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Red Internacional
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Salud pública. Hospital Garrahan: ¿Cómo ganamos la lucha para romper el techo salarial?

El miércoles 7 de julio terminó la séptima jornada de paro por aumento del 50% en una sola cuota, un básico equivalente a la canasta familiar, contra la insalubridad y por el pase a planta permanente.

Jueves 8 de julio de 2021 23:19

Las y los trabajadores del hospital Garrahan venimos llevando adelante contundentes paros con la participación de todos los sectores del mismo. En algunos sectores llegan al 80% de adhesión, garantizando las guardias mínimas para continuar con la atención hacia nuestros pacientes. Nada nos va a impedir que salgamos a exigir nuestros derechos.

La demanda de aumento salarial busca terminar con el pluriempleo. Tener dos y hasta tres trabajos para llegar a fin de mes, no solo provoca enfermedad y envejecimiento prematuro en nuestros cuerpos, sino que afecta la calidad de atención de nuestros pacientes. Luego de dos o tres guardias continuadas, sin un correcto descanso, baja la calidad de atención a los mismos.

El Hospital Garrahan sale en los medios de comunicación por ser un hospital de referencia de alta complejidad. Pero lo que no se dice es que la excelencia del manejo de residuos patológicos la garantizan tercerizados de limpieza que no llegan a $ 30 mil de salario. Que los trasplantes y cirugías de avanzada se sostienen con técnicos de anestesia monotributistas. Que el salario medio de la mayoría de los 7200 trabajadores apenas supera los $50 mil.

Esta situación crítica en plena segunda ola de la pandemia es producto del ajuste que viene llevando adelante el Gobierno Nacional que impacta en nuestros pacientes que vienen a la consulta sin comer y son parte del 61% de niñas, niños y adolescentes que solo en PBA y por las decisiones políticas de Kicillof están subsumidos en la pobreza. Se agrava con el recorte del 12% al presupuesto de salud para pagar al FMI y los especuladores. Y aunque hagan campaña con el plan de vacunación no nos olvidamos de los que murieron esperando su dosis mientras el millonario Hugo Sigman se fugaba vacunas desde Garín con el aval del Gobierno.

Para este plan no hay grietas y el Garrahan es un ejemplo muy concreto con un Consejo de Administración en el que codirigen cuatro directivos kirchneristas y uno macrista. La única respuesta fue un comunicado amenazando con descuentos y sanciones disciplinarias con la mentira de que abandonamos la atención de nuestros pacientes. Por su parte, Oscar Trotta, uno de los directores del Consejo de Administración, funcionario kirchnerista desde su cómodo sillón dijo que éramos una minoría y que ya hicieron el esfuerzo de pagar el aumento miserable en cuotas.

Pero no nos van a poder dividir. Compañeros que estamos impulsando y apoyando las jornadas de paro desde antes de reintegrarnos de la licencia por grupo de riesgo, que por esa razón no nos van a llegar los descuentos, nos ponemos a la cabeza de aportar y difundir el fondo de lucha. No nos van a amedrentar.

Al igual que en la enorme lucha de salud de Neuquén las direcciones sindicales firmaron contra los trabajadores. UPCN, SUTECBA, ATE Nacional y de Capital avalan la rebaja salarial. Como lo hicieron las y los trabajadores de la salud en Neuquén, exigimos que convoquen a un paro y plan de lucha nacional en defensa de la salud pública. Es necesario que tomemos las lecciones que nos dejan los elefantes y discutamos cómo ganar.

¿Cómo llevar adelante la lucha?

La última asamblea votó una marcha al Ministerio de Trabajo el día jueves 15 de julio, exigiendo la reapertura de paritarias para el hospital Garrahan. También llamamos a los estatales a exigir juntos apertura y 50% de aumento salarial para todos.

Estas acciones endurecen nuestro conflicto. Pero si vemos el ejemplo de la lucha de nuestros compañeros de salud en Neuquén, para ganar necesitaron no solo paros fuertes en los hospitales con la solidaridad de toda la comunidad, con los pacientes, sino también acciones duras que afectaron las ganancias millonarias del pozo petrolero, un golpe que el Gobierno no pudo invisibilizar.

Por eso desde la Agrupación Marrón Clasista apoyamos esta perspectiva, a la vez que llamamos a los compañeros a discutir que vamos a tener que endurecerlo mucho más para derrotar las paritarias de hambre que nos impone el Gobierno. Tenemos que decidir cuál es el “Vaca Muerta” de CABA, donde podemos golpear para que les duela a los Gobiernos y a las direcciones sindicales traidoras evitando que nos puedan ocultar. Podemos seguir el ejemplo de la coordinación de los sectores en lucha y los autoconvocados de salud que cortaron el Puente Pueyrredón. Cortar un acceso a la capital para golpear al Gobierno Nacional, responsable de la miseria salarial.

