Una es auxiliar de aseo en una universidad estatal, otra es operadora postal en la empresa Correos Chile, y la otra joven trabaja en supermercados Cugat. Las tres son dirigentas sindicales y son parte de una generación de mujeres que se propone ser un sujeto político y transformador de esta sociedad.
Viernes 22 de diciembre de 2017
Estos últimos años la presencia de mujeres dirigiendo organizaciones sindicales, políticas, sociales; en movilizaciones por #NiUnaMenos y contra la violencia machista; por el derecho al aborto, entre otras reivindicaciones, ha tomado más fuerza que nunca. El debate sobre el feminismo y sus variantes incluso ha llevado a preguntarse qué rol deben cumplir las mujeres en estos tiempos, y qué perspectivas se deberían forjar.
Desde La Izquierda Diario conocimos a tres jóvenes mujeres, trabajadoras y dirigentas sindicales que conversaron sobre la experiencia sindical y política en sus respectivos lugares de trabajo, y también sobre el trabajo de base que han forjado junto a sus colegas, los desafíos que se proponen como mujeres y feministas, y también plantearon su visión ante la llegada de la derecha al gobierno con Sebastián Piñera.
Camila Delgado (27) es trabajadora y presidenta del Sindicato de Supermercados Cugat, en Temuco, ex estudiante de Antropología de la Universidad Católica de Temuco (UCT), y militante de la agrupación de mujeres y diversidad sexual Pan y Rosas.
Joseffe Cáceres (30) es secretaria de la Asociación Nacional de Funcionarios (ANFUMCE), del ex Pedagógico, y se desempeña como auxiliar de aseo en dicha universidad hace un año y un mes. Es madre de un niño de nueve años, e integrante de la agrupación Pan y Rosas.
Beatriz Bravo (28) es trabajadora postal y delegada sindical del Centro Tecnológico Postal (CTP) de Correos Chile, y ex estudiante de filosofía de la Universidad de Chile, trabaja hace tres años en la empresa estatal.
La Izquierda Diario: ¿Cómo fue el proceso de llegar a tener un cargo de representación sindical?
Camila: En abril del año pasado comencé a jugar un rol de ir informando bastante a mis compañeros de trabajo sobre las cosas que pasaban, especialmente que se venía la reforma laboral y que, por lo tanto, iba a ser muy difícil formar sindicatos en empresas donde no los habían. Entonces yo me ofrecí, junto a otros compañeros de trabajo, a llevar ese proceso y sacar adelante el primero sindicato del supermercado Cugat, con mucho cuidado y cautela para que no sucediera lo que pasaba antes, que ante cualquier sospecha de intento de formar un sindicato los trabajadores eran despedidos. Bueno, así llegué a tener el cargo sindical, porque les plantee a mis compañeros y compañeras de trabajo que eran ahora o nunca, y que teníamos que hacerlo, teníamos que organizarnos.
Joseffe: Llevo un año y un mes trabajando en la universidad, y este año vivimos un proceso de elecciones en la asociación, donde saqué la primera mayoría, y estoy comenzando recién a tomar un rol como dirigenta sindical. Sin duda es una experiencia completamente nueva, incluso por el tiempo, ya que la mayoría de los dirigentes sindicales donde yo trabajo tienen quince o veinte años de experiencia como dirigentes. En ese sentido que yo haya saco la primera mayoría y sea una dirigenta de la asociación de funcionarios es una sorpresa no solamente para mi, sino que para el conjunto de los funcionarios de la universidad. Fue un proceso bastante rápido. Yo tengo una relación muy cercana con compañeros, sobre todo con jardineros y colegas de talleres y auxiliares de aseo; y a partir del proceso de movilización por las universidades estatales contra la reforma universitaria que levantó el gobierno, fui parte de quienes cumplimos un rol en la organización de la movilización. Hace años que no ocurría un proceso de movilización.
