Este 24 nos convoca una nueva cita de honor para luchar por nuestros derechos, por memoria verdad y justicia y contra la impunidad de civiles, eclesiásticos y políticos que fueron los que llevaron a cabo primero un laboratorio de ensayo con el Operativo Independencia en nuestra provincia y luego el genocidio que comenzó aquel 24 de marzo de 1976.
Karina Toloza Hija de desaparecidos. Integrante del CeProDH
Jueves 22 de marzo de 2018

Este 24 nos convoca una nueva cita de honor para luchar por nuestros derechos, por memoria verdad y justicia y contra la impunidad de civiles, eclesiásticos y políticos que fueron los que llevaron a cabo primero un laboratorio de ensayo con el Operativo Independencia en nuestra provincia y luego el genocidio que comenzó aquel 24 de marzo de 1976.
De los condenados la mayoría se encuentra con prisión domiciliaria, y muchos continúan en la fuerza de seguridad y las instituciones del Estado y mueren en silencio sin decir qué hicieron con nuestros familiares.
Vemos trágicas muestras de la continuidad del aparato represivo como la desaparición de Julio López, el asesinato de Santiago Maldonado, Rafael Nahuel, y la doctrina Chocobar que justifica el fusilamiento de un niño por la espalda, un caso más de gatillo fácil.
Desde que comprendí que mi papá fue secuestrado y desaparecido en 1977, dí mis primeros pasos en la militancia de los derechos humanos siendo adolescente, cuando Antonio Bussi se perfilaba para ser gobernador. Ya habían pasado las leyes de obediencia debida y punto final de Alfonsín, y los indultos a los genocidas firmados por Menem. Desde aquel momento pasaron años de luchas por el juicio y castigo a todos los genocidas, por eso sé que ningún gobierno nos regaló nada.
Como todos nuestros avances fueron producto de las luchas, nunca dejé de luchar, aun cuando el kirchnerismo se autodenominaba como “el gobierno de los derechos humano”. Así vi cuando los juicios comenzaron a limitarse, donde había escandalosas absoluciones, donde se ponían trabas para avanzar sobre los empresarios y cómo se siguió negando la apertura de los archivos.
Desde el día 1 luchamos por la aparición de Julio López, cuando los funcionarios kirchneristas nos decían que estaba en la casa de una tía; vi cómo el espionaje de la Gendarmería a través del Proyecto X era avalado por el gobierno; vi asumir a Milani como jefe del Ejército, a pesar de las denuncias por haber participado de la dictadura, y vi también como el kirchnerismo lo sostuvo. Por estas y otras razones considero que debemos marchar de manera independiente.
Hoy el peronismo le abrió las puertas a Facundo Maggio, defensor de genocidas, abogado del arzobispado y primero en pedir 2x1, al nombrarlo como juez penal de instrucción. Es el mismo peronismo que hace dos años vota y aplica continuamente las medidas de ajuste del macrismo.
Algunos dicen que este 24 de marzo hay que unirse todos contra Macri, ¿pero la unidad tiene que ser con estos tipos? El 24 de marzo es una jornada de lucha contra la impunidad de ayer y la de hoy, sostenida por los partidos patronales; no puede haber unidad con quienes ascendieron a Miliani, nombraron a Maggio o justifican el fusilamiento de un niño de doce años a manos de la policía.
Como mujer trabajadora creo que es necesario defender también nuestros derechos, los derechos de la mujer. Como el 8 de marzo pasado exigiendo en primer lugar la separación de la Iglesia y el Estado, esa Iglesia que fue participe necesaria de la dictadura, que hasta el día de hoy nos siguen negando nuestros derechos, como el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.
Contra del gobierno de Macri que niega nuestros 30 mil desaparecidos, contra de los gobernadores que garantizan el ajuste, la impunidad, los despidos, el robo a los jubilados; por el juicio y castigo a todos los genocidas y sus cómplices: te invito a marchar este sábado a las 17 desde plaza Urquiza junto al Ceprodh, el PTS en el Frente de Izquierda, junto a otras organizaciones en una marcha independiente.
Karina Toloza
Hija de desaparecido
Integrante del CeProDH