Hoy mismo los trabajadores tercerizados del ferrocarril Roca, cortaron las vías por el pase a planta permanente y confluyeron con una multitudinaria marcha de desocupados, a eso se lo llama coordinación de sectores. Tenemos que seguir y superar este camino, llevando a cientos de trabajadores de la salud a cortar el Puente Pueyrredón y otras acciones que golpeen fuertemente.

Son grandes tareas y venimos agotados por el colapso de las salas, seguimos teniendo más de un trabajo y la crisis impacta en nuestras familias. Pero si hay algo que demostraron los últimos paros es que hay fuerza para luchar.

En cada una de las asambleas se fueron destacando referentes de todas las salas. Compañeras que con gran claridad y sentimiento expresan a la comunidad por qué luchamos. Esas compañeras y compañeros que están a la cabeza de la lucha, pueden fortalecer la organización, a la vez que es muy importante mantener las asambleas unitarias que se lograron impulsar entre Junta Interna ATE, la Asociación de Profesionales y la Comisión de Condiciones de Trabajo Insalubres y/o Agotamiento Prematuro (CTIAP).

En el Garrahan tenemos la tradición construida por la combativa Junta Interna ATE Roja que en la lucha del 2005 puso en pie un Cuerpo de Delegados con representantes de todos los sectores. También mantenemos la tradición de votar delegados paritarios. Contraria a la tradición de la burocracia sindical, la dirección del conflicto, los debates, la organización de las propuestas y tareas a ser refrendada en asamblea, la construimos desde abajo, entre las y los trabajadores.

Una tradición opuesta a la directiva de ATE Nacional y de ATE Capital, que ahora llama a paro el 12 y 13 de julio por flyer sin asambleas para votar como garantizar hacerlo efectivo. Es necesario que se decidan a un plan de lucha nacional en serio y rompan la tregua con el Gobierno. Como denunció nuestro compañero Marcelo Gómez, Delegado Gral. de la Junta Interna DGMus-ATE y de la Agrupación Marrón Clasista en el plenario de ATE Ciudad, los trabajadores estatales y muchos precarizados, continúan bajo la línea de pobreza por las paritarias firmadas a la baja. Allí también propuso que el sindicato aporte al fondo de lucha para el hospital Garrahan en nuestra pelea por el 50% de aumento, como se ganó en Neuquén. No tuvo respuesta de la mesa. En el hospital seguimos esperando ni más ni menos, que el reintegro de nuestra cuota sindical para enfrentar los ataques del Gobierno.

Desde la Agrupación Marrón Clasista en Salud opinamos que tenemos el gran desafío de tomar lo mejor de nuestra tradición, que cada compañera se anime a pasar al frente, votar delegados por sector y en asamblea, construir una potente organización para ganar.

Como expresó la compañera Florencia Claramonte, delegada de la Junta Interna ATE Garrahan, en la asamblea se votó un gran primer paso en ese sentido, el llamado a las compañeras y compañeros de la asamblea a participar de las reuniones de delegados abiertas. Cada una de las compañeras y compañeros que pelearon por construir el paro, que lograron apuntalar la lucha en el hospital, tienen que estar a la cabeza de discutir cómo tenemos que dar esta pelea para ganarla, impulsando la elección de delegados para llevar su fuerza a todo el Garrahan.

Solidaridad y coordinación

Como dijimos, hace falta mucha fuerza para ganar este conflicto, para lograr el aumento del 50% en una cuota que estamos exigiendo. Y esa fuerza está. Está en los compañeros que ya impulsaron siete jornadas de paro, está en los muchos compañeros que nos expresaron su solidaridad, aún antes de convocarlos ampliamente. Y está en la enorme lucha que vienen dando todos los trabajadores de la salud en la Ciudad de Buenos Aires, el AMBA y a nivel Nacional. Necesitamos la más amplia coordinación, contra la fragmentación que quieren imponer las direcciones sindicales. Por eso este sábado 10 de julio a las 13 horas en la puerta del hospital Garrahan (Combate de los Pozos 1881), convocamos a una reunión de apoyo a la huelga del mismo, coordinación con todos los sectores solidarios con nuestra lucha. Tenemos el desafío de que nos acompañen a realizar las medidas contundentes que nos permitan ganar y con ello fortalecer la lucha de todos los que enfrentan la miserable paritaria del 35% en cuotas que nos mantiene, como trabajadores, en la pobreza.