En medio del conflicto docente sesionó este jueves la Junta Departamental de Filosofía que re-eligió a Claudia Mársico como Directora de la carrera. La izquierda se abstuvo y denuncio el carácter anti-democrático de la elección.
Viernes 31 de marzo de 2017 17:27
Como ya informamos desde La Izquierda Diario, durante esta semana en la facultad de Filosofía y Letras se “votaron" los nuevos (y no tan nuevos) Directores/as para las carreras.
Este jueves por la tarde sesionó la Junta del Departamento de Filosofía por primera vez en el año, con el único propósito de realizar la elección del Director de la carrera. Esta elección se da en el contexto de una importante lucha docente contra el gobierno de Macri, Vidal y todos los gobernadores que aplican fuertes políticas ajustadoras, cuando hace semanas es de público conocimiento que el jueves 30 se realizaba el Paro Nacional Docente de CTERA, le dieron así la espalda a la lucha por la educación pública.
En contraposición, los estudiantes comenzamos a organizarnos desde las bases mediante la primera Asamblea de Estudiantes de Filosofía realizada el pasado miércoles 29 en el marco de las clases públicas en apoyo a los docentes. En este espacio, los estudiantes pudimos expresar nuestro desacuerdo tanto con la votación que se avecinaba como con la reforma del Plan de Estudios de la carrera, proponiendo realizar una próxima asamblea el miércoles 12 de abril a las 17.30 hs.
Comenzó la sesión de la Junta con la presencia de estudiantes, a quienes los representantes de las mayorías de todos los claustros, de manera cínica, les negaron la palabra hasta que no se votara.
Con el acuerdo previo entre el claustro de Profesores, de Graduados y la Mayoría Estudiantil en manos de la agrupación Épica, se decidió que la actual Directora, Claudia Mársico, sea reelecta.
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¿Cómo se vota?
La forma de ‘voto ponderado’, que rige en todas las Juntas de Departamento significa que algunos votos valen más que otros. De los tres claustros, cada uno representa el 33% de la elección. En total suman 99%, el 1% restante es el voto del Director. De esta forma, a la hora de votar en la Junta, el voto de todos los estudiantes de la carrera que somos miles vale lo mismo que cerca de cien profesores y lo mismo para el claustro de graduados. A esto se le suma la división arbitraria en dos claustros de los docentes.
Este mecanismo anti-democrático no es azaroso, sino que forma parte del modo en que las autoridades buscan mantener a los estudiantes por fuera de las decisiones en torno a la orientación de su carrera en particular y de la universidad en general. De esta forma se mantiene el statu quo en la carrera, y con esto su orientación y contenido. Así fue también como se "discutió" y aprobó el nuevo Plan de Estudios de la carrera de Filosofía, una vez más a espaldas de los estudiantes y docentes en la última sesión del año 2016 del Consejo Directivo, recientemente aprobado por el Consejo Superior de la UBA.
Desde la Juventud del PTS como minoría estudiantil en la Junta de Filosofía nos abstuvimos, denunciando que esta elección era absolutamente anti-democrática, debido a que los estudiantes que somos la gran mayoría de la carrera (y la facultad) estamos sub-representados y de esta forma excluidos de estas decisiones como de tantas otras, incluida la del cambio de Plan de Estudios.
Dijimos bien claro: no se trata en sí mismo de quien ocupe el cargo de Director, sino que cualquier decisión parte de excluir a los estudiantes del debate, y a muchos docentes.
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“La lucha es mantener las instituciones”
Con estas palabras, las mismas que resonaron en varios departamentos estos días, la profesora Claudia D’Amico defendió el actual régimen junto con la decisión de sesionar en un día de importantes luchas en las calles. Un intento de postular un “deber ser” con gusto a retrogrado y olor a naftalina, evidenciando que cuando los estudiantes planteamos cuestionamientos a las políticas universitarias, las autoridades hacen oídos sordos.
A este discurso se unieron la Directora re-electa Claudia Mársico y la Mayoría Estudiantil de la agrupación Épica, aliados políticos de la gestión kirchnerista y su brazo estudiantil, durante la elección del 2015 para enfrentar a la Izquierda que conduce el CEFyL. En cuanto a la presencia de estudiantes que formamos parte de la Asamblea, tanto las autoridades como la Mayoría Estudiantil no pudieron ocultar su rechazo y nerviosismo expresados en discursos contrarios a la organización estudiantil por fuera de las instancias que ellos gestionan.
Por esto, desde la Juventud del PTS como Minoría Estudiantil de Filosofía, proponemos que estas discusiones se abran en todos los cursos y en todas las carreras para llevar los debates a las Asambleas del CEFyL donde el voto es directo e igualitario, 1 persona = 1 voto.
Consideramos que este método debe aplicarse también a las elecciones de Directores, combinado con mandatos revocables, rotativos y asambleas interclaustros. Para lograrlo es necesario un programa claro de democratización de la universidad donde los estudiantes tengamos una injerencia real en decisiones que nos impactan directamente, como las reformas de los Planes de Estudios.
Exigimos la unificación del Claustro de Profesores con asignación de rentas para todos los ad honorem respetando antigüedad y cargo. Para que los estudiantes tengamos una representación acorde a la realidad, planteamos mayoría estudiantil. ¡Los estudiantes queremos decidir!
