Jueves 21 de marzo de 2019
Este dibujo está inspirado en la historia de Víctor Basterra, trabajador gráfico y militante detenido en la ESMA durante la dictadura. Por sus conocimientos técnicos fue usado por los militares como mano de obra esclava. Lo obligaron a falsificar documentos y a fotografiar a detenidos y represores. Pero Basterra siguió el pedido de un compañero: "Negro, si zafás de ésta, que no se la lleven de arriba". Hacía tomas de más y ocultaba los negativos en sobres que los guardias no revisaban. Pacientemente fue armando un archivo de evidencias y documentos secretos. Con el tiempo, cuando el control aflojó y le permitieron salidas vigiladas, empezó a sacar estos materiales a escondidas. Los llevaba pegados con cinta en las piernas o en los genitales. Estos negativos llegaron a los abogados de derechos humanos y fueron un testimonio vital para juzgar a los genocidas. ¡Gracias, Victor Basterra!