Las agresiones sexuales que se dan lugar durante las famosas fiestas de San Fermín, en Pamplona (Navarra) no son cosa de ayer. Desde hace más de quince años, el movimiento feminista y diferentes movimientos sociales están luchando contra ellas para conseguir erradicarlas.
Jueves 9 de julio de 2015
El debate ha saltado estos últimos cuatro años con más fuerza que nunca a la arena mediática. Pero en muchas ocasiones está enfocado de una manera acrítica al patriarcado y sus múltiples formas de agresión hacia las mujeres.
La publicidad perpetuando el sexismo en fiestas
La publicidad se hace eco de estas agresiones. ¿Para denunciarlas? No, para promocionarlas. Vendiendo en algunos casos, las imágenes de agresiones sexuales del chupinazo –momento en el que se dan por iniciadas las fiestas de San Fermín- como un reclamo turístico.
Este es el caso de un cartel publicitario de un tour operador andaluz para este 2015. Su publicidad consistía en una silueta de toro con un sujetador colgado de un asta. Además, podíamos ver la imagen de una de las agresiones sexuales del año pasado.
Estas campañas han sido denunciadas por la Federación de Peñas de Pamplona, que además añaden que este tipo de publicidad lo único que provoca es la legitimidad de más agresiones sexuales en las próximas fiestas.
Incluso la ’marca Kukuxumusu’ -empresa dedicada al diseño e impresión de merchandising para empresas, campañas publicitarias, desarrollo de imagen corporativa o proyectos multimedia o de animación- tuvo denuncias por campañas sexistas. Concretamente, tuvo que retirar una en la se podía ver a varios personajes con indumentaria característica de las fiestas. Solo una mujer dibujado enseñando las tetas.
Ser periodista en ’sanfermines’, agresión asegurada. Son cientos los y las periodistas que son enviadas a cubrir las fiestas de San Fermín. Muchas de ellas, son mujeres. Y muchas de ellas han sufrido estas agresiones sexuales. Uno de los casos que más repercusión tuvo fue en cuando a una reportera de la televisión pública española, después de ser rociada con vino, sufrió una agresión cuando la besaron sin su consentimiento. A lo que el presentador del telediario le dijo, en tono burlón, que dejase de provocar al joven que acababa de agredirla. Este año, 25 periodistas de 14 diarios navarros se han unido a la campaña “Por unas fiestas libres de agresiones sexuales”
¿Y después de sanfermines? Cinismo y doble moral
Las fotografías del momento del chupinazo donde jóvenes son manoseadas y agredidas, son solo uno de los casos de estas fiestas. Pero parece que es lo que más trasciende porque es de lo hay archivos visuales. Sin embargo, las agresiones sexuales en callejones o bares se cuentan por decenas cada año. Las violaciones o intentos de violación también. Los casos de chicas que son acosadas mientras están disfrutando de las fiestas se reproducen cada año sin que desciendan.
El Ayuntamiento de Pamplona lleva un par de años lanzando campañas de prevención y sensibilización contra la violencia sexista. Este año bajo el título “Por unas fiestas libres de agresiones sexistas/Eraso sexistarik gabeko jaien alde”, lanzan una con el logotipo de una mano roja, que muestra el rechazo a la violencia. Uno de sus objetivos, según las instituciones, es concienciar la respuesta frente a las agresiones sexuales en fiestas. La campaña se verá en carteles, tarjetas, programas y guías de las fiestas en inglés, francés, euskera y castellano.
Muchos colectivos feministas navarros, aunque saludan la campaña del ayuntamiento, critican que durante mucho tiempo han estado solos en esta lucha contra las agresiones sexistas, así como que los intereses que mueven al ayuntamiento son más de marketing para las fiestas que de una verdadera intención de acabar con las agresiones sexuales.
También, parece cínico que en años anteriores donde el ayuntamiento de Navarra estaba bajo el gobierno de UPN –partido conservador relacionado con el Opus Dei- se lanzaran dichas campañas mientras se oponían al derecho al aborto o al derecho a reproducción asistida de madres solteras o con parejas del mismo sexo.
Estos mismos colectivos denuncian que ni siquiera en casos tan graves y mediáticos como el de Nagore Laffage –joven vasca que en los sanfermines de 2008 fue asesinada por un hombre con el que se negó a tener relaciones sexuales- no han tenido apoyo del ayuntamiento ni de las instituciones.
Sin embargo ¿son estas campañas suficientes? Desde mi punto de vista, no. Incluso se podría decir que siguen reproduciendo el legado machista y patriarcal, ya que se centran mayoritariamente en que han ser las mujeres las que deben prevenir las agresiones sexuales o saber actuar frente a ellas.
Campañas así, acotadas a una época del año, son del todo insuficientes para romper con un modelo de dominación patriarcal que oprime y explota a millones de mujeres en el mundo, y que está totalmente naturalizado en nuestra sociedad. Tampoco se dice nada, ni en Navarra ni en el resto del Estado, de las miles de campañas publicitarias sexistas que aparecen en televisión o prensa escrita el resto del año. Así que mientras todos estos elementos sexistas que legitiman en el acoso, la cosificación y las agresiones a las mujeres, no sean erradicados de nuestra sociedad, no se acabará con todos estos problemas. Y para erradicarlos, conocemos el camino a seguir: la organización de la mayoría de las mujeres en lucha contra la alianza criminal del capitalismo y el patriarcado, conquistando sus derechos sin mendigar nada.