Desde hace 6 meses, el policlínico Identidad de Género del hospital Carlos Van Buren, vio cómo las platas dejaron de llegar, produciendo que hormonas, así como los pabellones respectivos para pacientes trans, ya no fueran posibles de contar para estos usuarios.

Lilith Herrera Activista trans
Miércoles 18 de mayo de 2016
Por ello, estas compañeras y compañeros vienen generando acciones con el objetivo de visibilizar la problemática que afecta, principalmente, a personas del pueblo precarizado. Hasta ahora, no ha existido respuesta satisfactoria por parte de las autoridades.
En lo concreto, una de las intervenciones, tuvo lugar durante la mañana de este martes, en las afueras del recinto médico. Hasta allí, llegaron usuarias y usuarios, así como familiares, amigos y agrupaciones como Pan y Rosas, Alternativa Obrera y Fundación Iguales.
Durante el acto se explicó la razón de la manifestación, al tiempo que se hizo entrega de volantes. Posteriormente, pacientes y cercanos, ingresaron a las dependencias del recinto para continuar repartiendo los informativos, llegando incluso, a la oficina del director.
Lo que dicen los pacientes
Victoria González, expresó: “demando una solución ahora, ya, al tiro nomás,”, refiriéndose al director del hospital.
Por su parte, Francisco Romero, quién también cumple un rol de vocero, hizo alusión al impacto de la interrupción hormonal en los usuarios
“Todo esto ha sido una situación negativa y de incertidumbre, tanto desde el punto de vista psicológico que involucra todos los aspectos de nuestras vidas, social, laboral, estudiantil, etc. y también en algunos casos de usuarias que han visto retrocesos en sus avances físicos.”
Desde el mundo sindical
La demanda levantada por los usuarios del policlínico, familiares y amigos ha ido sumando a más actores, uno de ellos es Antonio Paez, quien como Secretario del Sindicato de Trabajadores Sturbucks, Coffe Chile hizo notar la importancia que los sindicatos tomen en sus manos la lucha trans.
“Me parece que es importante que las organizaciones sindicales nos sumemos a estas actividades que acompañemos las y los compañeros trans. No podemos permanecer ajenos a una realidad que es constante y totalmente discriminatoria hacia un grupo importante de trabajadores. Existe en un sin número de trabajos una persecución constante hacia las identidades de género que no respondan a “hombre-mujer”. Esto no es tolerable y no puede ser que las organizaciones que dicen defender los derechos de todos y todas se queden al margen. Extender este tipo de actividades hacia las organizaciones sindicales, nos obliga como trabajadores a ponernos en la vereda de las y los compañeros de la diversidad sexual que hoy sufren todo tipo de discriminación y especialmente en el mundo laboral. Somos nosotros y nosotras las convocadas a dar una pelea por nuestros derechos y nuestras identidades sean aceptadas sin ningún tipo de arbitrariedad o que tengamos que esconder nuestra sexualidad.”
Luego de lo expresado, es claro que la demanda continuará siendo levantada por las compañeras y compañeros del policlínico, lo cual representa todo un hito en la región y a nivel país.