Este sábado arrancó la séptima fecha del Torneo Clausura. Las de Boedo, a pesar de haber tenido fecha libre, el descanso no las desconcentró y no paran de ganar.
Maximiliano Kevorkian Redacción deportes @MoshSL
Domingo 10 de octubre de 2021 19:04
Foto: TyC Sports
Clasificadas cómodas. El equipo triple G.
Ya están en la ronda de eliminatorias las azulgranas, este sábado golearon de nuevo. El rival de turno fue S.A.T., el conjunto de la localidad de Moreno que va último en la tabla de la zona A.
Hain, Molina, Medina y Vidal, convirtieron los cuatro goles del Ciclón, que mantuvo el puntaje ideal en el Torneo Clausura.
La química y marcha de este conjunto parece no detenerse: "ganan, gustan y golean".
Las mayores pruebas vienen en las últimas dos fechas: la próxima con el actual escolta Boca Jrs. y Racing.
Habrá que ver cómo sale el partido entre Boca y quien está cuarto, Gimnasia y Esgrima de La Plata. Si ganan las de la Ribera compartirían los puntos... Pero quedarían un escalón abajo del ciclón por diferencia de goles. Si gana Gimnasia, 3 equipos tendrían los mismos puntos, pero lo más importante para el conjunto platense es que se asegurarían el paso a la próxima instancia.
De reojo miran las de Deportivo Español, esperando un triunfo de Boca, que les de esperanza para las 2 fechas finales.
En fin, con expectativa y la motivación de estar imparables (e incertidumbre con la clásica falta de organización, ya que no está confirmada la fecha del próximo partido), las matadoras mandan a fuerza de triunfos, goleadas y por sobre todo buen juego de este lado de la tabla.
Desorden total en el torneo
Como decíamos, fecha a fecha hay incertidumbre de cuándo se va a jugar. En la Zona B liderada por River hay equipos que jugaron siete partidos. Sin embargo la mayoría de equipos va por seis y completan el 7; y en la Zona A van por también por el sexto y varios completan mañana.
Es terrible esta falta de orden, respeto y hasta cariño a un torneo emergente. Que no solo se juega con los diecinueve equipos y sus jugadoras y cuerpos técnicos, también se juega en los barrios, trabajos. Con las pibas que se esfuerzan día a día por un deporte que aman, y que les demanda enormes sacrificios. Ya que el profesionalismo real es para pocas.
Miles vieron en este campeonato y la promesa profesional como un horizonte, un sueño a cumplir... Una posibilidad también de vivir del deporte que aman, o simplemente juegan. El torneo por el contrario, con el desorden, horarios antipopulares y falta de difusión (pasar un partido en TV pública cada tanto, o uno de diez, no es ni por asomo difundir el campeonato) no valora todo el esfuerzo del que venimos hablando en las diferentes notas.
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