Se mantienen las tendencias del reporte técnico epidemiológico al tiempo que se pone toda la atención en el suministro futuro de las vacunas luego de que AMLO fracasó en su intento de lograr que Pfizer adelantara sus próximos envíos.
Raúl Dosta @raul_dosta
Sábado 6 de febrero de 2021
Los estragos ocasionados por la pandemia de Covid-19 siguen avanzando y para el día de hoy ya se han acumulado en México 164 mil 290 muertes, en el marco de dos millones 109 mil 802 casos estimados, de acuerdo con el informe de la Secretaría de Salud dado a conocer este 5 de febrero en su conferencia vespertina. En el actual semáforo epidemiológico, 13 estados están en rojo, 17 en naranja y dos en amarillo: Campeche y Chiapas.
Ciudad de México es la entidad con la mayor ocupación hospitalaria y cercana a la saturación de camas con equipos para pacientes críticos (con ventiladores mecánicos) por Covid-19 con el 78%; le sigue Aguascalientes con el 69%; Edomex, con 68%; Nuevo León, con 67%; Colima, con 59% e Hidalgo y Oaxaca con 53%. Los porcentajes de las entidades que le siguen han ido bajando abruptamente en la última semana.
Al mismo tiempo, en cuanto a las camas convencionales, Ciudad de México ha bajado a 82% y Estado de México a 80%, seguidos de Puebla y Morelos con un esperanzador 75%. Esperemos que la tendencia se mantenga, aunque pareciera ser que los números estadísticos acuden en ayuda de las autoridades sanitarias, ahora que la parte alentadora del proceso de seguimiento a la incursión del virus SARS CoV-2 en nuestro país, que era la campaña de vacunación se ha atorado.
En este tema no hay mucho qué decir. Se han aplicado poco más de 700 mil vacunas de las cuales, cerca del 10%, 64 mil 246 personas, ya recibieron la segunda dosis. Tratando de preparar al auditorio para los díficiles días que se avecinan, López-Gatell comentó que el intento de AMLO de hablar personalmente con la dirigencia de Pfizer resultó infructuoso. Su idea era que nos soltaran un nuevo embarque lo más pronto posible pero le dijeron que no que la postergación se mantiene.
Lo que está detrás de esto, y López-Gatell lo reconoce parcialmente al mencionar que la Unión Europea ha determinado restringir las exportaciones hasta garantizar primero los pedidos de sus propios países, es la fuerte dependencia de los países subdesarrollados ante los intereses de las grandes potencias y sus grandes transnacionales farmacéuticas.
Tres décadas de neoliberalismo llevaron a la postración la economía y la estructura sanitaria del grueso de los países del mundo, que ahora son incapaces no sólo de fabricar las mercancías que surten al mercado internacional, sino cuestiones fundamentales para cualquier sociedad como productos farmacéuticos y tener disponible un sistema sanitario con hospitales suficientes y laboratorios para producir medicamentos esenciales como las vacunas.
En cuanto a los preguntadores a modo, cumplen su papel, permitiendo a López-Gatell desahogar los cuestionamientos que a diario sostienen los medios y personajes del bando opositor. Pero la preocupación porque el suministro de vacunas se retrase está latente en los funcionarios de la secretaría de Salud.
Quizás por ello López-Gatell hace énfasis en nuevas alternativas que van apareciendo: la casi llegada de la rusa Sputnik V, un nuevo lote de Astra Séneca, que será producido en la India y envasado en Querétaro (sic), un lote de Sinovac producido en China, otro de Cansino... etc.
