María Magdalena Cuc Choc, dirigente maya q’eqchi’ y maestra de primaria, fue capturada el miércoles en Puerto Barrios, Izabal, señalada por usurpación, invasión y detención ilegal.
Sábado 20 de enero de 2018 00:01
La Policía Nacional Civil informó que la captura se registró cuando María Cuc Choc salía de la sede del Organismo Judicial, luego de haber sido traductora del idioma q’eqchi en una de las audiencias que se llevaron a cabo en un juzgado.
Por medio de un sitio web, Cuc Choc manifestó que la acción policial la tomó por sorpresa, pues nunca fue informada de alguna denuncia en su contra, ni tampoco citada por algún juzgado. Después de ser arrestada fue fue trasladada al Juzgado de Paz de Puerto Barrios, donde un juez le dio a conocer el motivo de la aprehensión, minutos después fue llevada a la cárcel local y este viernes se agendó la audiencia de primera declaración.
Según las declaraciones del Ministerio Público (MP), varios pobladores, entre ellos la dirigente indígena, fueron denunciados por una entidad supuesta propietaria de la finca en Lívingston, por lo que están pendientes más capturas por usurpación agravada, amenazas y detención ilegal. La denuncia en el MP fue presentada el 17 de enero del 2017 y el 25 del mismo mes, un juez ordenó las aprehensiones y el desalojo de la finca.
María Magdalena es además maestra de educación primaria y se desempeña como traductora en los juzgados de Puerto Barrios, lo que la ha acreditado dentro de las comunidades indígenas en la región del Polochic.
Además, es hermana de Angélica Choc (defensora del territorio de comunidades indígenas) y Ramiro Choc, quien también estuvo detenido y fue preso político, durante 6 años. Además, fue esposa del profesor Adolfo Ich Chamán, quien fue asesinado en 2009, durante una manifestación en El Estor.
La lucha de María Choc es también contra las empresas mineras que han desatado una brutal represión contra los pobladores que se resisten a grupos mineros como CGN Pronico que extrae níquel. Los pobladores argumentan el ataque que significa para sus comunidades, por la contaminación al Lago de Izabal y el río Dulce, que afecta a los pescadores de toda la zona.
Prueba de la represión se pudo ver en mayo del 2017 cuando ante una protesta la Policía Nacional Civil respondió con balas, asesinando a un hombre de 31 años de edad. Aunque ante los medios aparecen los dueños de las empresas bajo un discurso de “diálogo con la población”, la mentira se sostiene por poco tiempo pues se sabe de por medio están los millonarios intereses de los empresarios.
“La justicia en Izabal está de lado de los ricos y en contra de los pueblos indígenas, estamos sufriendo diversas arbitrariedades”, declaró Angélica Choc, hermana de la detenida.
Ante la detención de María Choc, algunas organizaciones sociales y feministas se agrupan para denunciar la arbitrariedad de la captura y la inmediata libertad para la indígena, expresando la “condena al Estado racista y patriarcal de Guatemala, que no deja de perseguir a las hermanas cuidadoras de la tierra, las aguas, los bosques, los bienes comunes”, señala un comunicado, donde además se reconoce la labor de María en la defensa de las comunidades mayas q´eqchi, frente a las amenazas para su pueblo, de la minería, las mega-plantaciones y la violencia de Estado.
María y Angélica integran la Red de Sanadoras Ancestrales del Feminismo Comunitario de Guatemala, que tiene también otras compañeras criminalizadas, perseguidas y desterradas, como es el caso de Lolita Chávez.
Desde la red internacional de La Izquierda Diario y la agrupación de mujeres Pan y Rosas, nos unimos a la exigencia por la liberación inmediata e incondicional de María Choc y todos los presos políticos, así como el cese al hostigamiento a Lolita Chávez, y contra el Estado y régimen guatemalteco que mantiene en total impunidad el asesinato de las más de 40 niñas y mujeres del orfanato Hogar Seguro Virgen de La Asunción.