El primero de mayo conmemoramos a los mártires de Chicago, asesinados por pelear por los derechos de la clase obrera. Antes y después de este suceso se realizaron miles de huelgas y luchas protagonizadas por los trabajadores, vamos a hacer un recorrido por las huelgas en el fútbol, grandes luchas para conquistar derechos de los obreros de este deporte.
Sábado 29 de abril de 2023 16:20
Argentina 1931, se profesionaliza el fútbol
Esta historia tiene varios puntos donde comenzar, no vamos a seguir un orden cronológico para relatarla.
El 6 de septiembre de 1930 el general Uriburu encabezó el primer golpe de estado en nuestro país, derrocando al gobierno de Hipólito Yrigoyen con el apoyo de un sector de la sociedad civil. El expresidente dejó el cargo dando la orden de no reprimir a los golpistas, lo mismo haría Perón en 1955, abandonando a los sectores obreros a su suerte, pero eso es parte de otra historia.
A nivel mundial se produjo la caída de la bolsa de Nueva York en 1929 y se profundizan las tensiones entre los gobiernos imperialistas y las masas obreras. La crisis económica se profundiza en Argentina, al igual que la represión a la clase trabajadora, como siempre el ajuste no pasa sin violencia.
En el fútbol argentino, las diferencias entre los clubes grandes y los chicos es cada vez más insalvable.
Ya no es el deporte de esos locos ingleses, las masas de trabajadores lo invadieron y lo tomaron en sus manos, o en sus pies, No solo dentro del campo de juego, también en las tribunas, hay clubes con más hinchas y otros con menos simpatizantes pero con igual fervor. La pelea en el interior de la asociación es cruenta, el amateurismo marrón, los sueldos pagados a escondidas o por trabajos ficticios son moneda corriente, pero no todos los equipos tienen las mismas posibilidades. Los de menor arraigo, que son mayoría, se resisten a la profesionalización del fútbol. Para los cinco grandes es una necesidad, en el medio, los que no llegan a la convocatoria del grupo de los cinco, pero que tienen más seguidores que los más chicos se reparten entre los que quieren seguir en estado amateur y los que ven con buenos ojos dar el salto a una nueva liga.
Los clubes más poderosos se llevan a los mejores players, los de menos recursos intentan blindarlos para que no se los roben. Al ser mayoría, y de la mano de un ajedrecista en la materia de tejer alianzas, Augusto Rouquette, delegado del club Banfield, puso leyes para proteger "sus inversiones".
La ley candado hacía prácticamente imposible el traspaso de un jugador de un club a otro, impidiéndole a estos lograr mejores ingresos, obviamente sin declararlos, los futbolistas eran propiedad de los clubes. Una muerte anunciada fue la de Héctor Benjamín Arispe, integrante del plantel de Gimnasia de La Plata, que en medio de la ola de calor que azotó a la ciudad de Buenos Aires falleció en el transcurso de un partido con Sportivo Barracas el 1 de marzo de 1930, Ante la negativa de los clubes de suspender los partidos, la mutual de jugadores elevó sus quejas contra la asociación y los clubes, la fecha se jugó igual y el resultado fue una muerte evitable.
El profesionalismo no vino solo por la lucha de los futbolistas, pero estos interpretaron la situación y vieron que era su momento para enfrentar a los dirigentes de los clubes, el 25 de marzo de 1931 más de 200 futbolistas se reunieron en asamblea en el salón principal del diario Crítica sacando la resolución de pedir los pases libres a los clubes, para darle fuerza a sus reclamos se negaron a jugar dos amistosos con la selección en Paraguay
La respuesta de los dirigentes de los clubes no se hizo esperar, expulsaron a los jugadores que se negaron a viajar, Evaristo, Carricaberry, Bertolucci, Setis, Figueroa, Giudice, Corveto, Zurdo, acusándolos de agitadores. El conflicto ya no tenía vuelta atrás.
El 13 de abril de 1931 se volvieron a reunir en asamblea y deciden ir a la huelga por tiempo indeterminado, al terminar, cerca de las 23 horas, marcharon a casa de gobierno al grito de Pases Libres. Fueron recibidos por el dictador Uriburu.
Los clubes designan otros jugadores para ir a Paraguay, en su mayoría de los clubes chicos, afines al presidente de la asociación, pagando una importante suma de dinero a los que rompían la huelga y jugaban los partidos, Al momento de la partida del combinado argentino, se produjeron enfrentamientos entre huelguistas y carneros en la dársena donde salía el barco rumbo a Paraguay.
El partido se jugó, fue empate en 1 a 1, los medios que simpatizaban con la huelga, o con la profesionalización del fútbol se negaron a informar del resultado, los hinchas estaban del lado de los jugadores, los clubes ceden y ofrecen pases con consentimiento de los clubes, algo que es insuficiente para los jugadores.
El comienzo de la temporada de 1931 siguió siendo incierto mientras continuaba la lucha entre quienes promovían el profesionalismo y quienes buscaban preservar el amateurismo. Los jugadores organizan un partido amistoso con la participación de los jugadores más destacados , los que son vitoreados en cada partido en estadios, y la multitud se reúne de manera amplia para mostrar su apoyo. El 10 de mayo se intentó jugar la fecha, con jugadores que rompían la huelga, algunos clubes decidieron no presentar los equipos, en los pocos que se jugaron el público fue a fastidiar a los carneros, el inicio del campeonato fue un fracaso, la segunda fecha ni siquiera intentaron jugarla.
