El pasado miércoles se realizó la interpelación al ministro de Salud respecto a la objeción de conciencia en el aborto en 3 causales y el financiamiento estatal a las instituciones que se declaren como tal.
El Gobierno de derecha busca limitar aún más este derecho a decidir de las mujeres. Está planteada la necesidad de que mujeres, estudiantes y trabajadores sean una fuerza organizada para conquistar el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.
Jueves 3 de mayo de 2018
El día de ayer, miércoles, alrededor de las 14:30 horas finalizó la interpelación que se realizó al ministro de Salud, Emilio Santelices, por el cambio en el protocolo de aborto en 3 causales respecto a la objeción de conciencia.
Fue la diputada Marcela Hernando, del Partido Radical, quien encabezó esta interpelación con preguntas sobre la modificación del protocolo, y en conjunto con la oposición parlamentaria de la Nueva Mayoría y el Frente Amplio buscaron increpar al ministro ante la permanencia de la objeción de conciencia, de parte de personas individuales como de instituciones completas, sin que esto afecte el aporte estatal a estas instituciones.
El debate se centró en lo antidemocrático de esta medida, que pasó principalmente por el fallo del tribunal constituciones para modificar la ley avalando que miembros de los cuerpos médicos como instituciones y clínicas puedan ser objetores de conciencia. Y sobre lo que respecta a suspender los convenios que tiene el Estado con las clínicas que se definan objetoras de conciencia, como la Clínica UC.
Todo esto en el marco de un Gobierno derechista que a pocos días de asumir ya buscaba limitar, con el fallo del TC, aún más este derecho conquistado por el movimiento de mujeres que solo cubre un 3% de los abortos realizados en Chile, y que ha expresado manifestaciones brutales de la prohibición de este derecho, como la muerte de Estefanía Cabello, joven de 22 años que falleció en Curicó porque no se aplicó el protocolo de aborto pese a tener un embarazo de alto riesgo.
Y es que, efectivamente, la prioridad del Gobierno y de su Ministro Santelices no está con las mujeres ni con quienes hoy necesitan de forma vital realizarse un aborto, incluso cuando cumple los restringidos criterios de las 3 causales, sino que parece estar más con los intereses de los empresarios y dueños de las clínicas privadas que se niegan a realizar este procedimiento y continúan recibiendo aportes estatales que deberían ir a fortalecer la salud pública, altamente precarizada especialmente para las mujeres.
Sin embargo, no será en interpelaciones en el parlamento donde se puede aclarar, como planteaba la Nueva Mayoría, la situación, ni mucho menos resolverla. Mucho menos cuando fue la misma Nueva Mayoría y sus partidos quienes se negaron durante años a este derecho por el cual cientos de mujeres nos hemos organizado durante años, y que desde el momento de conquistarlo fue con los límites que la moral conservadora de la derecha y los intereses de los empresarios impuso, dejando la puerta abierta para que se limitara aún más como hoy hacen Piñera y sus Ministros.
La movilización del movimiento de mujeres será la herramienta que nos permita defender nuestros derechos que hoy la derecha pretende atacar y reducir, organizándonos desde cada lugar de estudio y de trabajo para generar una gran fuerza, no solo de mujeres sino también de estudiantes y trabajadores, que pelee por este derecho, pero también por conquistar el aborto legal, seguro y gratuito, garantizado en cada hospital para todas las mujeres que así lo decidan, y una educación sexual que se hace urgente para poder decidir. Así lo planteamos desde Pan y Rosas, levantando comisiones de mujeres con este objetivo.
Así mismo, en un contexto de movilizaciones y discusiones estructurales en distintas universidades y del movimiento estudiantil en contra del mercado en la educación, como viene ocurriendo en el Pedagógico donde está planteada la necesidad de democratización de la casa de estudio para dar solución a la profunda crisis en que se encuentra, es central que el movimiento estudiantil en su conjunto tome las demandas del movimiento de mujeres, levantando una gran campaña por el derecho al aborto a nivel nacional, para conquistarlo.