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Red Internacional
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Estados Unidos. La huelga de docentes de Minneapolis también es una lucha por las vidas de los afroamericanos

La huelga de profesores de Minneapolis ha comenzado esta semana con una gran participación. Más de 4,000 maestros y Profesionales de Apoyo Educativo (ESP’s) están en huelga por primera vez en 50 años.

Domingo 13 de marzo de 2022 11:14

Los docentes exigen que se reduzca el número de alumnos por clase, que se aumenten los salarios (especialmente para los ESP’s, que son en su mayoría personas de color), que se aumente el apoyo a la salud mental de los alumnos y que se garantice la permanencia laboral de los educadores de color. Estudiantes, padres y miembros de la comunidad se han unido a estos maestros en esta huelga.

Las demandas de los maestros son antirracistas

Con el alzamiento por George Floyd, Minneapolis vio el renacimiento del movimiento Black Lives Matter (BLM). La policía reprimió violentamente a los miembros de la comunidad y la gente quemó la tercera comisaría. Unos meses más tarde, el 4 de noviembre de 2020, más de 600 miembros de la comunidad y activistas de BLM fueron arrestados durante una protesta en la autopista 1-94, el mayor arresto masivo en la historia de Minnesota. Todavía hay personas que tienen cargos en su contra. Durante el juicio a Derek Chauvin, que coincidió con el asesinato policial de Daunte Wright, los miembros de la comunidad volvieron a ser reprimidos con gas lacrimógeno y balas de goma, y las Ciudades Gemelas [Minneapolis y St. Paul, ubicadas en lados opuestos del río Misisipi; NdelT] estaban repletas de miembros de la Guardia Nacional.

Con este telón de fondo, no es de extrañar que los maestros que realizan la labor de criar a los miembros más jóvenes de nuestra sociedad estén en huelga por la justicia racial. Todas sus reivindicaciones están directamente relacionadas con la Lucha Negra.

El sindicato reclama aumentos salariales para los profesores y los ESP’s. En Minneapolis, un profesor con maestría puede esperar ganar 75,000 dólares al año después de 20 años de servicio, mientras que en los distritos vecinos de Saint Paul y Anoka-Hennepin, un docente con las mismas calificaciones ganará esa cantidad en sólo ocho a 12 años. El sindicato también exige que el distrito aumente el salario inicial de los ESP de 24,000 a 35,000 dólares al año. Los ESP’s, que son en su mayoría personas de color, actualmente ganan salarios de pobreza. Todo lo que sea menos de 35,000 dólares sería esencialmente un recorte salarial dada la tasa de inflación del 7.9%.

El sindicato quiere que el distrito haga esfuerzos concertados para contratar a profesores de color. Hace un año, el sindicato propuso un Memorándum de Acuerdo (MOA) que proporcionaba protecciones contra el despido de docentes de color. El distrito escolar no lo aceptó y, ahora que la huelga está en marcha, alega que el sindicato no discutirá las iniciativas de equidad, un claro intento de restar importancia a las demandas del sindicato.

Si el distrito escolar estuviera realmente preocupado por la equidad, habría accedido a las demandas de los profesores de reducir el tamaño de los grupos de clase. Además de proporcionar un mejor entorno de aprendizaje para los estudiantes y una carga de trabajo manejable para los maestros y los ESP´s, la reducción del tamaño de las clases también evitaría que los profesores sean despedidos y promovería la contratación, ya que se necesitarían más maestros.

Los docentes piden un mayor apoyo a la salud mental de sus alumnos. Minnesota tiene una de las peores proporciones de estudiantes por consejero del país. Mientras que la proporción nacional de estudiantes por consejero es de aproximadamente 430:1, en Minnesota es superior a 600:1. El trauma combinado de la pandemia y la represión policial violenta y racista ha afectado de manera desproporcionada a los estudiantes de color: necesitamos urgentemente más consejeros escolares para ayudar a los estudiantes a salir adelante.