Por otra parte, junto a estudiantes, que también son de la agrupación Pan y Rosas, de la cual yo soy parte, hicimos diversas actividades, como conmemorar el 8 de marzo, día de la mujer trabajadora, el día del trabajador a nivel internacional, desayunos entre trabajadores y estudiantes, entre otras actividades que lograron generar un lazo entre estamentos de la universidad.
Beatriz: Fue un proceso que se desarrolló con un grupo de colegas que fueron clave. Una de las experiencias importantes fue la lucha por la negociación colectiva el año pasado, en donde nos organizamos con un grupo de compañeros de la planta; primero con cuatro y luego éramos veinte en la negociación. En ese momento nos pusimos "El SOP para las bases" (Sindicato de Operadores Postales), y nos organizamos en pos de algunas demandas como el aumento el sueldo base, que en Correos es el sueldo mínimo, y también por la organización de trabajadores como la única forma de conseguir estas exigencias.
Luego de todo este proceso seguimos organizados bajo una lista llamada "El SOP para las bases", donde planteábamos la lucha por el aumento del sueldo base, crítica de las direcciones sindicales oficiales, y la necesidad de la organización de base como, por ejemplo, impulsar comisiones de mujeres.
La Izquierda Diario: ¿Cuáles son las principales ideas por las que te conocen tus colegas y apoyan tu cargo sindical?
Camila: Creo que me fui haciendo conocida entre mis colegas por haber levantado el sindicato, y por plantear desde un principio que el sindicato era un espacio desde y para los trabajadores, con mucha independencia del empresario y de las jefaturas. Además nuestro sindicato es muy democrático, ahí planteamos que todas las decisiones se toman en las asambleas entre todos; por otra parte hay un grupo de delegados que juegan un rol clave en el sindicato, ya que nos permite también fortalecer las secciones que son las que hacen funcionar al supermercado.
Por otra parte, las demandas de las mujeres trabajadoras también las tenemos muy al centro, incluso hace poco hicimos una asamblea donde conversamos sobre el acoso sexual en los trabajos, sobre el respeto mutuo que debe haber entre colegas, entre otros temas. También creo que soy conocida entre mis colegas porque estar siempre buscando vincular las luchas sociales, los problemas que pasan en el país y también las luchas internacionales, como lo que sucedió en Argentina con los trabajadores de la fábrica Pepsico, donde hicimos una actividad en apoyo a ellos, lo que nos parece importante como forma de fomentar la solidaridad entre trabajadores.
Joseffe: Las principales ideas por las que me conocen mis colegas son varias, pero una es que siempre he buscado poner en el centro la necesidad de la unidad entre funcionarios, ya que es una problemática bastante importante hasta el día de hoy, lamentablemente. También otra idea importante es la necesidad de que conquistemos el paso a planta de los funcionarios en la universidad; y a la vez las demandas de género y de las mujeres que está ligada con la violencia que se vive en el Pedagógico, como acoso laboral y sexual. Para esto creo importante que levantemos comisiones de mujeres en los lugares de trabajo , y en ese sentido que la asociación sea una herramienta para las y los trabajadores.
Por último, apostar por fortalecer los métodos democráticos al interior de la asociación. Siempre hemos puesto al centro este aspecto, que sean los colegas los que decidan el rumbo, que hagamos asambleas donde podamos expresar nuestras posturas y opiniones. Esto me parece fundamental porque lleva a pensar otro eje, y es que los trabajadores podemos hacer política. Nos enseñan y dicen que no podemos tener opinión, e incluso organización como sucede en muchos lugares de trabajo y fábricas, sobre las problemáticas que nos afectan a nivel internacional. Nos dicen que debemos preocuparnos solo de las problemáticas más habituales, del trabajo- que son importantes y debemos tomarlas-, pero nosotros podemos hacer política más allá como funcionarios, pensar otro tipo de sociedad y de proyecto. Y es contradictorio porque las mismas personas y autoridades que nos dicen que los trabajadores no podemos hacer política o que ’la política es mala’, son parte de los partidos tradicionales; pero a nosotros nos prohíben, entonces es bastante cínico.
