El pasado viernes 14 se se congregaron más de cien jóvenes en el Festival Antirrepresivo, donde artistas y bandas de varios estilos se pronunciaron contra la represión y la impunidad, con especial mención a los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, además de difundir los conflictos obreros en curso.
Martes 18 de noviembre de 2014
Más de cien jóvenes concurrieron el viernes 14 de noviembre al Festival Antirrepresivo que organizó la Juventud Trabajadora del PTS e Independientes, para denunciar la violencia por parte de las fuerzas represivas contra el pueblo trabajador. Se hizo mención de los casos de Luciano Arruga, desaparecido, torturado y asesinado por la maldita bonaerense solo por haberse negado a robar para ellos. Franco Casco cuyo cuerpo apareció en el río también asesinado por la policía. Mariano Ferreyra muerto por las balas de las patotas sindicales, el brazo represivo de los burócratas, traidores que a su vez son bancados por el gobierno nacional. Y a los 43 estudiantes desaparecidos en México, en manos de la policía y un Estado que convive y resguarda a narcotraficantes asesinos. Además se denunciar las salvajes represiones por parte de la Gendarmería hacia los obreros y obreras de Lear. Todos ellos victimas de distintas maneras de represión.
La noche comenzó con Seo MC y Willy Player, dos jovenes de Dock Sud que como tantos otros sufren el hostigamiento de la gendarmería y a través de su rap cuentan sus vivencias en los barrios y manifiestan su bronca contra esta fuerza que persigue y verduguea a los jóvenes humildes.
Estudiantes de la organización mexicana Movimiento de Trabajadores Socialistas (MTS) y otros independientes de la Escuela Normal Superior de México, saludaron la jornada desde su país con un video, denunciando la desaparición de los normalistas y dieron su apoyo a la consigna "familias en la calle nunca más" que se escucha en cada lucha que enfrenta cierres y despidos en nuestro país.
En el intervalo posterior se acercó el saludo de militantes de la Juventud del PTS que llamaron a seguir con la denuncia a todos los atropellos policiales e hicieron una invitación al acto del 6 de diciembre que se desarrollará en el estadio cubierto Argentino Juniors, para que se expresen todos los sectores combativos de izquierda, que quieran enfrentar las políticas de ajuste de este gobierno y mostrar una alternativa diferente a la oposición de derecha. Bárbara Acevedo, delegada del Hospital Garrahan, tomó el micrófono para denunciar la muerte de Emanuel, enfermero del Hospital Posadas, como responsabilidad de las autoridades y la desidia general del sistema de salud. Y contar como el dolor y la tristeza se transformó en bronca manifestándose en un paro por tiempo indeterminado, pidiendo la renuncia del director Donato Spaccavento.
Después de esto se apropiaron del escenario los pibes de Viejas Navidades, la banda punk del festival, que ofrecieron un poco de distorsión y tempos rápidos. Siguiendo la impronta antirepresiva característica del estilo se desempeñaron tocando temas propios y algún que otro cover combativo de 2 Minutos y Ataque 77.
Luego para retomar la línea de las rimas antiyuta, se apoderaron del micrófono Asterisco, que dio su apoyo a los trabajadores de Lear y MadyGraf (ex Donnelley) y Kris Alaniz que con su tema "Latinoamérica de Mujeres" sumó la violencia que sufren las mujeres con la complicidad de la policía a las denuncias de la jornada.
Terminado el segmento de rap obrero y combativo llegó el momento de La Chusma para meterle un poco de baile a la noche, haciendo un rock que se fusiona con ritmos como murga o reggae, y con frases como "si no hay memoria no hay conciencia, si no hay conciencia hay capitalismo" que incitan a reflexionar mientras se mueven las patas.
Para el final de la noche La Logia Kumbiera le dio vida a un giro metálico que invitaba a buscar una pareja y entregarse a una encantadora cumbiancha a la que nadie pudo resistirse a bailarla como pudiese, y mucho menos cuando desde el escenario se incentivo al descontrol al grito de "¡El que no salta es policía!".
Una vez finalizado el evento, siguieron las charlas con ánimos de seguir dándole continuidad a este tipo de espacios y no permitir que la violencia policial quede impune.