Por increíble que parezca, el Mayor General anunció una campaña de recolección y distribución de leña en la región andina frente a la escasez del gas doméstico en el país. A los niveles que se ha llegado con este tipo de propuestas desde el Gobierno en medio de la catástrofe económica y social.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Viernes 23 de octubre de 2020
En una alocución realizada en una rueda de prensa, el jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral (REDI) Los Andes, el Mayor General Ovidio Delgado Ramírez, anunció el inicio de un plan de distribución de leña a los habitantes de la región andina, en un intento por encontrar “alternativas” a la escasez de gas doméstico.
Para Ovidio Delgado, la distribución de leña es una “solución” que buscó el gobierno para ofrecer a las personas, ante la crisis que sufren los habitantes de la región por servicios públicos deficientes o inexistentes.
La propuesta del militar consiste en utilizar los árboles, arrastrados por las corrientes de los ríos que desembocan en los embalses de las centrales hidroelectricas ubicadas en la región, para extraer leña y distribuirla a las personas para que cocinen.
“En esta represa hay gran cantidad de árboles que arrastran los ríos. Cuando viene la época de lluvias, el torrente es un poco más fuerte. Ayer empezamos a cortar todos esos árboles y vamos a iniciar una campaña con nuestros compañeros representantes políticos para repartir leña”, relata en un video.
El desparpajo y la justificación son para dejar boca abierta a cualquiera. Para el Mayor General, en lugar de incrementar la producción de gas, el recurrir a leña lo argumenta diciendo que es necesario adaptarse a las situaciones y que el “manejo manipulado de los recursos” creó una ansiedad en la población que le obliga a comprar más cantidades de las que necesita.
En otras palabras, para el pueblo de acuerdo al militar se trata que se transformó en “consumista”. “Nos crearon ansiedad producto del manejo manipulado de los recursos. Es lamentable, pero ¿Qué vamos a hacer? Tenemos que adaptarnos”, recalca. “No se trata de volver a la prehistoria, pero en casa de mi abuela y de mi mamá cocinaban con leña”.
Venezuela es un gran productor de gas tanto para escala industrial como para el uso doméstico. Pero en medio de la catástrofe económica y social que se arrastra por más de seis años, la producción de tan preciado recurso para millones en el país se ha venido a pique tal como se ha venido abajo también la industria petrolera, llegándose al desparpajo de propuestas de volver a la cocina a leña.
Una situación devenida de las políticas económicas que empezó a implementar el Gobierno luego de la caída de los precios del petróleo a finales del 2013 e inicios del 2014, donde decidió pagar hasta más no poder una fraudulenta deuda externa en vez de atender las grandes necesidades del pueblo. Luego más fue un recorrer de desastres económicos para llegar a la catástrofe actual, llegando a niveles de producción petrolera de comienzos del siglo XX, una situación que se ha visto agravada por las sanciones económicas que luego vino a imponer Estados Unidos, aumentando las calamidades del pueblo.
