El miércoles 20 de diciembre se llevó a cabo la Prueba de Conocimientos Disciplinarios exigida por la Carrera Docente. En un comienzo era voluntaria pero desde este año se impuso como obligatoria. Ésta se circunscribe en la evaluación y posterior clasificación de los docentes en tramos de desempeño.
Sábado 23 de diciembre de 2017
Contradicciones de la prueba de conocimientos disciplinarios: una prueba de mucha ambigüedad
Tanto por sus preguntas (mal redactadas) como por su escasa pertinencia con el temario publicado, es que esta prueba fue ampliamente cuestionada por los profesores que la desarrollaron recientemente. A nivel de contenidos, muchos se encontraron con preguntas de conocimientos por fuera de la especialidad (que requieren de exigencia técnica) o desligada del trabajo real y cotidiano que realizan los docentes en su labor.
Posterior a la salida de la evaluación se hicieron reclamos masivos en torno a la organización de la prueba y la importante presión sobre los docentes reflejada en descompensaciónes por stress que se dieron durante el desarrollo de la prueba.
Según la opinión generalizada de los profesores, esta prueba viene a sepultar la posibilidad de poder ascender en los tramos de desempeño en la Carrera Docente. Y más que una ayuda se transformó en una trampa.
Por su parte el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, en vez de oponerse y plantear una crítica al contenido y a la nefasta aplicación de este instrumento de agobio, se limitó a desearles éxito a los profesores y mencionar que la fecha de aplicación no era la indicada.
Desde Nuestra Clase, organización de profesores y profesoras, creemos que esta evaluación sólo representa un nuevo filtro que genera mayor agobio. Un obstáculo para avanzar en una carrera funcionaria, ya desacreditada, jugando con las ilusiones del profesorado. Todo esto evidencia que la única intención de esta prueba es que los profesores no logren avanzar en sus tramos, ni aportar en la formación y actualización de las habilidades que necesitamos los docentes para mejorar nuestra labor educativa. Un mal desempeño redunda en consecuencias punitivas para los profesores que pueden declinar incluso en un despido.
Nuestra Clase
Somos la agrupación de trabajadores de la educación Nuestra Clase, de Chile. Quienes conformamos esta agrupación somos compañeras y compañeros independientes y militantes del PTR