Testimonio de una docente perteneciente a grupo de riesgo, sin vacuna y con dispensa rechazada que debe retomar las labores presenciales avasallando el derecho a trabajar desde el hogar, en el contexto de la Emergencia Sanitaria por Covid, al igual que muchos otros trabajadores.
Viernes 19 de marzo de 2021 00:13
Soy jefa de hogar, madre, docente y diabética tipo 1, desde hace 16 años. Al pertenecer a un grupo de riesgo, desde marzo del 2020 transito mi jornada laboral desde la virtualidad y debería continuar con esta modalidad. Pero al tener denegada mi dispensa, deberé presentarme a las escuelas donde trabajo, así como también el resto de auxiliares y docentes de riesgo en situación denegada.
Dicha vulneración de derechos, no solo corresponde al ámbito educativo. Desde el comienzo de la pandemia, a lo largo y ancho del país, hemos visto cómo a los trabajadores de la salud se los obligó desde el Ejecutivo provincial a trabajar todo el año pasado, aún los pertenecientes a grupos de riesgo (mayores de 60 años y con enfermedades preexistentes). Y a partir de este año, las patronales privadas avanzaron en obligar a los trabajadores a concurrir a sus puestos de trabajo, como el caso de Metrovías.
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En el marco de la Emergencia Sanitaria y del regreso a la actividad presencial en los establecimientos educativos de todos los distritos de la provincia de Buenos Aires (RESO-2021-416-GDEBA-DGCYE), los agentes considerados grupos de riesgo (establecidos en la Resolución Nº 207/2020 del Ministerio de Trabajo de la Nación y en la Resolución Nº 90/2020 de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Provincia de Buenos Aires), realizamos un reempadronamiento de las dispensas laborales (DL) para el ciclo lectivo 2021. Hasta aquí todo bien: la documentación pertinente fue enviada en tiempo y forma, en vista de la aprobación de la solicitud de la dispensa. Días después, llegó la denegación, intentos fallidos a toda hora los siete días de la semana para subir nuevamente la documentación solicitada y posteriormente el reclamo adjuntando nuevamente la historia clínica y estudios requeridos aguardando la respuesta que nunca llegó.
Hace unos días, desde la Subsecretaría de Administración y Recursos Humanos de la provincia de Buenos Aires, con aprobación del gobernador Axel Kicillof, se elevó un comunicado que dictaba: ”a partir del 12/03/2021 en Mis Licencias y en SUNA (Sistema Único de Novedades de Agentes) podrá consultarse el estado de las solicitudes de excepción. Las solicitudes que se encuentren DENEGADAS a partir del 17 de marzo de 2021, deberán volver a la presencialidad a partir de esa fecha, dando por resueltos todos los reclamos de GLPI ( ticket de reclamo) por la reauditoría y reclasificación de los casos en el sistema Mis Licencias”.
Mi caso no es el único. Hay muchas más voces que se quieren hacer oír, como Laura, que expresa: “Desde el 1º de febrero vengo tratando de reempadronarme en DL por INMUNODEFICIENCIA. En ese momento la información era que nos teníamos que apegar como grupo de riesgo. A los días de subirla y estar en estado pendiente me mandan a poner DL por INMUNODEFICIENCIA. Eso es subido el día 9 de febrero y denegado el día 13 de febrero. Siempre se tomaron entre 5 o 6 días para una respuesta. Pero más allá de eso nunca fueron muy claros. Me pedían documentación actualizada sin enmienda ni tachaduras por lo que tuve que pedir turno al servicio de reumatología del hospital Argerich donde me atienden desde hace 4 años, desde que llegué a Buenos Aires. En el mientras tanto y para que no se me pase el tiempo del 22 de febrero ( el turno era para el 23) me pongo a buscar especialista, el cual no hallo más allá de fines de marzo o abril. Entonces, pido turno con dos clínicos que me actualizan mi historia clínica revalidándola y estudios de Rayos X con el tratamiento inmunosupresor que llevo a cabo desde los 23 años; y que se vio ratificado hace 4 años con otra medicación inmunosupresora. En resumen, desde el día 17/02/2021 vengo subiendo el reclamo de que no me carga la aplicación la documentación. Me denegan la DL por no presentar documentación actualizada”.
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Las trabajadoras y trabajadores de la educación, miembros de La Marrón exigimos que se respeten las dispensas por grupos de riesgo y por cuidados de nuestres hijes y familiares de riesgo en el marco de la pandemia. Pero también convocamos a todos los miembros de la comunidad educativa que se sumen a esta pelea por priorizar la salud de la población y no las ganancias de las patronales.
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