Ayer los intendentes que apoyan a Cristina Fernández salieron a cruzar al ex ministro. “Son un grupito” le espetaron. A menos de una semana del cierre de las listas, las cosas están caldeadas.
Jueves 8 de junio de 2017
Randazzo quiere PASO. La frase tiene rima y realidad. El exministro de Transporte y del Interior quiere competir en las elecciones internas dentro del FpV. Pero desde el sector que apoya a la expresidenta lo que menos hay es buena sintonía.
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“Son un grupito minoritario dentro del FpV. Es muy triste lo que está haciendo Randazzo”, afirmó Mario Secco. El intendente de Ensenada se pone belicoso. Es de los que vienen presionando porque la exmandataria se ponga al frente de las listas.
Hay que reconocer coherencia. A diferencia de muchos otros jefes territoriales es “cristinista” desde siempre. Muchos otros jugaron a la “renovación” e incluso impulsaron la candidatura de Randazzo y, cuando leyeron encuestas, se dieron cuenta que los votos estaban en otro lado.
“Cristina nos llamó y nos pidió a todos que estemos unidos. Por encima de los intereses personales, con vocación de unidad. ¿Te venís a hacer el artista? dejate de joder”, siguió Secco.
Es cierto, Cristina Fernández pidió estar por “encima” de los intereses personales. Pero siempre por debajo de ella y, por ende, de sus intereses. Se posición como la candidata de la “lista de unidad”, para así limitar todo desafío interno.
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En el sector que está con Randazzo no se dejan correr. "No somos un grupo de necios. Tenemos que oír lo que dice el votante" dice Alberto Fernández, el ex massista que antes fue kirchnerista, luego de haber sido duhaldista. El pedido de PASO sigue a paso firme.
“La unidad existe; lo que no hay es lista única” agregó el hombre que fue acusado por el Gobierno del que formaba parte Randazzo de ser “el operador” de Clarín.
Fernández agregó que "algo malo debe haber pasado para que Macri sea presidente", en tono autocrítico. ¿Qué pasó? Nadie lo sabe. Por las dudas el candidato de ese espacio sigue mudo.
“Esperemos que haya recuperado la voz” dijo en tono irónico un referente kirchnerista. El chiste pega en el clavo, aunque su autor sea parte del espacio que le otorgó gobernabilidad a Macri durante más de 16 meses.
La interna peronista, a medida que se acerca el 14 de junio, se muestra cada vez más feroz. Habrá que ver si la sangre llega al río. O si solo es una puesta más en escena de las internas de un partido que, con renovación o sin ella, garantiza los intereses del capital a costa de los intereses de los trabajadores.
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