amenaza y riesgo hacia las mujeres defensoras de derechos humanos, exige su esclarecimiento y justicia para encontrar a los culpables. Aún se esperan resultados de la autopsia al cuerpo de la activista para determinar la causa de muerte.
El Movimiento Salvadoreño de Mujeres es una organización creada en 1988 por la defensa de los derechos humanos y en solidaridad con las mujeres que sufrían la violencia policial y militar en el marco de la guerra civil, de la semiclandestinidad por la dura represión inicial a su conformación legal y consolidación feminista actual, la organización mantiene alianzas con docenas de organizaciones de mujeres y derechos humanos en El Salvador y a nivel internacional, actualmente realizan trabajo comunitario y político bajo el régimen de excepción, por los derechos de las infancias, de las mujeres y en contra de la desigualdad social y económica que viven las comunidades pobres en El Salvador, a la vez que participan en acciones coordinadas de protesta como la Marcha Mundial de las Mujeres.
Rosa Elvira era una integrante activa del MSM, también fue madre de seis hijos y se encontraba realizando trabajo en diversas comunidades en promoción de los derechos de la mujer y contra la violencia de género.
A dos años de régimen de excepción en El Salvador, la ausencia permanente de garantías constitucionales de la población, bajo el bonapartismo reaccionario de Bukele, mantiene en riesgo latente de abusos de fuerzas estatales a todas y todos los defensores de derechos humanos en el país.
Precisamente esta misma semana fue informada la familia del activista sindical de trabajadores de la Terminal Oriente, Hever Chacón, que murió en el Centro Preventivo y de Cumplimiento de Penas de Santa Ana, al noreste de El Salvador. Asesinado por negligencia criminal penitenciaria, siendo preso político inocente y sin vínculo con pandillas, que tras ser criminalizado y encarcelado sin ningún derecho, había recibido su orden de libertad.
Aunque no existe un lugar seguro en El Salvador para activistas, sindicalistas, defensoras, ni para nadie del pueblo bajo el Plan de Control Territorial de Bukele, han sido fundamentales las protestas de organizaciones sociales, feministas y de derechos humanos en denuncia por los crímenes y abusos cometidos por agentes del Estado durante los operativos en zonas populares. Gracias a las denuncias y protestas, se han conocido los casos de extorsión y violación sexual de militares y policías a mujeres y niñas, los ataques y abusos cometidos durante los allanamientos a domicilios y en las calles contra la juventud y se comienza a conocerse las consecuencias de la pérdida de garantías dentro y fuera de las cárceles del país.
Por ello, es necesario que se extienda la exigencia de justicia para Rosa Elvira Flores y se garantice la protección de su familia, su crimen ocurrió mientras Bukele enviaba a más de 6,000 militares y policías al norte del país a cercar la zona en su “guerra contra las pandillas”. No existen cero homicidios en un país donde los feminicidios no paran y quienes mueren son activistas.