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Red Internacional
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Fernanda y Raisha. A mil días del femicidio, la justicia no llega para los casos de zonas rurales

Contabilizamos mil días desde que sucedió el doble femicidio de Fernanda y Raisha y el caso sigue impune. La justicia no es pronta ni cumplida, mucho menos cuando se trata de zonas rurales. Entrevistamos a Xavier Sánchez, que ha realizado una importante campaña exigiendo justicia.

Lunes 24 de abril de 2023

El 30 de julio del 2020 se cometió el doble femicidio de Fernanda y Raisha, en San Pablo de León Cortés, zona ubicada en Los Santos. El 26 de abril se cumplen mil días desde ese hecho, y han sido mil días en los que el caso se ha mantenido en impunidad y lejos de la justicia pronta y cumplida que establece la ley.

En su lugar, la Fiscalía de Los Santos nunca elevó el caso a jurisprudencia para que pudiera realizarse un juicio. La Fiscalía alegó que se trataba de un caso muy complejo y, según indica Xavier Sánchez, familiar de las víctimas, afirmaron que “ese expediente es muy viejo y nosotros no podemos resolverlo”. Con esto queda claro, como manifiesta Xavier, que “la Fiscalía de Los Santos queda con una gran deuda al no haber sido capaz de generarles justicia a Fernanda y Raisha por más de dos años en que el expediente se mantuvo en su poder”.

Actualmente, el expediente se encuentra en la Fiscalía de Cartago, pues fue enviado a un equipo fiscal de la Unidad de Capacitación y Supervisión del Ministerio Público (UCS) para que, según palabras de la Fiscalía de Los Santos “ellos se fijen si pueden resolverlo o no…”. Sin embargo, el caso sigue sin elevarse a juicio e incluso, de no existir una respuesta pronto, se estaría dictando sobreseimiento del expediente, lo que significa que el caso se estaría dando por cerrado, sin garantizar justicia para Fernanda y Raisha y para su familia.

Además, la comunicación de la Fiscalía con la familia de las víctimas ha sido “muy escueta y por lo general raya en el secretismo” según menciona Xavier. Un ejemplo de esto es que el traslado del expediente a la Fiscalía de Cartago no fue anunciado debidamente a la familia, sino que esta se dio cuenta por un asunto externo al caso. Desde Pan y Rosas hemos venido planteando la necesidad de crear Comisiones independientes de investigación, conformadas por familiares de las víctimas, organizaciones sociales y feministas, para combatir el secretismo y la falta de información a las que son sometidas las familias.

Un caso de zona rural

La familia de Fernanda y Raisha ha tenido que enfrentar varios obstáculos por el solo hecho de tratarse de un caso de zona rural. Entre estos obstáculos se encuentran “la invisibilización de sus casos, la poca cobertura certera de medios y prensa, el abandono de las instancias judiciales, el silencio del contexto sociocultural que enmarca los hechos ocurridos como cotidianos y por ende la normalización de la violencia de género”, según comentó Xavier a La Izquierda Diario.

Además, Xavier expresó que “los casos rurales están condenados en su mayoría a dictarse desestimados, casos cerrados, sobreseimientos y abandono por parte de las instancias judiciales, dejando con ello a las familias que sobreviven, en muchas ocasiones, teniendo que convivir con el asesino que queda en libertad y ejerce poder de intimidación no solo sobre la familia, sino sobre toda un área geográfica, porque la impunidad por parte del sistema genera en los asesinos una dosis extra de energía para poder dominar cualquier cosa sin tener que pagar sus actos”.

Gracias a la lucha que ha llevado adelante la familia de Fernanda y Raisha a lo largo de estos mil días, Xavier comenta que, hoy en día, “muchas personas conocen el caso, no de la manera exponencial que quisiéramos, pero si ha tenido su impacto, que lastimosamente aún no es tan notorio como para que los ojos del Sistema Judicial de verdad se fijen en ellas, pero sí sabemos que a través de la lucha hoy por hoy las personas relacionan sus caras con sus nombres, no son extrañas y de alguna manera no han quedado en el olvido. También estamos conscientes que mientras el Caso de Fernanda y Raisha, un caso no GAM, se visibiliza fuera del lugar de los hechos, muchos casos rurales se duermen en los archivos judiciales siendo desestimados, cerrados y dictando sobreseimientos que al final generan un grado mayor de dolor, depresión, angustia y violencia en las familias que sobreviven a estos casos y que por lo alejado de la ciudad y por el miedo siquiera pueden manifestarse con las fotografías de las suyas en una marcha, manifestación o protesta. Un caso rural desde su acontecimiento siempre tendrá la sombra del Sistema de quedar en el abandono, contrario a los Casos GAM, que incluso hasta los medios de comunicación dan cobertura detallada de cada detalle y que en alguna manera también ayudan a que mediante lo mediático de los mismos nunca queden en el olvido. Dos realidades muy diferentes de tragedias iguales, femicidios”.

Es por esto que la familia de Fernanda y Raisha lleva adelante una lucha ardua para que el caso se eleve a juicio contra el principal sospechoso. En noviembre del 2021 se llevó a cabo el juicio contra el menor de edad involucrado; sin embargo, el Juzgado Penal Juvenil dictó in dubio pro reo, lo que quiere decir, otorgarle libertad al menor por duda, pero no por certeza. Además, la familia exige una justicia digna.

Desde Pan y Rosas nos sumamos a las demandas de Xavier. Denunciamos la impunidad y la complicidad que mantiene el Estado y su institución judicial, pues no están por garantizar una justicia real para Fernanda y Raisha y su familia. Solamente la lucha y la organización pueden hacer posible una justicia para ellas y para todas las que nos faltan.

Es importante que, como movimiento de mujeres, organizaciones feministas y activistas independientes organicemos manifestaciones que engloben las demandas de las familias de víctimas de femicidio, así como el reciente caso de violencia sexual de la niña de 13 años y su bebé, para poner sobre la mesa el reclamo por una justicia real. Si nos organizamos y multiplicamos nuestras fuerzas, podemos ganar.

Una vez más le decimos a Xavier que ¡no está solo! Estaremos alzando la voz por Fernanda y Raisha hasta que se haga justicia, así como estaremos peleando para que todas las niñas y mujeres puedan vivir plenamente, porque creemos que es posible una sociedad libre de explotación capitalista y opresión de género.