El jueves a la madrugada Israel bombardeó zonas libanesas al sur de ese país, lo que provocó la respuesta de Hezbollah, mientas el ejército israelí atacó sitios del sur del Líbano, esta vez con artillería. El país árabe continúa exigiendo a la ONU que intervenga para que el Estado sionista pare los ataques.
Mirta Pacheco @mirtapacheco1
Viernes 6 de agosto de 2021 14:15
En la mañana de este viernes volvió el enfrentamiento entre el ejército sionista y las milicias del Hezbollah libanesas, luego del ataque israelí el día anterior. El primero desde la guerra del 2006.
Benjamín Gantz, ministro de Defensa de Israel se reunió con su gabinete y con el jefe de personal de las "Fuerzas de Defensa Israelíes" Aviv Kochavi (cargo que ocupó antiguamente el mismo Gantz, lo que lo colocó en su actual puesto -por el alto prestigio que tiene entre las tropas del ejército-, el mismo que tenía en la última etapa del exgobierno de Netanyahu).
Hezbollah se atribuyó el lanzamiento de los cohetes, aunque el portavoz del ejército israelí planteó que fueron 19 los cohetes lanzados desde el Líbano, admitió que 3 de ellos cayeron en territorio libanés y el resto fueron dirigidos a campo abierto dentro de Israel, en zonas deshabitadas cercanas a asentamientos de colonos en los Altos del Golán como Ein Qiniyye y Neve Ativ (10 fueron interceptados por su cúpula de hierro).
Recordemos que una gran porción de los Altos del Golán, pertenecientes a Siria, fueron anexados por Israel luego de la guerra de 1967. De los 1800 km2 de esa meseta, el Estado de Israel se apropió de 1200 km2, otra porción (235 km2) permanece bajo control de las fuerzas de la ONU y el resto continúa bajo bandera Siria. Este último le reconoce al Líbano la soberanía de un pequeña porción de los Altos, denominada Granjas de Shebaa, cuestión que por supuesto Israel niega, con el apoyo de la propia ONU que tampoco le reconoce al país árabe ese territorio.
Continuando con su retórica y acciones ofensivas Gantz afirmó que "el Líbano permite que la actividad terrorista se lleve a cabo desde su territorio. El Estado de Israel actuará contra toda amenaza a su soberanía y sus ciudadanos, y responderá de acuerdo con sus intereses en el momento y lugar pertinentes".
A pesar de esto los propios generales del ejército de Israel afirman que Hezbollah -pero tampoco Israel- quiere una escalada de los enfrentamientos y lo explican con el hecho de que los cohetes lanzados desde el sur del Líbano cayeron en regiones abiertas en forma deliberada.
De todos modos Israel utilizó su ataque a territorio libanes del día anterior, como advertencia a Hezbollah pero con el objetivo de que el mensaje llegue a Irán, en momentos en que las negociaciones por un nuevo acuerdo nuclear del imperialismo estadounidense y el país persa pareciera estancado.
Joe Biden pretende alcanzar un acuerdo pero imponiendo condiciones duras, mientras espera a ver cuáles serán las señales de Ebrahim Raisi que asumió este último jueves la presidencia de Irán, un conservador que está en absoluta consonancia con el líder supremo Khamenei.