Beatriz: Creo que represento a una delegación sindical democrática; les informo a mis colegas de las cuestiones que suceden, intercambiamos ideas, y además está la experiencia que hemos demostrado, que somos muy distintos a los dirigentes que son de la Nueva Mayoría y de Amplitud- que es de derecha-, ya que nosotros siempre hemos puesto al centro las reivindicaciones de los trabajadores.
Por otra parte, somos quienes planteamos que la pelea que debemos dar como trabajadores es a nivel nacional, es decir que debemos organizarnos como sujetos políticos. En todas partes nos dicen que como trabajadores no podemos hacer política, no solo algunos dirigentes sindicales, jefaturas, sino también nos rige un Código del Trabajo que nos limita a lo que quieren los empresarios y la burguesía. Buscan que no hagamos política, por algo también no se permite que dirigentes sindicales puedan postular a cargos públicos en el parlamento. Todo esto fue lo que no hizo pensar en la planta que debíamos tomar una posición como trabajadores, o sea, nos preguntamos entonces quiénes tomarán en sus manos la tarea de construir una alternativa, y bueno creo que debemos hacerlo nosotros.
La Izquierda Diario: Estos últimos años la "cuestión de la mujer" ha tomado mayor importancia, al igual que las demandas de las mujeres y el "feminismo". ¿Cuál es el rol que deberían cumplir las mujeres en el contexto actual?
Camila: Yo creo que en estos momentos las demandas de las mujeres son cada vez más escuchadas, producto de la misma lucha que hemos dado en las calles, denunciando toda la opresión de este sistema que recae sobre nuestros hombros. Sin embargo, creo que ese rol, el de denuncia, es insuficiente, y creo que debemos dar un salto no solamente a denunciar, sino a querer transformar esta sociedad; a que en nuestros propios lugares de trabajo y estudio planteemos que esto no es un problema individual, sino un problema colectivo. Por lo tanto, somos nosotras mismas las que podemos darle la mejor solución, y para eso tenemos que ubicarnos de manera dirigente ante la vida, y tomar estos espacios de dirigencias como una tribuna que nos permita plantear nuestras ideas, las nuestras y las de nuestros compañeros que juegan un rol importante. Nosotras no solo debemos buscar terminar con la opresión de este sistema, sino también con la explotación que nos afecta como sector de esta sociedad, como clase trabajadora. Ese rol debemos tomar las mujeres, un rol de transformación, un rol revolucionario.
Joseffe: Lo primero que debemos entender es que el machismo y la violencia es una problemática a nivel de sistema, estructural. A mi parecer son los gobiernos, los partidos corruptos, la Iglesia como institución, quienes sostienen esta violencia hacia las mujeres, en conjunto con el Estado. Por otro lado, creo que los desafíos que tenemos las mujeres es pensarnos, vernos, como sujetos políticos de transformación de la realidad. Si eso está fuera de nuestra visión va a ser poco probable que podamos transformar estas condiciones de vida de opresión, explotación y discriminación. Esto debemos hacerlo de la mano con nuestros colegas, compañeros hombres también, con quienes hay que luchar contra estas condiciones y problemáticas. Para fortalecer esta lucha creo importante que podamos fomentar espacios de organización, como comisiones de mujeres, donde podamos formarnos, estudiar, discutir sobre nuestras reivindicaciones y luchar por estas. El objetivo es cambiar esta sociedad capitalista y desigual.
Beatriz: El rol que debemos cumplir es clave, nuestra lucha en los lugares de trabajo es imposible sin ganar la fuerza del conjunto de los trabajadores para nuestras demandas, que sientan que también son suyas. Evidentemente, en el capitalismo, el machismo ha sido inculcado a los trabajadores. Nosotras damos una batalla por transformar esa conciencia, poniendo al centro que solo los empresarios se enriquecen con esto, con estas desigualdades entre hombres y mujeres.
