San Luis. Cerca de 5.000 personas coparon las calles de la capital puntana en defensa de la educación pública. Docentes, estudiantes y familias integrantes de la comunidad educativa le dijeron basta al Gobierno de Alberto Rodríguez Saá, el cual, viene imponiendo políticas y reformas contra la educación pública y los derechos de miles de docentes y estudiantes.
Martes 28 de junio de 2022 22:43
Cerca de 5.000 personas coparon las calles de la capital puntana en defensa de la educación pública. Docentes, estudiantes y familias integrantes de la comunidad educativa le dijeron basta al Gobierno de Alberto Rodríguez Saá, el cual, viene imponiendo políticas y reformas contra la educación pública y los derechos de miles de docentes y estudiantes.
De la convocatoria, participaron: el Frente Gremial Docente, integrado por la Unión de Trabajadores de la Educación Provincial (UTEP), la Asociación Sanluiseña de Docentes Estatales (ASDE), la Unión Docentes Argentinos (UDA) y el Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP); la Asociación de Docentes Universitarios (ADU); el Colectivo de Docentes en Lucha (SL); el Colectivo de Docentes Autoconvocados; la Agrupación Docente 9 de Abril; y diversas organizaciones estudiantiles.
Asimismo, en solidaridad, estuvieron presentes trabajadoras y trabajadores de la salud, nucleados en la Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud (APTS); y trabajadoras y trabajadores judiciales, nucleados en el Sindicato Judiciales Puntanos (SiJuPu).
Los reclamos que más se sintieron fueron: ¡No a la reforma del Estatuto Docente! ¡Basta de precariedad laboral! Por plenos derechos laborales y plena carrera docente; por paritarias libres y sin techo; ¡Basta de desfinanciar y vaciar la educación pública!; Por la inmediata apertura de cargos docentes; por un salario digno; ¡Que cada cargo docente alcance para cubrir el costo de la canasta familiar e individual!; entre otras demandas.
La multitudinaria jornada de movilización ha demostrado que las bases docentes están bien dispuestas a organizarse y luchar por sus derechos; que no van a agachar sus cabezas ante los atropellos del Gobierno provincial; y que mantendrán vivas las exigencias a las conducciones gremiales para que sigan convocando a asambleas, en las cuales se debata y resuelva un plan de lucha con paros y acciones en las calles.
Todo ello en unidad y coordinación con las bases estudiantiles, los centros de estudiantes, la comunidad educativa, los demás sindicatos y sectores de trabajadoras y trabajadores, y las organizaciones sociales, políticas, de Derechos Humanos y culturales que sean independientes a los Gobiernos.