Trabajadores y trabajadoras de la Salud de la localidad bonaerense realizaron un abrazo simbólico al Hospital en forma de protesta. Denuncian las pésimas condiciones de trabajo, la falta de personal e insumos.
Martes 23 de febrero de 2021 19:15
Con el escándalo de las vacunas VIP como telón de fondo, y tras la renuncia de Ginés González como ministro de Salud a causa del destape de situaciones de corrupción y amiguismo en la provisión de vacunas contra covid-19, se desarrolla otro capítulo de la lucha de las y los trabajadores de Salud, esta vez en el Hospital Municipal de Chascomús.
La localidad con poco más de 42 mil habitantes, cuyo municipio tradicionalmente estuvo liderado por intendentes radicales, tiene ahora al massista Javier Gastón (hijo del radical Juan Carlos Gastón) del UNA a la cabeza desde el 2015. Es un botón de muestra de lo que la pandemia dejó al descubierto: una debacle generalizada del sistema de salud que se viene arrastrando hace décadas, sin importar el color político de los diferentes gobiernos, y con profundas carencias en materia salarial, de derechos laborales y de infraestructura edilicia.
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La semana pasada, los trabajadores del Hospital de Chascomús realizaron un acción para visibilizar la situación que atraviesan: “El reclamo actual lleva organizado poco más de 20 días, pero los problemas estructurales que nos llevan a movilizar están hace décadas", comentó uno de los trabajadores autoconvocados, "como medida de fuerza, en la guardia no se atienden consultas de baja complejidad, pero no se dejó de atender las urgencias y emergencias, como han mentido reiteradamente las autoridades en los medios locales”.
Los problemas que acusan las y los trabajadores van desde no contar con cubiertos para comer o no tener un baño para los médicos, hasta la falta de personal para cubrir las guardias, personal sin acceso a un contrato durante años, o la ausencia de ajustes salariales durante el 2020. Por otro lado, el personal denuncia que frecuentemente queda sólo un médico clínico para cubrir las necesidades de los más de 42 mil habitantes, situación similar a la que sucede en la guardia de pediatría.
Por su parte, Enfermería lleva años luchando por mejoras salariales, reconocimiento de la carrera profesional y compensación de sus condiciones de trabajo insalubre, además de los nombramientos correspondientes.
Mientras, el secretario de Gobierno, Cipriano Pérez del Cerro y el subsecretario de Capital Humano y Producción José Yezza Ross, presentaron ante el ministerio del trabajo papeles que supuestamente mostrarían “importantes aumentos salariales” o “guardias perfectamente cubiertas por tres médicos clínicos todos los días de enero”, los trabajadores del Hospital sostienen que esos aumentos no existieron.
Luego de la actividad, las y los trabajadores tuvieron una reunión de conciliación obligatoria en la Secretaría Local de Trabajo, lograda luego de numerosos intentos de los trabajadores por ser escuchados. Estos denuncian que hasta ese momento habían recibido únicamente como respuesta amenazas y maltratos por parte de funcionarios y autoridades del Hospital.
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