El gobernador no solo pretende cobrarles fortunas a estudiantes jujeños que se encuentran en otras provincias sino que además sigue sin autorizar sus regresos.
Miércoles 22 de abril de 2020
Desde el inicio de la cuarentena, Gerardo Morales, informó que se les cobraría montos altísimos a estudiantes jujeños que se encontraban en otras provincias. Con tal de priorizar sus negocios, en este caso con hoteles con cifras que van desde $14.000 a $16.000, juega con la vida de las y los estudiantes que necesitan volver a sus casas.
Esto sin incluir la comida, los recursos sanitarios ni el trasporte, ni muchos menos tener en cuenta la situación económica de cada estudiante.
“Desde el COE todos los días anuncian promesas pero ni si quiera responden los mails” con estas palabras un estudiante acercaba su denuncia a este medio.
“El ente de turismo nos envió un mail masivo con la suma de dinero que teníamos que pagar para volver a la provincia. Era muy costoso y ahora siguen corriendo los días y estamos en la incertidumbre de que va a pasar.
Estoy varado en la provincia de Santa Fe, supuestamente se iba a habilitar un vuelo el día 13 de abril y no pasó. Tengo a mis padres, abuelos que están en grupo de riesgo y necesito volver. En la universidad los comedores están cerrados, tampoco se sabe cómo va a seguir todo. No hay nada planificado, no me dan respuesta de que puedo hacer.”
Como este son muchos los casos de estudiantes que aún están esperando para volver, que se encuentran en las provincias de Tucumán, Córdoba, La Rioja y Santa Fe.
“Tanto los estudiantes como los trabajadores golondrina estamos en una situación precaria, nuestros padres ya no tienen dinero. No nos oponemos a hacer la cuarentena, queremos hacerla pero no podemos pagar una cantidad terrible de dinero.
Estamos en una situación económica crítica, nuestros padres no están cobrando ¿de dónde quieren que saquemos la plata?” denuncia Ana desde Pampa Blanca donde se encuentran varados estudiantes que salieron ayer desde La Rioja.
Los trabajadores golondrinas son esenciales, entonces es responsabilidad del gobierno garantizar su regreso rápido y en condiciones. Mientras que las y los estudiantes están sujetos a una medida arbitraria del gobierno provincial. No se tiene que cobrar ningún hotel, sino realizar test a todos y todas de inmediato para que puedan volver a sus hogares.
No hay recursos ni un plan sanitario serio para enfrentar el COVID19 pero el gobierno pretende recaudar fondos cobrando a estudiantes y con multas en la calle en vez de cobrar impuestos a las grandes fortunas.
Cobrando solo un 3% de impuestos a las grandes fortunas del país se podría destinar por ejemplo un salario de cuarentena de $30.000 para 7 millones de informales donde muchos son jóvenes.
Este ataque a las y los estudiantes es parte de una pelea por quienes pagan la crisis, por eso hay que exigir a los centros de estudiantes que se pongan a la cabeza de organizar y coordinar con las y los trabajadores para dar vueltas las prioridades, porque nuestras vidas están primero.
