Durante la mañana de ayer martes, la Inspección del Trabajo falló en contra de la apelación del Sindicato de trabajadores del GAM sobre el derecho a negociar colectivamente.
Fernando Jiménez Trabajador patrimonial y columnista de La Izquierda Diario Cultura
Miércoles 9 de enero de 2019
Durante la mañana de ayer martes, la Inspección del Trabajo se pronunció en contra de la apelación del Sindicato de trabajadores del GAM sobre el derecho a negociar colectivamente.
El motivo es que se considera que no hay obligación a negociar ya que GAM es una corporación que recibe más del 50% de fondos estatales, siendo al final el Ministerio de Hacienda quien condiciona que por esa “transferencia directa” del 50% de fondos estatales los trabajadores del GAM no pueden acceder a este derecho. Este tipo de transferencia correspondería a una donación, pero es claro que el GAM, con sus convenios con el Ministerio, cumple una prestación de servicios.
Acto seguido, la Directiva del GAM denunció que debido que el fallo de la inspección va en la misma linea de las “mesas de diálogo” que el ministro del trabajo Monckeberg con la próxima reforma laboral del gobierno de Piñera que quiere reforzar los grupos negociadores y debilitar los sindicato y fortalecer a las herramientas de los empresarios para desactivar la organización de los trabajadores.
Durante el día martes 08 de Enero, la empresa, dada la álgida movilización y las grandes demostraciones de Solidaridad de actrices y actores, y las cartas enviadas por el sindicato a las y los trabajadores de Unilever, a parlamentarios y centrales sindicales, accedió a crear una mesa de trabajo para negociar las condiciones, un claro triunfo de las y los trabajadores.
No es primera vez que la Inspección del Trabajo, encabezada por Gloria Fuentes Riquelme (Coordinadora jurídica), Max Álvarez Durán (coordinador relaciones laborales) y Jorge Meléndez (Regional), en complicidad con miembros del directorio del GAM como lo son Cristian Uribe Concha (secretario del directorio), Felipe Mella (director ejecutivo) y Patricio Soto Caramori (director de administración y finanzas), niegan un derecho mínimo como lo es negociar colectivamente a los trabajadores del GAM, perpetuando la precarización y la flexibilidad contra la que el sindicato está luchando.
El 2017, después de un inédito fallo a favor por el derecho a negociar, la Inspección del Trabajo retrocedió por intervencionismo del Gobierno y se retractó. Lo decía José Luis Ugarte, experto en derecho laboral de la UDP al Desconcierto: “Lo único que lo explica es la falta de autonomía política de la Dirección del Trabajo. No es difícil pensar y especular que aquí hubo una intervención política desde un nivel superior a la DT, para cambiar abruptamente y sin explicación de criterio”.
La respuesta del Sindicato del GAM: a reforzar la movilización y rodearla de solidaridad
Ante la notificación de la Inspección, el sindicato llamó a asamblea extraordinaria masiva en donde se discutieron los pasos a seguir. El ánimo de los socios fue claro: continuar con la movilización. Al no existir la obligación de negociar por parte de la empresa, el éxito de la misma es un tema de voluntades, y las voluntades pueden romperse. Los trabajadores saben a servicio de quienes está la Inspección. Se decidió reforzar la movilización buscando aliados en otros procesos abiertos, como la lucha que están dando los trabajadores de Unilever que recientemente fueron golpeados con 180 despidos en la empresa, o los trabajadores de CIC que están en huelga hace aproximadamente un mes.
Diversos actores políticos, sindicales y sociales, han salido a apoyar el proceso que está llevando a cabo el sindicato, que busca doblarle la mano a la empresa y sentarlos a negociar.
Las y los trabajadores del sindicato GAM hacen un llamado para este jueves 10 de enero, a las 18:00 horas, a participar del carnaval solidario y pasacalle que buscará seguir el ejemplo de los portuarios y demostrar que con unidad, movilización y organización, se puede dar una importante señal de fuerza a los empresarios que nos niegan la negociación colectiva, que nos dejan sin trabajo y que acostumbran a especular con la vida de los trabajadores y trabajadoras
