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Red Internacional
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Ciudad de Buenos Aires. La bronca de los trabajadores se hizo oir en Liniers: "Esta reforma hay que voltearla"

Así lo expresó un trabajador que esperaba el tren en la estación Liniers al recibir uno de los miles de folletos contra la reforma laboral que se repartieron desde el PTS de Mataderos.

Viernes 17 de noviembre de 2017 22:07

La actividad que se realizó hoy en la estación ferroviaria de Liniers, es parte de una gran campaña contra la reforma laboral que quiere imponer este Gobierno contra los trabajadores y trabajadoras.

Ayer las 7.30 de la mañana se realizó un corte en la esquina porteña de Av. Corrientes y 9 de Julio convocado por los trabajadores de PepsiCo donde participó el Movimiento de Agrupaciones Clasistas, MAC. En la jornada se exigió paro nacional en contra de la reforma laboral impulsada por el Gobierno y avalada por al CGT.

Juntos gritamos fuerte “nuestras conquistas y derechos no se negocian"

Desde el PTS Mataderos, como continuación de esta gran pelea realizamos una volanteada por la tarde en la estación de Liniers del ferrocarril Sarmiento donde diariamente viajan miles de trabajadores y trabajadoras, muchos de los más explotados y precarizados.

Como no podía ser de otra manera se hizo escuchar la bronca con decenas de comentarios “Esta reforma hay que voltearla” nos decían algunos, otros con mucha indignación “estos de la CGT son unos vendidos

Varios que pasaban de largo y cuando nos escuchaban agitar en voz alta "Abajo la reforma laboral" volvían a buscar el folleto.

Un trabajador del ferrocarril se acercó, nos pidió el volante y comentó "Nos van a matar con esta reforma". También una señora volvió y dijo: "Esta reforma de porquería querrás decir".

Otro empleado del Sarmiento se quedó charlando y nos comentó sus ganas de militar, cansado ya de tantos ataques a los trabajadores. Una docente nos relató la situación precaria en la que están los acompañantes terapeuticos y que es necesario salir todos juntos a luchar.

Así se multiplicaron los comentarios en repudio de esta contrarreforma. Se podía sentir la bronca de estos trabajadores que dejan sus vidas en sus lugares de trabajo, con jornadas extenuantes, quedando sin tiempo para disfrutar de un paseo o pasar tiempo con sus familias.

En las ultimas horas de luz, la foto fue la de decenas de trabajadores leyendo el folleto mientras mataban la larga espera para la llegada del tren y volver a sus hogares.

Para enfrentar este atropello es necesario un plan de lucha exigiendo a la CGT que llame a un paro nacional.