Afirmaciones falsas del distrito escolar y de los defensores de la desfinanciación de la educación pública

El distrito escolar ha tratado de inculpar esta huelga como anti-estudiantil. La Federación de Profesores y Profesionales del Apoyo Educativo de Minnesota (MFT59) afirma que el distrito ha desinformado sobre la negociación en curso sin mostrar las contrapropuestas presentadas por el sindicato.

Una pequeña organización llamada Minnesota Parent Union (Unión de Padres de Minnesota) ha seguido afirmando falsamente que las demandas del sindicato son racistas. La Unión de Padres afirmó que la huelga es de carácter supremacista blanco y ha pedido a la MFT59 que ponga fin a la huelga y se centre en los "resultados de rendimiento", es decir, en los exámenes estandarizados. Pero las pruebas estandarizadas fueron desarrolladas por eugenistas [N.T.: la eugenesia es una práctica racista de procreación humana que favorece la selección de aquellas personas consideradas "racialmente superiores"] y se han utilizado como instrumentos de racismo: favorecen a los estudiantes blancos acomodados que tienen mejores oportunidades de prepararse para estas pruebas en comparación con los estudiantes de color con bajos ingresos.

La Unión de Padres de Minnesota también es partidaria de la controvertida [Enmienda Page_https://www.minnpost.com/state-government/2022/01/why-a-new-push-for-the-page-amendment-could-end-up-being-one-of-the-2022-legislatures-biggest-fights/], presentada por el juez retirado del Tribunal Supremo de Minnesota, Alan Page, y el director general del Banco de la Reserva Federal de Minneapolis, Neel Kashkari. Si se aprueba, la Enmienda Page cambiaría el lenguaje constitucional de "la uniformidad o eficiencia del sistema" a "la calidad de la educación pública ofrecida a la gente". Esto significa que esta enmienda sustituiría la garantía de una educación pública gratuita por una "educación de calidad" como derecho fundamental, y los exámenes estandarizados serían la medida de esa calidad.

La Enmienda Page necesitaría el voto mayoritario de la Cámara de Representantes y del Senado del estado para poder ser votada a finales de este año. Esto abriría la puerta a los minnesotanos para luchar contra las reclamaciones de desigualdades educativas en los tribunales, pero también facilitaría que las escuelas particulares subvencionadas se abalancen diciendo que son las soluciones a estas desigualdades. Esto, a su vez, reduciría aún más los recursos y el número de alumnos de las escuelas públicas. Las escuelas particulares también conducen a la re-segregación de la educación pública, ya que tienen un importante margen de maniobra en la forma de estructurar sus políticas de admisión, y pueden excluir a ciertos estudiantes.

Para entender por qué la Unión de Padres de Minnesota promueve políticas que perpetúan el racismo y la segregación —al tiempo que afirman que la huelga de profesores de Minnesota es racista— no tenemos más que mirar de dónde ha sacado su financiación este grupo. La Fundación Minneapolis, que históricamente ha apoyado la desfinanciación de la educación pública, ha financiado directa e indirectamente a la Unión de Padres de Minnesota, que es partidaria de la Enmienda Page. Rob Levine, quien ha realizado un extenso trabajo sobre el movimiento filantrópico de reforma educativa, escribe: "Durante 30 años, la Fundación Minneapolis y sus aliados han estado creando, financiando y persuadiendo a la legislatura para que flexibilice los requisitos de las escuelas particulares en el estado. Durante ese mismo período, han estado presionando para que las políticas educativas se basen en datos (pruebas). Una de las estrategias educativas generales de las fundaciones —que no se atreven a decir en voz alta— es alimentar la proliferación de escuelas particulares subvencionadas mediante llamamientos a los padres basados en la raza o la etnia".

La historia del racismo en la educación no puede ser ignorada. Pero utilizar experiencias reales de traumas raciales como táctica para romper los sindicatos con el fin de promover la desfinanciación de la educación pública sólo promoverá más racismo y la re-segregación en la educación. Si realmente queremos ser antirracistas, debemos unirnos a los profesores de Minneapolis en su lucha por las vidas de los negros.

*Traducción: Óscar Fernández