Según los datos relevados, desde la presentación del proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, se practicaron alrededor de 450 mil interrupciones de embarazos al año, fueron 653 personas gestantes quienes murieron en abortos clandestinos y las mujeres pobres son las más afectadas.
Jueves 28 de mayo de 2020 11:06
Desde el Observatorio de Género de La Izquierda Diario, presentamos el siguiente informe a 15 años de la fundación de la Campaña por el Aborto legal, seguro y gratuito. A diferencia de otros años, en el que esta fecha encontraba al movimiento de mujeres en las calles, este año transcurre en medio de una pandemia. Sin embargo, la pelea por este derecho elemental sigue vigente, dado que miles de mujeres y disidencias se ven relegadxs a abortar en la clandestinidad.
Este informe se realiza con los fines de mostrar la pelea histórica por este derecho en Argentina durante el último periodo y los desafíos que se abren hoy en un contexto de crisis económica y sanitaria. Según los datos relevados, desde la presentación del proyecto por parte de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, murieron 653 mujeres por abortos clandestinos. Asimismo, nos parece necesario visibilizar que todos los años se practican alrededor de 450 mil abortos, siendo las mujeres pobres las más expuestas a estas prácticas inseguras, arriesgando su vida y su salud.
Frente a estos datos no quedan dudas de que legalizar el aborto es una cuestión pública y de derechos humanos que no podemos atrasar más tiempo.
En este informe también analizamos cómo se profundiza dicha desigualdad en tiempos de pandemia, donde se dificulta el acceso a los centros de atención primaria. Si bien el acceso al derecho de practicar la Interrupción Legal del Embarazo está garantizado por la Constitución Nacional, en el Código Penal desde 1921, su aplicación varía enormemente entre las diferentes provincias, debido a su autonomía.
Esto dificulta enormemente que las mujeres y disidencias puedan acceder a la ILE, como sucede actualmente en Santiago del Estero, donde una niña de 12 años víctima de una violación ve sus derechos vulnerados al negarle la posibilidad de abortar.
En medio del aislamiento social obligatorio, los casos de violencia de género no paran de subir. De hecho, como señala la ministra de Mujer, Género y Diversidad de la Nación, Elizabeth Gómez Alcorta, en el tiempo que llevamos de cuarentena el femicidio se convirtió en el único delito que no disminuyó. Como señalamos anteriormente, desde el Observatorio de Género, contabilizamos 54 femicidios desde que comenzó la cuarentena obligatoria hasta el 22 de mayo. Frente a esta situación, el Estado debe informar correctamente sobre los casos de violencia de género y tomar las medidas correspondientes.