El exjefe del Ejército hizo un provocador discurso en el acto de asunción de su reemplazante. Sobre ese hecho, y sobre la recusación de un fiscal en la causa Ledo, La Izquierda Diario habló con la hermana del conscripto desaparecido en 1976.
Rosa D’Alesio @rosaquiara
Miércoles 1ro de julio de 2015
Fotografía:DyN
Fotografía:DyN
La Cámara Federal de Tucumán aceptó el pedido de la defensa del exjefe del Ejército César Milani y apartó al fiscal Gustavo Gómez de la causa que investiga la desaparición del conscripto Alberto Agapito Ledo.
Los motivos esgrimidos por la defensa, y aprobado por la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán (CFAT) para apartar al fiscal federal general Antonio Gustavo Gómez, se deben a que consideró que el fiscal perdió "objetividad" al expresarse sobre la investigación en medios de comunicación.
El fiscal subrogante Gómez remplazaba desde noviembre de 2014 al fiscal general Brito, cuando este último solicitó una licencia. Gómez había requerido que Milani sea indagado en Tucumán. Sin embargo, el juez Bejas rechazó el pedido e hizo lugar a su recusación, demanda por los abogados del ex jefe del Ejército. El fiscal general apeló el fallo ante la CFAT, que resolvió ratificar la decisión del juez.
Graciela Ledo, hermana del soldado desaparecido, consultada por La Izquierda Diario sobre la resolución de la Cámara opinó “el fiscal subrogante Gómez tenía preparado el pedido de llamado a indagatoria del general Milani, en ese momento la defensa pide su recusación que es aceptada por el juez Bejas”. Ledo agregó “nosotros nunca pedimos que recusen a los fiscales Gómez y Brito, por el contrario, esperamos que continúen con la investigación. Ahora esperamos que la Cámara resuelva si recusa o no a Brito”.
El fiscal Gustavo Gómez, en declaraciones ante la prensa, explicó los argumentos del fallo emitido por la Cámara “dicen que yo no soy imparcial, cuando es un contrasentido, porque es el juez el que debe ser imparcial. Los fiscales representamos el interés público, no podemos ser imparciales, somos parte en el expediente”. Gómez concluyó sosteniendo que lo que está en juego es la citación a indagatoria de Milani.
El expediente que investiga la desaparición del soldado Ledo está paralizado hace cuatro meses en la CFAT, que debe resolver si ratifica o revoca la decisión del juez federal Daniel Bejas, que se negó a citar a declarar a Milani por considerar que no hay pruebas que lo justifiquen. Además, la Cámara debe definir si hace lugar a la recusación planteada por los defensores del militar retirado contra el fiscal Carlos Brito.
Graciela Ledo expresó su preocupación sobre quiénes serán los nuevos jueces que integren el tribunal: “Hoy se jubiló una de las juezas de la Cámara, y otras dos integrantes se inhiben en esta causa por tratarse de crímenes de lesa humanidad. El fiscal Gómez planteó ante la prensa que estos tres integrantes podrían ser remplazados por conjueces nombrados por el poder Ejecutivo. Si esto fuera así, sería muy favorable a sostener la impunidad de Milani”.
La presidenta, a través del decreto N° 324/2015, nombró a los conjueces para la Cámara Federal de Tucumán.
El día que Milani "lloró"
Graciela Ledo se indignó frente al discurso intimidatorio de Milani, realizado el día que asumió el nuevo jefe del Ejército. “Es lamentable lo que dijo, que desprecia a los que lo calumniaron, a la prensa y será a nosotros también. Él nunca dice que se pone a disposición de la justicia, por el contrario, amenaza y desprecia. No le creo las lágrimas, nosotros lloramos hace 39 años, y mi madre se va a morir sin encontrar justicia por la desaparición de mi hermano”. Graciela evaluó que Milani continua conservando una cuota de poder importante, lo que obstaculizará que sea juzgado y agregó que “hay muchas pruebas contra él, sin embargo, en La Rioja fueron recusados los fiscales que deberían investigar en la causa por la desaparición de Olivera. Y en Tucumán los fiscales son recusados, y la justicia dilata el llamado a indagatoria”.
Pruebas y causas contra Milani
El destituido teniente general César Gerardo Santos del Corazón de Jesús Milani, tiene varias causas en su contra donde está imputado por haber participado activamente en secuestros y desapariciones de personas durante la última dictadura militar. Está implicado en la desaparición de su asistente, el soldado Alberto Ledo. En el allanamiento de la casa de Pedro Olivera, y su posterior detención. En los trasladar de Alfredo Ramón Olivera durante el tiempo que estuvo detenido-desaparecido. En amenazas a Plutarco Schaller durante su detención. En interrogar a Oscar Schaller el mismo día que lo dejan en libertad, después de haber estado detenido-desaparecido. En la detención de Verónica Matta.
Pero no sólo pesan sobre Milani denuncias por crímenes de lesa humanidad. En los años ’80, en el alzamiento carapintada que pedía mayor impunidad para los genocidas, tomo una actitud favorable a estos, lo que le costó ocho días de arresto. A fines de los años noventa fue denunciado por la APDH de Neuquén por realizar contrainteligencia. En los últimos años una nueva causa judicial lo amenaza. Esta vez es por enriquecimiento ilícito.
A Milani no le faltan cargos en su contra. Le sobra impunidad. En los últimos años el gobierno de Cristina lo encumbró, pero mucho antes, él y todos los genocidas, fueron protegidos por las leyes de Obediencia Debida, Punto Final y los Indultos, votadas por la UCR y el PJ.
Rosa D’Alesio
Militante del PTS, columnista de la sección Libertades Democráticas de La Izquierda Diario; se especializa en temas de narcotráfico y Fuerzas Armadas.