Hoy se cumplen 28 años de la desaparición de José Ramón García Gómez. militante internacionalista que participó en la lucha de los trabajadores en Canadá, Francia, España y en su país, México.
Viernes 16 de diciembre de 2016
Convencido de la necesidad de la reconstrucción de la Cuarta Internacional, militó en el Partido Comunista Internacionalista sección francesa de la Cuarta Internacional (CIR), a su regreso a México se incorporó a las filas de la Liga Obrera Marxista (LOM), organización que en 1986 se fusionaría con el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) conformando la Tendencia Cuarta Internacional.
José Ramón, fiel a los principios de la democracia, participó de la lucha por la defensa del voto, contra el fraude electoral de 1988 organizando asambleas populares en Cuautla.El 16 de diciembre de aquel año, salió de su domicilio en la ciudad de Cuautla, Morelos, con rumbo a la ciudad de México donde participaría de una reunión de su corriente.
José Ramón nunca llegó a su destino; en plena carretera fue abordado por agentes del Estado que formaban parte del Grupo de Investigaciones Políticas de la Policía Judicial, creado por mandato del otrora gobernador Antonio Riva Palacio López, dirigido por los comandantes Antonio Nogueda y Apolo Bernabé Ríos García.
En aquel momento José Ramón fue privado de su libertad, y desparecido por el Estado Mexicano, convirtiéndose en el primer desaparecido político del sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
Las investigaciones del caso en cada momento fueron entorpecidas por las autoridades, y se desató una campaña de desprestigio y calumnia contra el propio José Ramón, su esposa Ana Santander y contra los defensores de derechos humanos y los activistas que en Morelos, en México y a nivel internacional realizaron campaña por su aparición con vida.
Después de 28 años, este crimen ha quedado impune y es un ejemplo de las actividades represivas del Estado y su política de encubrimiento de los responsables.
Desafortunadamente el caso de José Ramón no es aislado, hoy en México tenemos muchos casos más, quizás el más impactante es el de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
Hoy como ayer es necesario seguir luchando, exigir la aparición de los desaparecidos políticos. José Ramón, militante trotskista tenía el sueño de transformar esta realidad y derrotar el capitalismo, La mejor forma de honrarlo es continuar con esta lucha.