Debemos levantar comisiones de mujeres, entusiasmar a las compañeras con emprender dar estas batallas. Por ejemplo, en la planta vamos a implementar en marzo un taller de autodefensa, pues nuestros turnos (entramos a las 7:30 en el turno de mañana, salimos a las 22:30 en el turno de tarde, y el turno de noche es peor, porque si bien tenemos buses de acercamiento, debemos llegar a esos paraderos) implican un importante grado de exposición. Esto con el objetivo de dotarnos de herramientas para sentirnos más seguras, y abrir un espacio de discusión sobre nuestras problemáticas, esto, en miras a constituir una comisión de mujeres que no solo piense en lo que pasa entre nuestras cuatro paredes, sino que apueste a ser una fuerza de las trabajadoras, y así organizarnos políticamente, como sujetos.
La Izquierda Diario: ¿Qué desafío tienen las y los trabajadores, y el movimiento sindical, ante un nuevo gobierno de la derecha en Chile?
Camila: Creo que el principal desafío de las y los trabajadores es, en primer lugar, defender las conquistas que han habido en el último tiempo como es la lucha y el rechazo a las AFP, uno de los pilares fundamentales que dejó la dictadura; por otro lado creo importante que veamos lo que está sucediendo con los trabajadores en Argentina, que han salido a defender sus jubilaciones ante el ataque de Macri, y me parece que este año se nos viene duro.
También me parece importante que podamos discutir desde las bases cuál va a ser nuestro espacio o motor articulador como clase trabajadora en Chile, considerando la crisis que atraviesa a la CUT, y que ha sido un organismo que no ha defendido hasta el final las demandas de los trabajadores. En este sentido veo importante que nos pongamos el desafío de poder recuperar una nueva Central Única al servicio de las trabajadoras y trabajadores.
Joseffe: Creo que uno de los desafíos que tenemos como trabajadores y trabajadoras es poder volver a rearticular un movimiento fuerte aquí en Chile, que sea forjado desde las bases, de manera democrática; una fuerza viva que sea capaz de enfrentar cualquier ataque del gobierno de derecha que se aproxima.
Me parece muy importante que como trabajadores sepamos que tenemos y podemos hacer política, desarrollar un pensamiento político, y crítico a las posturas de las direcciones sindicales actuales, como de la CUT, que han llevado nuestras demandas a callejones sin salida con los distintos gobiernos, y que nos abramos a debatir e intervenir no solo en los aspectos que nos incumben en nuestro trabajo específico, sino que pensar a nivel de sociedad.
Beatriz: El enfrentar a la derecha no sabemos cuándo será, pero de seguro desde el gobierno buscarán hacer que la crisis la paguemos los trabajadores, y que nuestros derechos sociales y avances más mínimos retrocedan. Es lo que pasó con el presidente golpista de Brasil, Temer, o actualmente en Argentina el presidente de derecha Mauricio Macri, quien protagoniza un fuerte ataque contra millones de jubilados. Lo que me parece importante que sepamos es que ante cualquier ataque de la derecha la verdadera oposición no serán los partidos en el parlamento, sino que lo que podamos hacer en las calles trabajadores, estudiantes, mujeres, diversidad sexual, y otros sectores que han salido a luchar por sus demandas.
Como trabajadores, por nuestra parte, debemos recuperar nuestros sindicatos y ponerlos al servicio de la lucha, organizarnos en los organismos sindicales y las organizaciones de trabajadores para mostrar que enfrentaremos cualquier ataque; osea rayar la cancha. Pero más de fondo, ver que uno u otro presidente de los partidos que han gobernado todos estos años (Concertación, Nueva Mayoría, derecha) o la política del FA, que busca "repartir mejor la torta", no representan los intereses de nuestra clase trabajadora. Tenemos que construir un partido de trabajadores revolucionario, que busque organizar una fuerza política de nosotros, que ponga en el centro que tenemos que enfrentar los ataques aprovechando las elecciones y todas esas vías, pero teniendo en claro que debemos ir a tomar el cielo por asalto, para conquistar una sociedad sin clases.