La patronal de los colegios privados de Aragón saca todo su artillería ante la posibilidad, pactada por PSOE y Podemos, de perder 28 aulas concertadas de 1º de infantil (subvencionadas con dinero público) el próximo curso.

Jorge Calderón Historiador y Profesor de Secundaria, Zaragoza
Miércoles 22 de marzo de 2017
La medida ha sido uno de las principales reivindicaciones, de la formación morada para dar el apoyo a los presupuestos de la Comunidad Autónoma de Aragón, del gobierno PSOE-CHA.
Firmas, amenazas y presión política
Desde que hace dos semanas se conoció la noticia, la escuela concertada ha sacado toda "su artillería" para defender prebendas económicas. La Federación Cristiana de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (Fecaparagón), lanzó inmediatamente una campaña de firmas en Change.org , para pedir que se mantuvieran estas aulas.
Para ello hacía referencia a la "libertad de elección de centro" de las familias afirmando que: "Esto podría llegar a suponer impedir el acceso a centros concertados de Aragón a 620 alumnos por curso; el cierre de varios centros concertados; el despido de profesores, de PAS y de otros trabajadores”.
Además esgrimía argumentos jurídicos, al citar una reciente sentencia del Tribunal Supremo que señala que "para negar conciertos educativos tiene que ser condición obligatoria que no exista demanda social en estos centros, independientemente de la oferta de los centros de titularidad pública existentes en la zona". La campaña según esta asociación fue un gran éxito, al conseguir reunir más de 20.200 firmas en su primer día.
Toda esta campaña de presión mediática, parece que dio sus frutos muy pronto. Así al poco de estas acciones, el presidente del Gobierno de Aragón, el socialista Javier Lamba, quiso lanzar un mensaje tranquilizador a estas familias. Según sus palabras, su ejecutivo "no persigue dividir" ni enfrentar a los aragoneses y que necesariamente la educación pública ha de convivir con la privada y concertada. Garantizó además que no habrá "comportamientos arbitrarios" en el cierre de aulas.
Sorprendentemente, a estas palabras de defensa de la educación concertada, se unieron las del líder Podemos de Aragón y Secretario de organización estatal, Pablo Echenique, que llegó a afirmar que el acuerdo establecido con el PSOE para la aprobación de los presupuestos no incluye el cierre de hasta 28 aulas concertadas. "Consiste en no ofertar en Infantil y Primaria clases que a día de hoy no existen" dijo. Estas declaraciones no dejan de ser escandalosas y hasta "sonrojantes", al negar lo pactado, y más teniendo en cuenta que este partido dice tener en la defensa de la educación publica frente a la concertada o privada una de sus señas de identidad.
Educación segregadora, elitista y con cuotas obligatorias
Como vemos la concertada defiende "con todo" el seguir siendo subvencionada con dinero público a pesar de dar muestras continuas y recientes de su falta de transparencia y de su ideología adoctrinaría y excluyente.
La semana pasada, el sindicato CGT, presentó un nuevo informe, en el que denunciaba que el 61% de los centros concertados de Zaragoza escolariza a alumnos con necesidades especiales de apoyo educativo por debajo de la media.
Según los datos recogidos por los autores de este informe, en la pública hay aproximadamente el triple de escolares con síndrome de Down, autismo o problemas de movilidad que en la concertada, y cuatro veces más en el caso de los niños en situación socioeconómica desfavorable o de inmigrantes que no hablan castellano.
Por ello han pedido una mejor distribución de este alumnado entre las escuelas de ambas redes. Hay que recordar que hace meses, este sindicato ya presento un informe que demostraba la existencia de hasta 50 aulas duplicadas (concertadas que puede asumir la pública) .
Además de esto, se sabe que este tipo de centros cobran cuotas, supuestamente voluntarias, ya que al recibir dinero público tienen prohibido cobra un dinero extra, pero que las familias denuncian que en realidad son obligatorias.
Hablamos del uniforme, ayudas al centro o actividades extraescolares. Como ejemplo de esto último, el Departamento de Educación, acaba de abrir una investigación a dos colegios privados concertados de Zaragoza por cobrar a las familias por actividades extraescolares que deben hacer los alumnos si se quedan a comer, con el consiguiente coste económico.
Con todo lo explicado, y podríamos seguir mucho mas, queda claro como este tipo de educación debe desaparecer ya. No podemos seguir permitiendo que estos centros sigan recibiendo ni un euro de dinero público.
Ni siquiera, aunque cumplieran con la cuota que les corresponde de alumnos con necesidades especiales de apoyo educativo. No podemos pensar que un inmigrante, por ejemplo árabe sea o no musulmán, se va a sentir cómodo en un colegio católico, con un cuadro de Santiago "matamoros" recibiéndole en la puerta.
Por ello ahora más que nunca, nacionalización ya de todos los colegios privados y pase de sus trabajadores en las condiciones que expusimos en el artículo anterior.