Diversos países condenaron el ataque militar israelí contra manifestantes palestinos en la Franja de Gaza que ha dejado al menos 52 muertos. Estados Unidos a tono con Israel responsabilizó a Hamás.
Lunes 14 de mayo de 2018 17:02
Al menos 52 palestinos -entre ellos varios menores- han muerto y más de 2000 han sido heridos por fuego israelí, según informó el ministerio de Salud palestino, en las protestas en la frontera de Gaza contra el traslado de la Embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén.
El criminal ataque del Ejército israelí, realizando una de las represiones más violentas y mortíferas en los últimos años contra los palestinos, ha llevado a que la Organización de Naciones Unidas (ONU) y varios países se pronuncien contra el accionar de Israel.
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Israel atacó directamente las multitudinarias protestas palestinas contra el traslado de la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén y por la culminación de la "Marcha del Retorno", para reclamar su derecho a volver a sus tierras de las que fueron expulsados al fundarse artificialmente el Estado de Israel.
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El Comité de la ONU para la Prevención de la Discriminación Racial realizó este lunes una declaración urgente en la que pide al Gobierno de Israel que haga cesar "el uso desproporcionado de la fuerza" contra los palestinos que participan en la Gran Marcha de Retorno de Gaza.
Ese Comité también indicó que las informaciones que maneja indican que "varias de las personas que han muerto o resultado heridas no constituían una amenaza inminente cuando se les disparó". Además, denunció que hay indicaciones de que las autoridades israelíes han obstaculizado que los heridos reciban un tratamiento adecuado.
Por su parte Rusia consideró que la medida unilateral de Estados Unidos es un peligro para la paz en la región, según dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en Moscú.El ministro de Relaciones Exteriores del Kremlin, Serguei Lavrov, señaló que el estatus de Jerusalén es un punto central del conflicto entre israelíes y palestinos.
El gobierno francés, que hasta hace unas semanas se presentaba como principal aliado de Estados unidos, llamó a Israel a "la prudencia y a la moderación en el uso de la fuerza". Ésta debe ser "estrictamente proporcional", advirtió cínicamente el ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, como si el ataque de Ejército israelí sobre palestinos, que se manifestaban en la Franja de Gaza, no fuera parte de una política colonialista y de ocupación que viene aplicando el Estado de Israel.
La Unión Europea (UE) llamó a contener la situación para evitar una nueva escalada del conflicto en Medio Oriente. "Todos esperamos la máxima contención para evitar más pérdidas de vidas", dijo la alta representante de Política Exterior del bloque, Federica Mogherini.
Tan brutal fue el accionar del Ejército israelí que las principales potencias, que han sostenido la ocupación sobre los territorios palestinos por parte del Estado de Israel, han tenido que pronunciarse.
Por su parte Estados Unidos mantiene su alianza estratégica con Israel y ha salido a sostener el discurso criminal del gobierno israelí. Desde la Casa Blanca responsabilizaron "directamente" al movimiento palestino Hamás de la violencia desatada tras la inauguración en Jerusalén de la embajada.
"Somos conscientes de los informes sobre violencia en Gaza hoy. La responsabilidad por estas muertes trágicas recae directamente en Hamás. Hamás está intencionalmente y cínicamente provocando esta respuesta y como ha dicho el secretario de Estado (Mike Pompeo), Israel tiene derecho a defenderse", dijo en una rueda de prensa el portavoz adjunto de la Casa Blanca, Raj Shah.
Las autoridades palestinas convocaron este lunes a una huelga general para mañana, martes, cuando se conmemora el 70º aniversario la Nakba (Catástrofe). La medida busca protestar contra la actuación israelí en Gaza, donde murieron hoy 52 palestinos en protestas contra el traslado de la embajada de EEUU a Jerusalén.
El recrudecimiento de la represión del Ejército de Israel sobre los palestinos aumentó este lunes dejando uno de los saldos más sangrientos en años, mientras las autoridades israelíes y estadounidenses celebraban la nueva embajada de Estados Unidos, una verdadera provocación para el pueblo palestino que considera a Jerusalén Este como su capital.
La jornada de este lunes ha dejado una muestra gráfica de lo que significa el mantenimiento del Estado de Israel en Medio Oriente: la sistemática limpieza étnica sobre la que se fundó artificialmente el Estado de Israel en 1948 en los territorios históricos palestinos, que continúa hasta hoy.