El juez de la Corte de Apelaciones Jorge Zepeda ordenó construir un memorial de derechos humanos en la ex Colonia Dignidad, que funcionó como lugar de detención, represión y seguimiento de opositores a la dictadura cívico-militar.
Natalia Cruces Santiago de Chile
Jueves 14 de mayo de 2015
El Informe Rettig reconoció que Colonia Dignidad funcionó como un centro de detención, tortura, desaparición y persecución política de la dictadura, en conjunto con la DINA.
Según las denuncias de testigos, dos meses después del golpe de Estado, en noviembre de 1973, se comenzaron a utilizar los terrenos de Colonia Dignidad, donde también se habría formado a agentes de la dictadura en técnicas de interrogatorio.
También algunos integrantes de la Colonia colaboraron en la tortura de detenidos políticos, en conjunto con la DINA y con visitas constantes de Manuel Contreras al recinto. Incluso el gobierno de la República Federal de Alemania entregó información sobre el caso, a partir de la denuncia de un ex colono que escapó del lugar en la década de los 80.
Entre los fundadores estuvo Paul Schäfer, quién fue soldado en la II guerra del ejército nazi y que escapó de Alemania también por denuncias de abuso sexual. En la Colonia, también conocida como Villa Baviera, existían bunkers, túneles, hospitales, escuelas y otras instituciones, funcionando como un lugar apartado y con sus propias leyes.
Durante décadas se mantuvo la impunidad del lugar, debido a su relación con militares y sectores de la derecha pinochetista, hasta que poco a poco comenzó a conocerse lo que sucedió, no solo por la violación a los derechos humanos sino también por los abusos sexuales a menores o adopciones ilegales. Después del golpe se sabe que estuvieron detenidos mineros del carbón, dirigentes políticos locales partidarios de la Unidad Popular y opositores de distintos partidos. En los interrogatorios y las torturas participaron también extranjeros y se aplicaba corriente, golpes, encierros en cajones donde se los golpeaba y hacía girar.
En Colonia Dignidad se hizo seguimiento a miles de personas y entre las cosas que se encontraron –como armas de guerra- aparecieron más de 45 mil de estas fichas, que fueron entregados a organizaciones de DDHH y que actualmente la organización Londres 38 ha hecho públicas, como parte de la campaña “No más archivos secretos”.
La resolución de Zepeda
El juez ordenó la construcción del memorial y también una demanda de reparación de familiares de personas víctimas de violaciones a los derechos humanos. Por otro lado, fueron condenadas varias personas a 10 años de presidio como responsables del secuestro y desaparición del militante del MIR Álvaro Modesto Vallejos Villagrán, entre ellos Pedro Espinoza Bravo, Marcelo Moren Brito, Miguel Krassnoff Martchenko.
Archivos de Colonia Dignidad
http://www.londres38.cl/1934/w3-article-96548.html