El 9 de agosto de 1984 se convocó a la jornada “Chile defiende la Vida”, en el marco del contexto del auge de las protestas contra la dictadura. Ese día, Hugo Bravo Fuentes, de solo 19 años, fue asesinado por una bala de carabineros.
Natalia Cruces Santiago de Chile
Domingo 9 de agosto de 2015
Hugo Bravo tenía solo 19 años de edad, era cesante y no tenía militancia política; participaba de la Jornada “Chile defiende la Vida”, que había convocado Cardenal Raúl Silva Henríquez, también Clotario Blest, uno de los referentes del movimiento sindical de oposición, organizaciones de derechos humanos y otras figuras públicas como la hija del general Carlos Prats, asesinado por la dictadura y la DINA en Buenos Aires (el 30 de septiembre de 1974), entre otras personalidades.
Ese día, miles de personas se reunieron para rechazar la represión y manifestar su oposición a la dictadura cívico-militar, que ya llevaba 11 años en el poder, con brutales violaciones a los derechos humanos, pero también con una transformación profunda en el país, a raíz de la imposición del sistema económico neoliberal, que significó la destrucción de importantes conquistas sociales, sindicales y económicas, que se perdieron producto del Plan Laboral Piñera (1979), la privatización de la salud y la educación, como también una brutal crisis económica que tenía a los sectores obreros y populares sumidos en la pobreza y la miseria, con cerca de un 30% de desocupación.
Hugo era uno más de los manifestantes, que durante esa noche participaba de la jornada de movilización en una población, en la zona de Camino Agrícola con Exequiel Fernández, en las que estaban reunidas cerca de 100 personas. Carabineros llegó al lugar a reprimir, disparando contra los manifestantes, provocando la muerte de Hugo producto de un disparo que dio en su cabeza.
Durante estos meses se realizaron muchas manifestaciones contra la dictadura, con miles de asistentes a nivel nacional, pero también aumentaba la respuesta represiva, con decenas de relegados, expulsados del país y de las universidades, despedidos en los lugares de trabajo por movilizarse, cientos de personas torturadas y detenidas.
Según el informe de la Vicaría de la Solidaridad “Por una cultura de vida, basta de muerte” que daba cuenta de que 100 personas habían muerto producto de la represión, entre el 11 de mayo de 1983 (primera jornada de protesta nacional contra la dictadura) hasta el 11 de mayo de 1984.
Fotos: Archivo Vicaría de la Solidaridad