Las cartas ya estaban echadas, por un lado se produjo la tercera división de la liga, de un lado quedaron los que rechazaron la conformación de la liga profesional y los que no fueron invitados, quedándose con el reconocimiento de FIFA y una cáscara vacía, del otro, quedaron los clubes que formaron la nueva liga, que jugarían el primer campeonato profesional Racing, Boca Independiente, River, San Lorenzo, Huracán, Vélez, Ferro, Platense, Atlanta, Chacarita, Tigre, Quilmes, Lanús, Argentinos, Talleres de Escalada y los clubes de La Plata Estudiantes y Gimnasia. Los jugadores lograron la derogación de la ley candado, pero algunos jugadores quedaron marcados como líderes anarquistas del conflicto y vieron terminada su carrera: Bertolucci, Setis F, Cherro, y Scursoni.
Así nació el fútbol profesional, al calor de la lucha por el negocio del fútbol y de la primera huelga de los trabajadores del balompié, contra dirigentes y el gobierno del dictador Uriburu.
Uruguay 1948, de la mano del Negro jefe
Hablar del mundial de 1950 es hacerlo de la victoria celeste en el Maracaná, los hinchas y sobre todo los uruguayos han sabido transformar ese partido en mito. Y no fueron los autores de los goles, ni el arquero los que quedan en el mito, lo fue su número 5, el capitán del equipo, el Negro jefe, Obdulio Varela.
Pero no se ganó el reconocimiento de sus compañeros por la famosa arenga, la de los de afuera son de palo, se la ganó un par de años antes, cuando fue uno de los líderes indiscutidos de la huelga. Para entenderlo empecemos por situarnos en el Uruguay de 1948, los derechos eran solo para los dirigentes no para los futbolistas.
El primer reclamo era el más básico de que se reconozca al sindicato de futbolistas. Los dirigentes se negaron, pensando que con eso cortaban toda rebelión, pero la respuesta fue contundente, no hay más fútbol hasta que reconozcan al gremio de futbolistas. No fue una lucha sencilla, fue larga, siete meses duró la huelga, muchos tomaron o volvieron a sus viejos trabajos, Obdulio, por ejemplo trabajo de albañil, durante esos siete meses se agiganta la figura de Varela. Las asambleas las hacían por la noche, después de trabajar, la proximidad del mundial y la inquebrantable fuerza de los huelguistas torcieron el brazo de los dirigentes.
Las condiciones antes de la huelga eran cercanas a la esclavitud. El futbolista que firmaba para un club lo hacía de por vida. Si era transferido no sólo no recibía un peso, no era necesario que aceptara él traspaso. Si la transferencia era al exterior, de regreso a Uruguay seguía perteneciendo al club de origen. Si el club no estaba de acuerdo con su rendimiento le podía aplicar quita en su salario o rescindirlo.
Luego del triunfo los futbolistas podían decir que no a una transferencia, negarse a ir al exterior, y obtenían el 20 % en las mismas.
Además del triunfo en la lucha, lograron el triunfo en la cancha en el mundial, ante la presencia de 200000 brasileros en el Maracaná, la historia oficial tiende a darle el título de negro jefe por su arenga, pero viene de antes, de lograrlo en la lucha de clases por los derechos de los trabajadores del futbol. Al regreso del Mundial se negó a los homenajes, a compartir palcos con los explotadores.
El negro jefe murió en silencio y en la pobreza, pero con la dignidad intacta y con un gran ejemplo para la lucha de clases.
Argentina 1948, una huelga contra Perón
Abril de 1948, en la presidencia de la nación Juan Domingo Perón, y los futbolistas hacen algo impensado, le hacen un paro a Perón.
Desde el comienzo del profesionalismo en 1931, los jugadores no eran libres de buscar nuevos clubes al finalizar sus contratos, tenían que pedir permiso a sus antiguos clubes para firmar nuevos contratos.
La primera reivindicación entonces era, la libre contratación. Otra reivindicación sentida era eliminar el techo salarial existente y cambiarlo por un piso salarial. También pedían los mismos derechos que tenían el resto de los trabajadores, aguinaldo, vacaciones e indemnización.
Al inicio del conflicto la AFA pretendió ser mediadora, pero al igual que el ministerio de trabajo no puede ser juez y parte ante el reclamo de los trabajadores del estado, la AFA no podía hacerlo entre jugadores y clubes. La asociación del fútbol era presidida por un dirigente pensionista, Óscar Nicolini, que logró frenar la huelga por un tiempo, pero a finales de junio los trabajadores volvieron a la carga por sus demandas, y empezó un largo conflicto entre clubes y futbolistas, con la enorme presión del estado para mantener el espectáculo del fútbol.
El conflicto continuaba y a principio de noviembre los clubes dan por terminadas las negociaciones y reanudan los torneos con juveniles, amenazando con suspender por dos años a los huelguistas.
La Secretaria de trabajo pretendió mediar, pero la condición era frenar la huelga, los trabajadores se negaron y el fútbol volvió con juveniles.
La huelga se levantó a fines de noviembre con el triunfo de la lucha, logrando el sueldo mínimo y la libre contratación, los contratos no podían ser superiores a los tres años, y pasado ese tiempo los jugadores quedaban libres.
En mayo de 1949 fue reconocida la agremiación de futbolistas
Pese al triunfo muchos jugadores emigraron a seguir su carrera en otros países, muchos fueron a Colombia, pero eso es parte de otra historia. El triunfo de los jugadores fue una victoria inmensa
ante los clubes y el gobierno peronista, para lograr el estatuto del futbolista fue otra gran lucha a principios de los 70.