Las y los trabajadores del Hospital Barros Luco votaron esta semana una movilización por 24 horas a modo de advertencia, al igual que lo hicieron la semana pasada. Denuncian sobrecarga laboral, sueldos bajos y condiciones de trabajo muy precarias.
Viernes 1ro de abril de 2022
La FENATS del Hospital Barros Luco ha convocado a asambleas durante estas semanas para discutir la situación local y nacional de la salud, donde las y los trabajadores han planteado el problema de la asignación de turnos, la mala alimentación, la sobrecarga laboral, falta de personal, el mal estado de los pabellones, el problema del 4to turno, y del sueldo base, que en el caso de los funcionarios está por debajo del mínimo legal que rige para el sector privado, y solo se supera en base a bonos y asignaciones.
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Como han manifestado trabajadoras y trabajadores un problema profundo son los bajos sueldos, donde por ejemplo el sueldo base de un auxiliar de servicio es de $160.000 mil pesos, donde un auxiliar de servicio solo mediante asignaciones logran los $400.000 - $500.000 mil pesos, muy por debajo incluso del sueldo mínimo del sector privado. Esto es grave pues gran parte del sueldo de las y los trabajadores se da en torno a asignaciones y bonos; y muchos funcionarios que están bajo la modalidad de turno, quedan fuera porque las asignaciones están sujetas a cupos. Esta es una de las razones por las cuales el sueldo base debería elevarse y cubrir al menos los gastos esenciales de los trabajadores.
Las y los trabajadores sacan la voz frente a la precariedad de la salud pública.
Las y los trabajadores han mostrado su disposición de luchar, votando movilización por 24 hrs y realizando marchas internas afuera de la dirección del Hospital y el Servicio Metropolitano Sur. La Dirección del Hospital ha respondido parcialmente a las peticiones y demandas de las y los trabajadores, donde aún se mantiene la falta de agua caliente en algunos servicios, y además se suma el limitado cupo en las salas cunas para las y los trabajadores, la recuperación de la cancha de fútbol para la recreación, la no claridad de quienes acceden al descanso compensatorio, entre otras. Se planteó además el problema del sistema de turnos, lo cual significa sobre carga laboral.
Nuestra perspectiva de movilización
Las y los trabajadores del Barros Luco son un ejemplo a seguir en todos los hospitales y un camino que debemos profundizar en el Hospital mismo en coordinación, trabajo de comisiones, debates públicos, jornadas de agitación e informativas, preparar las asambleas junto a trabajadores y trabajadoras con tiempo, para ser una gran fuerza organizada.
La pelea por las demandadas es urgente e indispensable, pero no es fácil porque NO dependerá de las negociaciones o la buena voluntad de las autoridades, sino de nuestra capacidad de movilización. Por eso no confiamos en las palabras de buenas intenciones del gobierno y sus parlamentarios, porque el mismo Gabriel Boric y Mario Marcel han dicho que se respetará estrictamente el ajuste fiscal, que siempre lo terminamos pagando las y los trabajadores del sector público. Las y los trabajadores de la salud sabemos muy bien que nunca nos han entregado nada si no es por nuestra fuerza y unidad.
Pero hay que profundizar el camino de unidad, y enfrentar el divisionismo y localismos que nos separan, en donde cada uno se rasga con sus propias uñas. Por años la FENATS Metropolitana, que dirige el Partido Comunista, convoca a movilizaciones solo de dirigentes, se quedan en entregar cartas al ministerio y esperar su respuesta, sin proponerse organizar a los trabajadores. Sus actuales dirigentes se han limitado a gestiones políticas y legales con autoridades, y de ver quienes se quedan con la “medalla” de lo que se obtenga sin convocar a asambleas con sus bases de los hospitales y centros de salud, donde justamente es necesario levantar un plan de lucha en coordinación con los trabajadores de otros hospitales, mediante asambleas ínter hospitalarias y movilizaciones en conjunto.
No podemos depositar nuestra confianza en negociaciones con parlamentarios y ministros del gobierno de Boric y de Apruebo Dignidad, siendo estos últimos quienes durante años han dirigido la CUT y las grandes centrales de trabajadores, desmovilizando y desviando nuestras luchas. Hoy las dirigencias de las y los trabajadores a nivel nacional están en una tregua, confiando en el gobierno, en la Convención, en el parlamento, pero lo que hemos aprendido con los años, es que solo luchando, coordinados, en unidad y confiando en nuestra propias fuerzas vamos a conquistar nuestras demandas.
Abran Paso a las y los trabajadores de la salud
Desde la agrupación de trabajadoras y trabajadores de la salud Abran Paso tomamos el ejemplo de los y las trabajadoras del Hospital Barros Luco, pensamos que en todos los establecimientos de salud deben realizarse asambleas que definan qué medidas tomar frente a estos problemas, que como sabemos, afectan al conjunto de las y los trabajadores de la salud.
Creemos que es necesario impulsar una gran campaña nacional por elevar el sueldo base, que esté acorde a nuestras necesidades elementales, con asambleas, jornadas de discusión y difusión, acciones de movilización para preparar una movilización que imponga esta demanda. Invitamos a dar una gran discusión en torno a esto, pues el gobierno ya nos deja afuera y aplaza la discusión por años, creemos que tienen que ser por un sueldo mínimo de $650.000 mil pesos, sabemos que plata hay, pero se la llevan los grandes empresarios que saquean el país.
Al igual que se planteó en la asamblea del Hospital Barros Luco, si queremos conquistar estas demandas necesitamos movilizarnos en unidad y golpear con un solo puño; donde desde ya es necesario que la FENATS del Hospital Barros Luco convoque a preparar un plan ascendente de movilización, organizado desde las bases, con delegados por servicio que puedan plantear las problemáticas de sus compañeros, pues la situación en el hospital es crítica a cada momento y está no se va solucionar con asambleas sin preparación ni paros por 24hrs que pueden llevar al desgaste sin perspectiva. Es necesario dar una pelea porque más colegas se organicen, integrando además a las y los trabajadores subcontratados y honorarios que sufren las mismas problemáticas.
