El Círculo Rojo. Hecha la ley, hecha la ganancia

• A la Ley Ómnibus y al paquete fiscal todavía les falta el trámite en el Senado Nacional, no obstante, los empresarios se frotan las manos por los negocios que les espera una vez que esas iniciativas sean aprobadas. Veamos los más importantes.

Blanqueo de capitales

• El blanqueo es muy generoso. Tanto que quien deposite el dinero en una Cuenta Especial de Regularización de Activos y mantenga allí el dinero no pagará nada de nada de impuestos, ni de multas, ni de nada.

• No solo eso. Además, podrá realizar inversiones desde esa cuenta. Y, eventualmente, con las ganancias obtenidas con esas inversiones pagar el impuesto especial del blanqueo y sacar el dinero de la cuenta. Cuestión que podrá evitar en la medida que preserve el dinero dentro de la cuenta.Por otro lado, quien decida blanquear y pagar el impuesto para disponer del dinero sin pasar por esa Cuenta Especial pagará una tasa “promocional” muy reducida que se ubicará entre el 5 % y el 15 %.

• Además, se abre el camino al blanqueo de dinero que puede provenir del narcotráfico o la trata de armas, en tanto no exigirá que se declare el origen de los fondos. Pero, fundamentalmente, el blanqueo va a beneficiar a los más ricos, que son quienes utilizan ingenierías contables y financieras provistas por los bancos para evadir impuestos y fugar capitales.

• Si nos remitimos a quienes ingresaron al blanqueo en la era Cambiemos, podemos darnos una idea de quienes podrían aprovecharlo ahora. En 2017 se filtró un listado con algunos de los que blanqueron.

• Figuraban Marcelo Mindlin, dueño de Pampa Energía, uno de los empresarios más ricos del país; el hermano del expresidente Gianfranco Macri; y Nicolás Caputo, amigo personal de Mauricio Macri y primo del actual ministro de Economía. No hay pruebas, pero tampoco dudas que el blanqueo tiene nombres y apellidos esperando lucir sus riquezas. ¿Cómo podríamos llamar al blanqueo? La ley de los evasores.

Impuesto a los Bienes Personales.

• Las modificaciones propuestas hacen que este impuesto, el único que graba directamente a los más ricos casi se extinga. Actualmente se pagan alícuotas de 1,75 % para activos localizados en el país y de 2,25 % para activos localizados en el extranjero. Las alícuotas se reducirán progresivamente hasta casi extinguirse: serán de 0,25 % desde 2027.

• ¿Cómo podemos titular a este beneficio? La ley de los más ricos. Es que beneficia directamente a Marcos Galperin, el hombre más rico de la Argentina. También serán beneficiados los hermanos Paolo y Gianfelice Rocca, dueños del Grupo Techint, que poseen la segunda fortuna del país. Se podría sumar a la lista de los ricos beneficiados a Alejandro Pedro Bulgheroni, dueño de PAE; Gregorio Pérez Companc, dueño de Molinos Río de la Plata; Eduardo Eurnekian, exjefe de Javier Milei en Corporación América; Eduardo Constantini, fundador de Nordelta; Alberto Roemmers del laboratorio que lleva ese nombre; la familia Werthein, de donde proviene Gerardo Werthein designado por Milei embajador en los Estados Unidos; Hugo Sigman del Grupo Insud; Alfredo Coto y la lista continúa.

• Pero no es tan larga porque la rebaja en Bienes Personales beneficia, fundamentalmente, a unos pocos miembros de la élite económica. Claro que muchos de estos personajes solo pagan el impuesto sobre los activos que tiene en el país porque, muchachos comprometidos con la patria, cambiaron de residencia fiscal a Uruguay u otros paraísos fiscales.

Privatizaciones.

• Las privatizaciones pueden ser un coto de caza para los fondos de inversión especulativos, como Black Rock, con fuertes lazos con el equipo económico y para el capital extranjero. Pero también para empresarios locales como el mencionado Eurnekian que tiene la concesión de los aeropuertos gracias a Carlos Menem y ahora podría, eventualmente, acceder a Aerolíneas Argentinas o de Intercargo (que realiza prestación de los servicios de atención en tierra a aeronaves), que están en el listado de empresas privatizables. ¿Cómo podemos llamar a este capítulo? Ley de precios cuidados para regalar empresas públicas.

Régimen de incentivo para grandes inversiones (RIGI).

• El principal beneficio es una reducción del Impuesto a las Ganancias para inversiones que superen los U$S200 millones. Es un régimen que parece orientado (aunque no solo) para atraer a empresas mineras para que saqueen los recursos naturales del país. No es casual que el quiebre en el bloque de Unión por la Patria quedó manifiesto cuando los diputados de Catamarca y San Juan, ambas provincias mineras, votaron a favor de este regalo tributario.

• A esto podríamos sumar el concepto que se estableció frente a los hidrocarburos donde lo que primará es la maximización de la renta y no el abastecimiento interno. Es un concepto que le gusta mucho a Techint que está metido con Todo en Vaca Muerta, pero también a muchas otras petroleras ¿Cómo podríamos denominar al RIGI y al nuevo principio para los hidrocarburos? La ley del extractivismo.

• Hecha la ley, hecha la ganancia. Este es el espíritu que recorre a toda la Ley Ómnibus y el paquete fiscal.