En la Primaria N° 56 de Laferrere se realizó un inicio de ciclo lectivo dónde los funcionarios de cambiemos dijeron presente, pero toda la comunidad dio acabadas muestras de ausencia. La carrera electoral a la orden del día y la educación como chivo expiatorio de los partidos patronales.
Jueves 7 de marzo de 2019 12:44
En un ridículo acto de inicio de clases, funcionarios de Cambiemos como el concejal Mariano Álvarez se presentaron en la primaria N° 56 junto a pocos docentes y padres.
Queriendo dar muestras de "normalidad", aprovecharon que los docentes estábamos en las calles movilizados y haciendo uso de nuestro derecho a huelga para utilizar el espacio físico de la escuela y a los pocos estudiantes de rehenes, queriendo mostrar una relación social y afectiva con las comunidades.
Los docentes que trabajamos todos los días sabemos bien que los inicios de clases congregan a cientos de padres y estudiantes en las escuelas. Pero es una clara línea política del Gobierno querer falsear una realidad que es irrefutable: el paro contó con un alto acatamiento, llegando en algunas escuelas que adhirieron a un porcentaje del 95% en La Matanza.
Esta pobre puesta en escena es la evidencia de que tanto este gobierno como el anterior, se acuerdan discursivamente de las necesidades principales de los trabajadores y las comunidades siempre en momentos electorales, para sacar un rédito político.
Es de público conocimiento que este gobierno hambreador está dejando a las familias en las calles, dónde la carestía de vida se incrementa día a día, las tarifas de los servicios aumentan todos los meses y el salario no alcanza a cubrir lo básico de una canasta familiar para una familia tipo. El FMI escribe la receta y Cambiemos aplica el ajuste junto a la colaboración del kirchnerismo/peronismo, que posa de combativo mientras forma parte de uno de los principales dadores de gobernabilidad en el Congreso y las centrales sindicales dejan pasar estás medidas sin un plan de lucha.
La organización de la docencia y sus comunidades es la salida de la crisis
Por eso, desde la agrupación Marrón, las maestras de Laferrere militamos todos los días para organizarnos junto a las madres y nuestros estudiantes, para imponer una salida en favor de nuestros intereses y dejar de pagar la deuda, destinando esa plata para educación, salud y trabajo.
Y a su vez, fortalecer una alternativa política en el Frente de Izquierda, para que la crisis la paguen los capitalistas. Porque respondemos a intereses irreconciliables con esta casta de funcionarios y políticos serviles a los empresarios nacionales, internacionales y al FMI.
Por todo esto, el 8M las centrales sindicales deben llamar a paro para que las trabajadoras y trabajadores nos encontremos en las calles. Porque es urgente organizarse y dar vuelta todo.