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Red Internacional
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DESASTRE AMBIENTAL. Incendio que consumió 35 hectáreas de selva en Holbox pudo ser provocado

El pasado 17/09, se registró un incendio forestal en la isla de Holbox, Quintana Roo, parte del área natural protegida (ANP) de Yum Balam y refugio natural de varias especies en peligro de extinción.

Axomalli Villanueva

Axomalli Villanueva @1quiahuitl

Miércoles 21 de septiembre de 2016

El pasado 17 de septiembre se registró un incendio forestal en la isla de Holbox, en el estado de Quintana Roo, según habitantes de la zona, a partir de las 14:00 hrs. del sábado, se alertó sobre la lluvia de cenizas que cayeron en los alrededores de la zona. Esta isla pertenece al área natural protegida (ANP) de Yum Balam y representa un refugio natural para varias especies en peligro de extinción, tanto vegetales, como animales.

Esta ANP es hogar de especies como las tortugas marina, de carey, y blanca; también de jaguar, ocelote, boa constrictor, mapache, aguililla negra menor, garza, halcón peregrino, golondrina de mar, flamenco americano, manatí, especies de delfines, así como el tiburón ballena, el pez más grande del mundo. Además, está compuesta por especies de manglar, selva baja, matorral, vegetación de duna, elementos endémicos, pastizales inundables y palmares.

El incendio pudo ser provocado

Ejidatarios del lugar y organizaciones como Grupo Ecologista del Mayab (Gema), Salvemos Manglar Tajamar, Greenpeace México y Yo Defiendo Holbox, denuncian que este incendio pudo ser provocado, ya que sucedió fuera de temporada, en una zona de difícil acceso y que además no tiene presencia de actividad ganadera ni agrícola, además de que no hay presencia de población. De la misma forma implican a la firma Península Maya Developments, pues es en este terreno donde pretende hacer el polémico proyecto de La Ensenada, el cual es un complejo turístico de ultra lujo.

El proyecto La Ensenada ha sido acusado de no promover la preservación ni representar un desarrollo turístico sustentable, ya que no se trata de turismo de bajo impacto, el cual de ser construido ocuparía un espacio para construir hasta 875 villas y condominios, 195 cuartos en tres hoteles, seis lotes de preservación y una unidad turística de tres niveles que tendría plazas, oficinas y aproximadamente 3,000 metros cuadrados de áreas comerciales al menudeo, sumando un total de 2,450 cuartos.

Activistas y comunidades originarias en contra del proyecto han advertido que de llevarse a cabo se dañarían los ecosistemas de manglar y las poblaciones de las especies enlistadas bajo categorías de riesgo; se descargarían contaminantes a los ecosistemas marinos, provocaría la contaminación salina en el acuífero, crearía un nuevo centro poblacional, y se pondría en riesgo la pesca de la que dependen los pobladores de la región.

Critican el “desinterés” de las autoridades ambientales

Organizaciones civiles reprocharon que las autoridades ambientales del gobierno federal no actuaran de manera inmediata para sofocar el incendio en la Isla Holbox, en Quintana Roo, pues apenas después de 48 horas de iniciado el fuego, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que su personal sobrevolaba la zona para combatir los puntos activos.

Además de que no enviaron el equipo adecuado, ni el personal suficiente, ya que hasta el domingo solo habían enviado apenas a 10 peritos a la zona, y nunca dieron la posibilidad de traer, avionetas o helicópteros adaptados con tanquetas de agua que son las adecuadas para combatir este tipo de incendios, ya que la zona de por si es de difícil acceso, el activista Carlos Martínez Correa, de la organización Todos Unidos por Holbox AC, denuncio que:

“Ayer (domingo) sólo mandaron a 10 personas, los de la SAGARPA, y sin machetes, sin rastrillos, nada, y la gente del pueblo les está dando material; o sea, sin ganas de parar el incendio”

Ante esto una brigada de activistas se unió para llegar hasta la isla para ayudar a controlar el incendio.

Se exige que se imponga una veda de hasta 20 años

Luego de dos días de intenso trabajo, el incendio fue controlado, se estima que al menos 35 hectáreas de selva y pastizal se perdieron, Por su parte, la Comisión Nacional Forestal (CNF) aseguró que más de 40 personas de la Profepa y de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) trabajaron para sofocar el incendio, justificó que se trata de una zona de difícil acceso, por lo que los equipos de rescate tardaron en llegar.

Activistas y organizaciones no gubernamentales han exigido que la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) levante una investigación para aclarar cuál fue la causa del incendio y en el caso de que haya sido provocado, apelar al Artículo 117 de la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable, el cual establece que no se podrá otorgar autorización de cambio de uso del suelo en terrenos incendiados sin que hayan pasado 20 años o hasta que se acredite que el ecosistema se ha regenerado en su totalidad.

La depredación turística no es nueva para la zona, ya vimos como, a inicios de año, las empresas constructoras devastaron en Cancún la zona de mangle en Tajamar, un ecosistema frágil y que al mismo tiempo brinda incontables servicios ambientales. Todo esto siempre ha estado en complicidad con las autoridades que muchas veces encubren ecocidios de esta magnitud, mientras que empresarios lucran con la devastación de la naturaleza.