Nota De Tapa. La agenda contra las mujeres

Fotografia : Enfoque Rojo

El futuro escenario político, con recambio presidencial incluido, pone en la mira a Scioli -el candidato del kirchnerismo-, Macri y Massa. Todos ellos fieles amigos del Papa argentino y férreos opositores de la legalización del aborto, escondiéndose bajo un falso eslogan de “defender la vida”.

Las declaraciones de María Eugenia Vidal, candidata a gobernadora del PRO por Cambiemos, fueron contundentes. Se reivindicó “a favor de la vida” y, sin nada que envidiarle a la derecha, en menos de veinticuatro horas, Daniel Scioli hizo las mismas declaraciones que la candidata del PRO.

Nada sorprende de los candidatos conservadores enemigos de los derechos de las mujeres y siempre listos para estigmatizar a la juventud. Vidal sostiene, sin sonrojarse, ser una ferviente “defensora de la vida” y que “ninguna mujer elige abortar”, pero ¿cómo explica que ocurran 500 mil abortos por año en nuestro país?

La candidata del PRO planteó que “el Estado tiene que hacer su autocrítica de por qué una mujer tiene que llegar a esa decisión, que nunca es libre” sin decir que en la Ciudad de Buenos Aires, donde el PRO gobierna hace años, se reducen los gastos sociales, se recorta presupuesto de los programas que atienden la violencia contra las mujeres y aumentan los referidos a “Justicia y Seguridad”; sin mencionar, por ejemplo que fue política de su gobierno la entrega de terrenos fiscales a la Iglesia Católica; ocultando que fue el propio Mauricio Macri quien vetó por decreto la ley que aprobaba el protocolo de atención de aborto no punible, poniendo toda clase de trabas y límites a las mujeres para acceder a este derecho en los hospitales públicos porteños.

Para lo que no está preparada la sociedad no es para el debate sobre el aborto, sino para escuchar de estos candidatos una verdadera autocrítica por la responsabilidad que les cabe de la muerte de más de 3 mil mujeres en la última década.

¿Una “victoria” para la clandestinidad del aborto?

Pero estar en contra del derecho al aborto, no es estar a favor de la vida, sino a favor del aborto clandestino que se cobra la vida de cientos de mujeres jóvenes y pobres. Si el PRO y el FpV coinciden en este punto, no es casualidad. Se trata de la política bendecida por el mismo Bergoglio, con la que votaron juntos la reforma del Código Civil a finales de 2014 y también acordaron no avanzar en la legalización del proyecto de ley de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto.

En más de doce años de kirchnerismo, recién en junio de este año el Ministerio de Salud de la Nación actualizó la Guía de Atención de Abortos No Punibles, tal como lo solicitó la Corte Suprema en un fallo histórico de marzo de 2012, en el que insistía en que la judicialización de los abortos no punibles atentaba contra los derechos de las mujeres y de las niñas.

Que se escuche el reclamo por el aborto legal en el XXX Encuentro Nacional de Mujeres

Este año el Frente de Izquierda promueve las candidaturas de centenares de mujeres y activistas de la diversidad sexual por el derecho al aborto. Incluso invirtiendo –de forma histórica– el cupo femenino en varias de sus listas y llevando a muchas compañeras que se han destacado en la lucha por los derechos de las mujeres en los principales lugares, como la diputada Myriam Bregman –que integra la fórmula presidencial con Nicolás del Caño, Andrea D’Atri que encabeza la lista del Frente de Izquierda al Parlasur o la senadora provincial Noelia Barbeito que encabeza la lista de diputados nacionales de Mendoza.

Apenas se dieron a conocer las declaraciones de Scioli, el diputado nacional Nicolás del Caño, candidato a presidente por el Frente de Izquierda señaló: "Nosotros impulsamos en el Congreso junto con diputados de varios bloques la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. El Frente de Izquierda es la única coalición política que tiene en su programa este derecho de las mujeres, junto con la necesidad de promocionar y educar en la utilización de anticonceptivos". Es necesario fortalecer al movimiento de mujeres para que renueve la lucha por estas demandas que han sido desoídas por los políticos patronales: educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir.